Para realizar la fusión propuesta por la Alcaldía de Medellín y EPM es necesario obtener la aprobación del Concejo de Medellín, que realizará el primer debate del proyecto de acuerdo el 22 de abril.
• Los gerentes de EPM y UNE expusieron, hoy viernes 12 de abril en EAFIT, la propuesta presentada ante el Concejo de Medellín. Cuatro docentes eafitenses analizaron la posible fusión.
• El foro contó con la participación de varios concejales. Durante la jornada académica se miraron las ventajas y desventajas que le traería a la empresa unirse a la compañía Millicom.
Aunque las opiniones siguen divididas, las partes coinciden en que la compañía UNE necesita un cambio que contrarreste, lo que algunos consideran, es su estancamiento en el área de telecomunicaciones, pero también en que existen varias alternativas que no necesariamente implican la perdida de la oficialidad.
Esto se afirmó, hoy viernes 12 de abril en EAFIT, durante el Foro Fusión UNE-EPM Telecomunicaciones-Millicom, evento en el que se trataron temas como la posible conformación de la nueva empresa, el nuevo modelo de negocio que se utilizaría, los términos del acuerdo y la decisión de elegir a la compañía sueca como socia.
El foro contó con la presencia de Juan Esteban Calle Restrepo, gerente general de EPM; Marc Eichmann, presidente de UNE; algunos de los concejales de la ciudad; y representantes del sector. La cita sirvió, además, para que cuatro docentes de EAFIT, de las áreas de derecho, servicios públicos y finanzas, analizaran las implicaciones de la posible fusión entre la compañía colombiana y la europea.
Las opiniones, como ocurre desde tiempo atrás, se mantienen divididas, pues aunque algunos consideran que se hace necesaria la transformación de la empresa, otros no comparten la idea de la fusión y sus términos.
No obstante, como se vio en el análisis, una de las grandes fortalezas de UNE es la telefonía fija, industria que se encuentra en riesgo evidente frente al dominio de la telefonía móvil, un mercado en el que, por el contrario, la compañía solo tiene el 25 por ciento de la empresa de celulares con menor representación en el país.
El año pasado las telecomunicaciones tuvieron un menos 10 por ciento de utilidades dentro de EPM, una cifra que fue compensada por otros negocios como el de energía eléctrica y agua, que generaron 100 y 10 por ciento, respectivamente.
Pero la telefonía móvil sigue siendo un negocio potencial que significa el futuro de las telecomunicaciones, por eso la compañía antioqueña no quiere renunciar a esta y sus directivas argumentan que la fusión es el mejor camino para continuar.
Juan Esteban Calle, gerente de EPM, asegura que esta decisión se toma teniendo en cuenta que se trata de una industria cambiante y en pleno desarrollo, y que exige una alta inversión para poder ser competitiva en el país y la región, un monto que, de ser asumido solo por UNE, sacrificaría fondos importantes.
“En vez de pedirle capital al Municipio de Medellín queremos seguir haciéndole transferencias con rentabilidad. Por eso, la fusión es la mejor opción, le seguimos apostando a un negocio muy prometedor y mantenemos la eficiencia y el equilibrio económico”, aseguró el funcionario.
Preguntas desde la academia
Pero, ¿se hace, entonces, necesaria la fusión? David Suárez Tamayo, docente de la Escuela de Derecho de la Universidad, dijo no estar de acuerdo con la propuesta, pues cree que al convertirse en una empresa privada perdería muchos de los privilegios e, incluso, algunas contrataciones que tiene en la actualidad como compañía estatal. También cuestionó la figura de fusión como la más adecuada y la participación mayoritaria de Millicom dentro de la junta directiva.
De manera similar, el docente Hernán Herrera Echeverri, del Departamento de Finanzas, hizo un llamado de atención a las condiciones y los términos que están dentro del proceso de negociación. “Hay que planear y analizar mucho más esta estrategia, y llegar a la mesa con una posición clara, nunca pensando que esa es nuestra única opción. Así se pierde poder”, manifestó.
Ambos coincidieron en la importancia de explorar otras compañías y posibilidades de transformación: la venta del 50 por ciento y la entrega del dinero al Municipio para compensar las transferencias; y la posibilidad de contratar a un tercero para la administración, pero sin vender.
Para Luis Guillermo Vélez Álvarez, profesor del Departamento de Economía, en cambio, la esencia de una empresa estatal del nuevo tipo como UNE debe ser la rentabilidad. “Desde el punto de vista conceptual me parece muy difícil garantizar la presencia del Estado en las telecomunicaciones, por eso creo que hay que tomar decisiones pronto para no tener pérdidas mucho mayores”, aseguró.
En esta misma línea opinó Carlos Alberto Atehortúa Ríos, docente de EAFIT y asesor de UNE, quien se centró en la legislación para defender la necesidad de la fusión. “Nos cambió todo: el entorno, la tecnología, la legislación. La Ley 1341, por ejemplo, nos ubica en una realidad diferente, que fomenta el internet, el móvil, una realidad a la que tenemos que mudar nuestro negocio”, concluyó.
Por su parte, para Marc Eichmann, presidente de UNE, los usuarios serán uno de los sectores más beneficiados de la fusión. “Vamos a tener un portafolio más amplio, mejores productos y más convergentes”.
También, para Aura Marleny Arcila Giraldo, concejala ponente del proyecto de acuerdo, es necesario hacer un diagnóstico de la situación de UNE, ya que se pone en discusión el patrimonio de la ciudad, pero también la participación colombiana viable en el negocio de las telecomunicaciones.
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