Noticias abril 2012
Cultura / 24 de abril de 2012
La Editorial EAFIT, un quinceañero lleno de historias
La Editorial EAFIT alista para octubre y noviembre una gran exposición que servirá como celebración de sus 15 años. Imagen del stand de EAFIT en la Feria del Libro de 2011.
• Durante 2012 esta dependencia, que está presente en la Feria del Libro de Bogotá, celebra sus 15 años en los que ha editado 380 libros, en 21 colecciones, y con 275 autores.• Su jefa, la periodista Ana María Cano, destaca los logros de esta década y media, y subraya que esta unidad eafitense ve en el acceso a la cultura digital a una aliada.
Se deja leer en formato electrónico y en papel. Trae del más allá a escritores que yacían olvidados, pero también les da cabida a jóvenes literatos que se arriesgan a repoblar de letras un mundo sobrecargado de imágenes. Lo suyo es la academia, la literatura, la poesía, la historia, el arte, la música, los números. Para todo tiene ojos.
Se trata de La Editorial EAFIT, dependencia universitaria que en este 2012 celebra 15 años de labores, en los que subraya con vigor y con rigor los 380 libros que ha editado, las 21 colecciones existentes y los 275 autores que han marcado, con su estilo, el devenir histórico de este sello de calidad.
Y en manos de la periodista Ana María Cano Posada se encuentra La Editorial en esta fecha de transición, en la que, en sus palabras, un ser humano vive años de adolescente, lo que significa que “carece de”. Pero al contrario de esa sensación, este es, para ella, un Fondo pleno, y un motivo de orgullo y de confianza para EAFIT.
Ana María no se mira sola en esta conmemoración. Junto a ella destaca a un equipo consolidado y profesional que, en su opinión, cumple una tarea muy importante, que es garantizar la calidad. ¿Su reto? Aumentar la credibilidad de la dependencia.
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Ana María Cano, jefa de La Editorial EAFIT
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¿Cómo toma estos 15 años La Editorial EAFIT?
Con una energía renovada. En primer lugar, por la experiencia de los libros digitales, pues por primera vez tendremos la posibilidad de contar con un título exclusivo de estas características. Está a punto de salir y tratará sobre la historia de la ópera que se ha visto en Medellín desde el siglo XX.
En segundo término, por haber sido los pioneros en el uso de un software de revisión del contenido que hace que cada uno de los manuscritos, que es sometido a la Editorial, pase por lo que se conoce como Turnitin. Este programa permite que estemos seguros de que los contenidos no contienen ningún plagio. Así mismo, da cuenta de los derechos de autor en plenitud.
Tercero, creemos que lo que estamos preparando para celebrar los 15 años, que es la edición de un libro que en su momento fue una ruptura total, En la parte alta abajo, del poeta Helí Ramírez, va a mostrar la palabra y el poder que tiene el arte en ser capaz de dar a conocer una ciudad inédita. Entonces, ese es el mejor homenaje que le podemos rendir a la palabra escrita y decir la fuerza que esta tiene.
Además, vamos a mostrar tres libros en la Feria del Libro de Bogotá, en la que dejaremos ver a igual número de personajes con una trayectoria dedicada al trabajo que ejercen.
¿Qué aporte le ha entregado La Editorial a la ciudad y el país?
Es un aporte cultural grande que -así como ha sido el soporte académico, intelectual o científico de la Universidad en toda su producción- ha servido para publicar nuevos autores, para descubrir nuevos talentos. También, para tener, dentro de nuestro sello editorial, a personas consagradas, es decir, a escritores de renombre, desde Mario Escobar Velásquez pasando por el mismo William Ospina, y muchos otros.
Estas personas han preferido La Editorial por su calidad, y eso es una manera de demostrar que este ítem se ha mantenido durante 15 años.
¿Qué pensadores y académicos se han destacado en las letras de esta dependencia?
Creo que Germán Espinosa es, sin duda, una de esas luminarias que, realmente, tienen un significado especial en el país y que ha pasado por el sello de La Editorial.
Así mismo, está Héctor Rojas Herazo, otro de los nombres imprescindibles dentro de la literatura colombiana. Está Adolfo Castañón, pensador mexicano; y cómo no nombrar una colección como Rescates y, dentro de esta, tener joyas de Rafael Uribe Uribe o Manuel Uribe Ángel, personas que han hecho de esta cultura lo que es.
Y una colección como la de Fernando González, el filósofo que ha alcanzado más generaciones. Es impresionante, de igual manera, ver cómo, a lo largo de los años y en cada feria del libro, más y más jóvenes compran y piden los libros del escritor envigadeño como si estuvieran buscando a un consejero.
