El 11 de febrero de 2016, el Observatorio de Detección de Ondas Gravitacionales, ubicado en los Estados Unidos, presentó oficialmente la primera observación directa de una onda gravitacional, 100 años después de que Albert Einstein predijera su existencia.
Este logro no solo fue posible gracias al compromiso y trabajo de 42 años de trabajo investigativo, sino también a la financiación de la
National Science Foundation (
NSF), agencia federal independiente que por varias décadas le apostó a esta idea, y que hoy continúa haciéndolo con proyectos de diversas áreas.
La aprobación o no de estos financiamientos depende, principalmente, de los avales que emiten evaluadores externos alrededor del mundo, grupo al que este año se sumó un docente eafitense.
Se trata de
Juan Carlos Duque Cardona, docente del
Departamento de Economía y director del Grupo de Investigación en Economía Especial (
Rise), quien fue convocado para evaluar una propuestas enmarcada en el área de algoritmos espaciales y que, al mismo tiempo, es una de las líneas más sólidas de su grupo.
“Es una buena noticia para la Universidad, para el Rise y para mí como investigador. Esto evidencia los beneficios derivados de la buena labor investigativa, que aunque muchas veces no son tangibles, significan que estamos haciendo las cosas bien”, resalta el docente.
Aunque el tema evaluador debe ser mantenido en secreto por solicitud expresa de la agencia, (incluso el material debe ser destruido una vez culmine este proceso), Juan Carlos destaca que este tipo de sinergias entre la entidad financiadora y los investigadores promueve el desarrollo de métodos multidisciplinarios, innovadores, analíticos y estadísticos.
El académico destaca, además, cómo esta experiencia contribuye al aprendizaje, teniendo en cuenta que en la actualidad, la NSF apoya más de 12 mil proyectos y destina un presupuesto de 7.5 billones de dólares para promover el avance de la ciencia. De hecho, por cuenta de este apoyo, 217 científicos han alcanzado Premios Nobel en sus más de 60 años de existencia.
Un reconocimiento también para el Rise
La selección de las propuestas más rigurosas, objetivas y prometedoras, también habla de la calidad, experiencia y excelencia de los evaluadores, entre los que ahora se cuenta con el nombre de Juan Carlos Duque.
El docente menciona que esta invitación le genera una reflexión sobre la manera en cómo se piensa la investigación en el país, pues significa que el grupo no es reconocido únicamente por sus productos, sino por su integralidad.
“En el Rise siempre hemos tenido la premisa básica de que nuestro objetivo final no es la publicación como tal, sino el impacto que logramos con diga publicación”, anota y así lo confirman los indicadores de este grupo, que a la fecha registra citaciones en documentos académicos en un promedio de una cita cada 2.7 días, cuando en el año 2010 era de cada 13.5 días.
“Pero el impacto no ha sido solo en lo académico. Es importante destacar que la gran mayoría de avances logrados también los hemos podido aplicar en proyectos de transferencia tecnológica y en nuestra nueva spin off Rise-SIG”, explica.
Finalmente, el docente manifiesta la necesidad de que algunas mediciones y ránquines universitarios ponderen este tipo de impactos y participaciones, así como en la importancia de financiar la investigación en ciencias sociales, sobre todo en un país como Colombia, que está atravesando un proceso de transformación social y económica.