El contacto permanente, y a través de diversos medios, entre estudiantes, docentes, investigadores y personal administrativo de universidades en todo el mundo hace parte de las nuevas dinámicas que dan forma a planes de estudio y estrategias de docencia e investigación. EAFIT no es ajena a esta manera de entender los fenómenos académicos y, a través de mecanismos como movilidad, diseño de currículos, prácticas académicas, doble titulación, cooperación internacional e investigación, fortalece su estrategia de internacionalización.
Dicho proceso empieza a tomar forma a partir de mecanismos denominados "in situ", o en casa, y cuyas implicaciones pasan por transformar los currículos de los diferentes programas, sean de pregrado o de posgrado, a través de contenidos académicos en otras lenguas; bibliografía universal, y ejemplos y referencias a problemáticas y fenómenos globales, no únicamente locales, aunque este último aspecto no se pierde de vista.
Eso permite a los estudiantes, según Marcela Wolff López, jefa de la Oficina de Relaciones Internacionales de EAFIT, "tener un aprendizaje comparativo e identificar aspectos propios de lo colombiano y lo latinoamericano, y su relación con otros países. A eso contribuyen las actividades internacionales extracurriculares; la movilidad de profesores y estudiantes, quienes traen conocimiento al aula, y el idioma. Este último, por ejemplo, es muy importante: en EAFIT, apuntamos a internacionalizar el currículo a partir de requisitos idiomáticos. Eso significa que, en sus clases, los alumnos leerán en idioma extranjero y tendrán profesores extranjeros visitantes".
La internacionalización dentro del currículo se puede lograr de muchas formas, según expresa el profesor alemán Sascha Furst, vinculado al Departamento de Negocios Internacionales de EAFIT, quien explica que una de las maneras es poner a los estudiantes en interacción con extranjeros en, por ejemplo, concursos de planes de negocio en el que se desempeñan con personas que están fuera del país con las que se comunican de manera virtual. “Cada vez tenemos más estudiantes de intercambio, y lo que buscamos es tener un equilibrio entre estudiantes foráneos y nacionales en el salón para que puedan interactuar, no solamente en el exterior, también aquí en Universidad”, dice Sascha.
Conocimiento móvil
Las estrategias de las que se sirve la internacionalización para proyectar una universidad hacia el exterior parten de los convenios, la llave maestra para acceder a iniciativas de comunicación científica y académica entre pares, y facilitar su movilidad y la de los conocimientos que llevan consigo.
"En EAFIT tenemos convenios marco, que son una expresión de voluntad de trabajar juntos —explica Marcela—. En ellos se enumeran las técnicas para canalizar el trabajo conjunto: movilidad, investigación, eventos, publicaciones compartidas, entre otras. Pero estas solo sirven con un convenio específico, por lo que solemos firmar uno de intercambio de estudiantes. Eso garantiza acciones rápidas de movilidad mientras se generan los lazos entre investigadores para hacer proyectos científicos o titulaciones dobles".
La Universidad logró, en 2017, establecer 33 nuevos convenios nacionales e internacionales, lo que, sumado a los 272 ya existentes, permitió estrechar vínculos con 183 instituciones socias, en 36 países, incluidos Alemania, Bélgica, Francia, Reino Unido, India, Vietnam, Estados Unidos, México, Costa Rica, Brasil y Argentina.
De esta manera, surgen iniciativas de movilidad, un portafolio de oportunidades para estudiantes nacionales, profesores e investigadores con deseos de estudiar e investigar en otros países, y para extranjeros cuyos proyectos académicos, docentes y de investigación incluyan su paso por Colombia.
En el caso de la movilidad estudiantil, la Universidad cuenta con estrategias como prácticas en el exterior, doble titulación, intercambios, entre otras, cuyos beneficios incluyen no solo tener una experiencia por fuera del país, para complementar estudios en el área disciplinaria elegida, sino también comparar las metodologías de la educación locales con otras foráneas; conocer profesores diferentes, e interactuar con estudiantes en otros idiomas y culturas. Tales beneficios son extensivos a los estudiantes extranjeros que visitan la Institución.
Solo el año pasado, a EAFIT entraron a estudiar 247 estudiantes extranjeros, y hubo 209 nacionales en intercambio académico.
