Los conceptos de responsabilidad social y sostenibilidad ahora van de la mano. Son el enfoque de una gestión que tiene en cuenta, de manera armónica, el aspecto económico, social y ambiental de una empresa.
Hace 15 años, durante el Foro Económico Mundial, el entonces secretario general de las Naciones Unidas, Kofi Annan, anunció el Pacto Global: un mecanismo de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para "dar una cara humana al mercado global".
Los diez principios que rigen esta iniciativa, y que abarcan ejes temáticos como los derechos humanos, el ámbito laboral, el medio ambiente y la lucha anticorrupción fueron promovidos por EAFIT a través de la Cátedra Pacto Global: aprender, implementar y multiplicar, que inició el 29 de julio y finalizó con un foro el miércoles 29 de octubre.
Según Álvaro Urquijo Gómez, asesor del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo; y Marcos González, presidente de Corresponsables Iberoamérica, las empresas, a través de su responsabilidad social, deben ayudar a construir entornos equitativos y de paz en la sociedad, pues de no ser así las compañías también se verían afectadas en su parte económica y humana.
Por su parte, Carlos Enrique Piedrahita Arocha, presidente del consejo asesor Water Mandate, expresó que las empresas deben preocuparse también por los temas ambientales, en especial por el cuidado del agua.
“En Colombia hemos pensado que estamos bañados en agua y por eso no sentimos la necesidad de cuidarla, sin embargo hace 10 años el país era la sexta potencia hídrica del mundo y ahora estamos en el puesto 26”.
Con este dato, Carlos Enrique Piedrahita motivó a las compañías a reducir el gasto de agua en sus producciones y añadió que son los mismos clientes los que están exigiendo un compromiso social en el mercado.
Y es que Colombia es uno de los países líderes en Latinoamérica en relación a las buenas prácticas que involucran el aspecto humano de las empresas, pero todavía ocupa los últimos puestos en temas ambientales.
Con respecto al papel de estandarización de responsabilidad social y sostenibilidad, Adriana Alonso Rozo, directora general del Icontec para Antioquia, dijo que este facilita el entendimiento e implementación de estos conceptos en las compañías, pero que todavía no se habla de una certificación a raíz de estos.
“Esto es un tema que, hasta el momento, se realiza de forma voluntaria, pero que, sin duda, trae muchos beneficios para una empresa. Sin embargo, la responsabilidad social no es solo un tema de las compañías, sino también de todas las personas de la sociedad”.
Responsabilidad social: beneficios económicos
Según los invitados, las empresas pueden ahorrarse una buena cantidad de dinero al ser responsables socialmente y, a su vez, tener un mejor impacto en la sociedad, pues cuando comienzan a aplicar este concepto tienen mayores ventajas competitivas y el mercado se vuelve la recompensa por su preocupación por lo humano, lo ambiental y lo económico.
En el tema del agua y del medio ambiente, ahorrar recursos ecológicos se convierte en un ahorro monetario. “En Corresponsables empezamos a utilizar solo el agua necesaria, a sacar fotocopias e impresiones por las dos caras de la hoja y a utilizar papel reciclable, entre otros ideas. Así, obtuvimos un ahorro que nos ayudó a pagar unas cuantas nominas”, contó Marcos González.
Todos los panelistas coincidieron en la idea de que si las empresas no implementan la Responsabilidad Social por amor y ética, si lo debe hacer por negocio.
Para María Alejandra Gonzalez-Perez, docente del Departamento de Organización y Gerencia de EAFIT y moderadora del foro, el aspecto ambiental y económico también es decisivo en esta reflexión.
Según ella, aunque Colombia tiene en la actualidad 98 problemáticas ambientales sin resolver, se está trabajando en ligar los temas de desarrollo económico a su agenda social y para esto ya hay una labor en conjunto con la sociedad civil, a través de la Red del Pacto Global.
La Cátedra fue desarrollada por EAFIT en conjunto con la Asociación Nacional de Empresarios en Colombia (Andi) y la Red Colombia del Pacto Global, y se ofreció de manera gratuita a proveedores de las empresas que pertenecen al Nodo Antioquia este pacto como EPM, ISA, Isagen, Postobón, Protección y Sura.
Mayores informes
Maria Alejandra Gonzalez-Perez
Departamento de Organización y Gerencia de EAFIT
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