Este perfil profesional emergió en la década de 1990, a partir de la apertura económica que se inició en el país.
Por su parte, Administración de Negocios procura atender la necesidad permanente de formar directivos de empresas y líderes para todo tipo de organizaciones, que a manera de ‘directores de orquesta’ sean capaces de planear, organizar, dirigir y controlar diversos de procesos en cualquier organización.
Los Administradores de Negocios deben ser capaces de entender múltiples niveles de análisis (individuos, organizaciones, contextos macro político-legales, sociales e internacionales), en cualquier sector de la economía.
Esto, para tener la capacidad de dirigir armoniosamente los distintos procesos, proyectos y áreas funcionales de las organizaciones, es decir, sus finanzas, mercadeo, gestión humana, proyección internacional, entre otras.