Dos títulos, dos culturas
La doble titulación es una forma de movilidad que permite a un estudiante obtener dos títulos en un solo período, uno colombiano y otro en una universidad extranjera, ya sean de pregrado, posgrado o una combinación de ambos. Para eso, se evalúan ambas mallas curriculares y se evidencia cómo pueden complementarse, por medio de periodos de estudio en cada una de las instituciones.
Tal es la experiencia que vive Florian Kirstein, del programa de doble titulación en EAFIT, quien comenzó sus estudios en la Universidad de Ciencias Aplicadas Bremerhaven (Alemania), desde septiembre de 2013, y hoy cursa el pregrado de Ingeniería de Producción en la Institución, en donde permanecerá por tres semestres, para fortalecer, también, su conocimiento del español.
"Soy del norte de Alemania y he estudiado en Finlandia y China. Quise venir a Medellín porque me parece que hay una gran mezcla entre cultura y naturaleza", relata el extranjero.
Pese a que percibe diferencias entre las formas de estudio en ambos países, sobre todo en el aspecto evaluativo —mientras en la universidad alemana se aplica solo un examen, al final de semestre, aquí es necesario presentar varios durante el mismo—, Florian no logra decidir aún cuál es, para él, el mejor sistema.
Investigación sin fronteras
Las pasantías investigativas de estudiantes de doctorado y maestría en ciencias surgen como oportunidades de empezar a tejer redes científicas, posicionarse como universidad y empezar a conectarse en el ámbito internacional. Por su parte, los investigadores, docentes y estudiantes se movilizan para realizar proyectos conjuntos con pares de otras universidades; participar en congresos y exponer sus investigaciones, o hacer parte de una red.
Félix Londoño González, director de Investigación de EAFIT, asegura que "cuando un investigador va a trabajar a un laboratorio de otro país por cierto tiempo, y se inicia un trabajo entre equipos, se presenta movilidad de alto impacto. A veces, un grupo de investigadores se desplaza a laboratorios extranjeros, pues necesitan análisis y pruebas específicas. Cada vez el sistema es más rico en iniciativas de intercambio, movilidad y trabajo colaborativo. Además, hay publicaciones, pasantías y tutorías de posgrado en compañía de cotutores extranjeros".
El directivo destaca que la participación de investigadores en eventos internacionales permite establecer interacciones con otros colegas, mientras que los resultados de las investigaciones locales son leídos por pares académicos, dando inicio a un intercambio de correspondencia, cuyo resultado puede ser un proceso de citaciones y las primeras puntadas de un tejido de intercambios, a través de la divulgación de publicaciones. Todo ese proceso, bien encausado, desemboca en iniciativas de trabajo colaborativo de largo aliento.
La mirada internacional y colaborativa fortalece, en opinión del directivo, a los equipos de trabajo, y enriquece la labor del investigador, insumos fundamentales para la evolución de una universidad construida desde la docencia con investigación, como EAFIT.
Cooperación internacional
El conocimiento es un bien universal. Hoy, la imagen de los investigadores solitarios en laboratorios y oficinas son cosa del pasado, en un mundo en donde la ciencia colaborativa marca la pauta del desarrollo y la innovación. Eso, a través de la confluencia de múltiples disciplinas, desde varias partes del mundo.
En ese sentido, la internacionalización desde las universidades, a través de la interacción entre pares y colegas en los contextos nacional e internacional, adquiere importancia capitular, al permitir el encuentro de puntos de vista y capacidades alrededor de diversas áreas del conocimiento.
Sin embargo, para otorgar a la internacionalización en investigación el lugar que se merece en la proyección de una institución de educación superior, en concepto de Juan Carlos Duque Cardona, coordinador del Grupo de Investigación Research in Spatial Economics (RiSE) de EAFIT, es necesario desmitificar el acto de invertir en investigación como la apuesta por un intangible.
"Realmente es invertir en la posibilidad de generar productos que, a la larga, representarán incrementos importantes en los ingresos de la universidad —manifiesta Juan Carlos—. Para que funcione un modelo de institución centrado en investigación hay que apalancarse en el conocimiento de otras universidades vía colaboración. Entre más cabezas pensantes haya mejor resulta la investigación, por lo que es condición indispensable fomentar esos vínculos externos".