¿Cómo ha sido la relación con lo electrónico?
Creo que no haber hecho ninguna resistencia a que es complementario el libro físico y el libro electrónico, y poder usar herramientas de informática como Turnitin es muy importante.
La Editorial, simplemente, está dando cabida a que sus autores tengan cada vez un nivel mejor y tengan una resonancia más grande, porque, por supuesto, un libro digital puede llegar a cualquier parte, y eso para un escritor es una garantía de su manera de extenderse.
Es, en mi opinión, la mirada que debe tener una editorial sobre lo que significa la cultura digital. Considero que estamos entrando en un terreno completamente nuevo y llegando a una cultura distinta.
Así mismo, deben tener calma las editoriales y no, solamente, una postura, sino un acceso a esa nueva cultura digital.
¿Y qué retos se plantea la dependencia hacia el futuro?
El reto más grande, para los siguientes 15 años, es que la calidad de La Editorial y la reputación de este sello sean cada vez mayores. Que más autores busquen estar en el catálogo nuestro y que aquellos que son publicados tengan la certeza de que van a poder tener una gran difusión.
Y lo que será un sueño, pero creo que lo veremos realizado, es que Las editoriales universitarias, reunidos en la Asociación de Editoriales Universitarias de Colombia (Aseuc), tengamos un canal de distribución propio y podamos, así como hemos hecho la Colección Bicentenario entre las Editoriales antioqueñas, tener en el ámbito nacional un canal de distribución como lo tiene España, por ejemplo.
¿Qué tal ha sido esa experiencia con otras universidades?
La experiencia de la Colección Bicentenario ha sido pionera en el país y nos ha traído una cercanía, un nivel de conversación y una perspectiva muy interesante.
Creo que, además de publicar 100 títulos que van a tener mucha representatividad en las instituciones educativas antioqueñas, estamos llamados, las Editoriales universitarioas de esta parte del país, a mantenernos en ese contacto, en ese nivel de relación.
Esto nos demostró que se debe y que se puede, y que el trabajo colaborativo tiene unos resultados a la vista.
¿Cómo ven a La Editorial desde afuera?
Me sentí muy premiada cuando, la primera vez que representé en Bogotá a La Editorial EAFIT, vi cómo era acatado y respetado. Qué bueno, cómo editan, qué ausencia de errores, qué calidad hay en sus ediciones, cómo los libros son finos, cómo los editores son bien escogidos, y ese es otro sello.
También, nos han llamado de Aseuc para que contemos cuál es el proceso de selección que hacemos en EAFIT, porque es un filtro tan grande y tan preciso, que le hacemos a todos los manuscritos, que por eso es acatado en el país como un modelo de transparencia en el que los autores pueden estar en igualdad de condiciones.
¿Y qué joyas editoriales se destacan en estos años?
Tengo que empezar por decir cuáles han sido los más vendidos en la historia de La Editorial. Estos son Bitácora desde el cautiverio, de Gilberto Echeverri Mejía; y Skudmart, que es el libro que Jaime Espinal escribió sobre la empresa y que se llama Química con la muerte. Ambos han tenido reediciones y muy buena acogida.
Y dentro de las joyas yo diría que el Diccionario de Antioqueñismos, de un sacerdote que, con toda paciencia hizo ese trabajo, me parece que vale la pena ser honrado.
Esta es una obra de Julio C. Jaramillo que, dentro de su labor como cura, tenía el ir acumulando palabras del antioqueño y está hecho con todo cuidado. Adicionalmente, hacía dibujitos, entonces el libro tiene adentro los dibujos y los pictogramas que el padre hacía. Lo publicamos dentro de la Colección Rescates.
Creo que de Mario Escobar Velásquez, Muy Caribe está, es una novela verdaderamente sobresaliente, creo que es una joya.
Y hay muchos autores para destacar, pero cómo no subrayar lo hecho por Ignacio Piedrahita, quien inició a trabajar con nosotros desde el comienzo y que su libro, Al oído de la cordillera, alcanza una calidad especial.
Dentro de los libros académicos hay joyas maravillosas, por ejemplo los textos sobre el oro o sobre la geografía de Antioquia, entre otros.
Sin embargo, el recuento de cada uno de los méritos que tienen esos libros académicos es muy difícil hacerlo, pero esta colección tiene un nivel y un reconocimiento muy grande dentro de las librerías y dentro de las otras Editoriales.
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Ana María Cano Posada
Jefa de La Editorial EAFIT
Teléfono: (574) 2619500 Ext. 9462
Correo electrónico: acanopos@eafit.edu.co