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Agencia de Noticias / Septiembre 2013 Investigación / Se quiere más reforma social y menos política criminal

Se quiere más reforma social y menos política criminal

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​La tesis de Juan Pablo Uribe, estudiante de la maestría en Derecho penal de EAFIT, fue evaluado por Elena Larrauri P. (U. Pompeu Fabra, España) y Gonzalo Escobar M. (U. de Girona, España).

• Así lo reveló la investigación Ciudadanos y actitudes punitivas, de Juan Pablo Uribe Barrera, estudiante de la maestría en Derecho Penal de EAFIT.

• El trabajo, que combina la teoría y la labor empírica, analiza las percepciones de las personas alrededor de la justicia penal en Colombia.


Para el 72 por ciento de los encuestados la criminalidad es producto de diversos factores, entre los que sobresalen las precarias condiciones sociales y económicas. Por eso, para el 40 por ciento, la mejor manera de enfrentarla es con el aumento la disciplina en las familias y las escuelas, mientras que el otro 30 por ciento opta por la reducción del desempleo y el fortalecimiento del modelo económico.

Esos son algunos de los resultados de Ciudadanos y actitudes punitivas, la tesis de Juan Pablo Uribe Barrera, estudiante de la maestría en Derecho Penal, en la que se propuso analizar las actitudes de los ciudadanos frente al crimen y al castigo.

La investigación es el resultado de dos años de trabajo, que incluyó la elaboración de una encuesta, con un nivel de confianza del 95 por ciento, realizada a 833 personas, la mayoría estudiantes de pregrado de EAFIT.

Según Uribe Barrera, sus hallazgos lo llevan a una conclusión: la gente se dio cuenta de que el Estado usa el derecho penal como una política social desde hace mucho tiempo, pero hoy le está diciendo ‘deje de criminalizar, deje de interferir en todos los problemas sociales a partir del derecho penal y deme una política social real’”.

De ahí que, contrario a las políticas punitivas que se promueven como una salida a la delincuencia, solo el 10 por ciento de las respuestas de la gente estén orientadas al sistema penal y apenas un 12 por ciento de los encuestados crea que la delincuencia se deba a fallas en esta instancia como penas blandas o ineficacia de policías y jueces.

La docente española Elena Larrauri Pijoan, jurado de la tesis, resaltó este trabajo como punto de partida de un tema que todavía tiene mucho por explorar en el país, sobre todo, porque se trata de la primera investigación de su tipo en el área del derecho. “Del trabajo pueden salir muchas líneas, entre las que se destacan varias recomendaciones en políticas criminales”.

Un asunto de percepción

El resumen del estudio dice: “Para justificar una política criminal expansionista se suele apelar a que esta responde al clamor popular, a una demanda social de seguridad, pero una investigación empírica ha demostrado que no existe una relación directa entre los deseos punitivos de una sociedad y la actual política criminal expansionista”.

El investigador comprueba esta hipótesis con respuestas que dan un panorama desesperanzador sobre la delincuencia. La gente piensa que esta ha aumentado en los últimos años, que también ha incrementado la violencia en esos hechos criminales, y que estos suelen ser cometidos por personas con prontuario criminal.

Pero cuando se hace un contraste con la realidad las cifras muestran lo contrario, de manera que se trata de un asunto de percepción y falta de información, pues se comprobó que en muchas oportunidades las respuestas estuvieron guiadas por la falta de conocimiento del sistema penal.

Algo similar sucede a la hora de poner en consideración el castigo para delitos hipotéticos. “Los ciudadanos suelen poner penas inferiores a las que ponen los jueces, eso quiere decir que no son tan punitivos como nos afirman los medios y los políticos”, explica el abogado.

Otro dato destacable del análisis de Uribe Barrera es que, en su mayoría, los ciudadanos apoyan las penas alternativas a la prisión. Un 46 por ciento de los encuestados cree que la mejor opción para reducir la sobrepoblación carcelaria es encontrar nuevos métodos para castigar a los delincuentes.

Los resultados de este estudio fueron muy similares a uno realizado en la ciudad de Girona (España), tal como lo señaló Gonzalo Escobar, docente de esta institución ibérica y segundo jurado del trabajo.

Para el docente, este es un punto en el que valdría la pena seguir profundizando. “Son dos contextos muy diferentes pero esta semejanza no se puede dejar pasar, es bastante interesante”.

Además de ser la primera investigación que se dedica a estudiar el tema de la criminalización y el castigo a partir de metodologías empíricas, poco usadas en el derecho, el valor de este trabajo radica en la utilización de un marco teórico con matices propios del contexto colombiano, según lo indicó Juan Oberto Sotomayor Acosta, docente de la Escuela de Derecho y asesor de la tesis.

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Marcela Olarte Melguizo
Área de Información y Prensa EAFIT
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Última modificación: 07/09/2015 14:05