De hecho, de acuerdo con el artículo Research networks and scientific production in Economics: The recent Spanish Experience, elaborado por Juan Carlos Duque en compañía de Raúl Ramos y Vicente Royuela, ambos PhD en Economía de la Universidad de Barcelona, y publicado en el número 32 de la revista Ecos de Economía, las colaboraciones en investigación de una universidad con otras del exterior incrementa en un 23 por ciento su productividad.
Lazos fuertes
Estas relaciones de intercambio de conocimiento requieren tiempo, y un trabajo científico muy serio, para crear un buen nombre por parte de investigadores, grupos y universidades, tratando con respeto a los coautores de artículos de otras instituciones.
"Cuando aceleras artificialmente un proceso de búsqueda de colaboraciones es fácil cometer errores —afirma Juan Carlos Duque—. La primera etapa, el hallar coautorías, te puede llevar a escribir hasta tres y cuatro artículos por año, pues tienes coautores contigo. Al aumentar el nivel de productividad empiezas a sonar más en ciertos contextos, obtienes gratuitamente la colaboración de investigadores de primer nivel y aumentas la categoría de la Universidad, lo que se refleja en más matrículas".
El asistir a congresos, preferiblemente como ponentes, permite hacer nuevos socios y generar ideas frescas de investigación. Eventualmente, los grupos de investigación terminarán formulando proyectos y obteniendo recursos internacionales, como fue el caso de EAFIT, quien llamó la atención del Research Councils UK Global Challenges Research Fund (RCUK GCRF) para ser incluidos en el programa Peak Urban, y colaborar con la Universidad de Oxford a través de Rise y el Centro de Estudios Urbanos y Ambientales (Urbam).
La cooperación internacional permitió a la Universidad trabajar en siete proyectos de innovación, en compañía de expertos de América Latina y Estados Unidos, en cinco países de la región —Bolivia, Chile, Brasil, Perú y México—, durante 2017.
Patentes
La transacción de recursos, capacidades e información no se da solo en el relacionamiento entre instituciones, sino también en la elaboración de propuestas destinadas a participar en convocatorias internacionales de cooperación científica, académica o para el desarrollo. También está presente en materia de patentes o modelos transferibles a otras comunidades o aptos para ayudar a fortalecer otras instituciones.
"EAFIT, como entidad que no solo transmite conocimiento, sino que lo crea, descubre y desarrolla, no puede investigar mirándose el ombligo. Entre más colaboren nuestros investigadores y los de otras universidades del mundo, más se visibiliza la generación de nuevo conocimiento, y esto desemboca en la comercialización del mismo. No vamos a ser un actor académico legítimo del sector de la cooperación si no tenemos estándares altos y una red de relacionamiento muy bien manejada", concluye Marcela Wolff.
De hecho, entre las 39 patentes que le han sido otorgadas a EAFIT, cuatro son internacionales, incluidas una de invención para aumentar la productividad en los cultivos de banano, de la mano de Augura, y otra para detectar falencias en las ruedas del sistema metro, en conjunto con el Metro de Medellín, ambas en Estados Unidos.
EAFIT sigue cosechando frutos en la labor de internacionalización que hacen docentes, estudiantes, investigadores y demás personal para ampliar las fronteras del conocimiento. Hitos como la transferencia de conocimiento entre la Universidad de Purdue y el Centro de Computación Científica de Alto Rendimiento; la relación entre el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) y el Grupo de Innovación Educativa; el carro solar que competirá este año en Bélgica en el marco del proyecto Kratos; el Centro de Estudios Asia-Pacífico, entre otros, son solo un asomo de lo que está por venir.
De acuerdo con Marcela Wolff López, jefa de la Oficina de Relaciones Internacionales de EAFIT, está muy bien en términos de movilidad. "En Medellín somos líderes, muy de la mano con la Universidad de Antioquia, la cual tiene el triple de la población estudiantil. En Colombia, somos un referente importante. Además, hace tres años, hicimos un informe sobre movilidad entrante, en la red de universidades acreditadas colombianas Colombia Challenge Your Knowledge, y Antioquia quedó como la región que recibe más norteamericanos en diferentes tipos de movilidad".
|
Mayores informes para periodistas
Alejandro Gómez Valencia
Área de Información y Prensa EAFIT
Teléfono: 574 2619500 ext. 9931
Correo electrónico: jgomez97@eafit.edu.co