A los 12 años de edad, y acompañado de su padre, Carlos Errázuriz Henao escaló el Nevado Santa Isabel en Tolima y, desde entonces, encontró la manera de repetir esta hazaña en varias ocasiones hasta que, tres años más tarde, lo consiguió en solitario.
Esa anécdota marcó el inicio de una pasión que este eafitense pudo desarrollar más tarde durante su pregrado en Geología en EAFIT, y que hoy lo tienen escribiendo la historia de los volcanes en Colombia.
Y es que debido a ubicación en la zona de interacción entre tres placas tectónicas —la placa Nazca, la placa Suramericana y la placa Caribe-; la importante lista de volcanes que tiene (muchos de estos activos), y las nuevas zonas de actividad volcánica que se han encontrado en los últimos años, entre otras razones, este egresado ha encontrado en el país el terreno idóneo para desarrollar sus investigaciones.
Nevado del Huila, Nevado del Ruiz, Nevado del Tolima, Santa Isabel, Cumbal, Puracé, Cerro Negro, Sotará, Galeras, Doña Juana, Azufral, Petacas, Cerro Bravo, Romeral y Cerro Machín son algunas de esas formaciones volcánicas que ha estudiado este eafitense.
Carlos, quien también realiza investigaciones en México, dedicó su trabajo de grado al estudio de los depósitos y rocas volcánicas que se encuentran en la superficie y a entender cómo se originan esas rocas. Sus hallazgos lo llevaron a concluir que los materiales en forma de magmas que producen los volcanes a lo largo del territorio colombiano tienen la misma composición de una mezcla entre los sedimentos del Océano Pacífico y el manto terrestre. El investigador explica que obtuvo una serie de muestras de roca de los centros eruptivos del Santa Isabel (en la Cordillera Central) para analizar geoquímicamente su composición de roca total y la de sus minerales, y extraer los datos que le permitieran entender los procesos que ocurren en la profundad del volcán.
“Con estos datos inicié una comparación con otros volcanes del país, principalmente el Cerro Machín. Los volcanes tienen una química muy similar a si fundimos los sedimentos que están en el Océano Pacífico colombiano con el manto terrestre; todos estos análisis químicos nos muestran que estas rocas responden a una mezcla entre estos dos componentes. La placa Nazca que subduce bajo la placa continental de Suramérica está incorporando estos sedimentos a medida que se introduce en el manto, lo que forma los fundidos, es decir el magma, que luego harán erupción en los cráteres de los volcanes colombianos”, explica.
El geólogo eafitense inició esta tesis en octubre de 2016. Sus ideas fueron concebidas en México, donde hizo una práctica investigativa, y realizó los análisis y desarrolló la hipótesis gracias al apoyo de Arturo Gómez Tuena, profesor de la Universidad Autónoma de México (Unam) y experto en la Faja Volcánica Trans-Mexicana, quien ha estudiado las rocas volcánicas en México y el mundo.
Y el estudio continúa con los sedimentos
Este trabajo de grado, que fue laureado con mención de honor durante su graduación, es un esfuerzo en colaboración entre el Departamento de Ciencias de la Tierra de EAFIT y el Centro de Geociencias de la Unam.
“Así mismo, tengo proyectos con profesores de EAFIT y la Universidad Nacional de Colombia, donde actualmente adelanto mi maestría, y mi idea es ampliar la base de datos de los complejos volcánicos para entender bien lo que está pasando. Por ejemplo, los sedimentos en Colombia aún no se han analizado extensamente, esa es otra parte de mi proyecto. Actualmente, estoy en México trabajando con el profesor Arturo Gómez con el fin de darle continuidad a esta investigación”.
Para Carlos, los volcanes dicen mucho a propósito de la historia de la Tierra. Y, desde su punto de vista, el país tiene una de las regiones volcánicas menos analizadas en todo el mundo, por lo que considera que su investigación podría convertirse en un importante precedente para propiciar otros estudios, especialmente con colegas geólogos e investigadores de la Universidad.
En su recorrido profesional otros de sus trabajos han sido expuestos y debatidos en eventos como el Congreso de Geología Colombiano y la Junta Anual de Geólogos en Estados Unidos.