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Como es tradición, el primer viernes de noviembre se realiza la jornada Periodistas en la Carrera, del pregrado en Comunicación Social.
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El evento llegó este año a su edición número 12 que tuvo como tema las "Historias y noticias animales"
Una faena de dedos digitando a toda velocidad, hojas de cuaderno y libros rayándose por doquier y estudiantes yendo y viniendo de computador en computador fue lo que se vivió el 6 de noviembre del 2015 en el tercer piso del bloque 38, un espacio que, por más de 12 horas, se transformó en una sala de redacción periodística con todas las de la ley.
La tradicional jornada de Periodistas en la Carrera ocupó la mañana, la tarde y hasta parte de la noche de más de un centenar de estudiantes de todos los semestres que vivieron en carne propia el ajetreo y la tensión que produce el trabajo periodístico. Carlos Mario Correa, docente del pregrado y coordinador del evento, lo advirtió desde mucho antes: "Esto es una maratón de periodismo, un evento de práctica periodística que se hace con estudiantes-reporteros".
Natalia Zuluaga, una estudiante que enfrentó ese día su última edición de Periodistas en la Carrera –pues ya está próxima a terminar la carrera-, también fue enfática con el tema de la tensión: "Es una oportunidad de sentir el estrés que significa trabajar en un medio, yo no lo conozco porque aún no he salido a práctica pero, me imagino, debe ser el estrés más rico de todos".
Para Daniel Hermelin, actual jefe del Pregrado, el evento representa algo que no muchas veces se ve en las universidades: "Es la posibilidad de tener una jornada como se hace en un medio de comunicación en la vida real, una jornada en que en un mismo día hay que resolver un montón de cosas, que hay que sacar una nota, o dos o más. Se lleva siempre esa disciplina y esa prisa, y así se parece un poco a una sala de redacción real".
Desde las siete mañana las aulas destinadas para el evento se comenzaron a llenar de estudiantes que madrugaron para poder hacer rendir el día. A las siete y media, ya no había computadores libres y a los que iban llegando les tocó instalarse, con sus propios equipos, en los pedazos de escritorio libres o, incluso, en el suelo.
No había terminado la mañana y ya el tercer piso del bloque 38 estaba tomado en su totalidad por los estudiantes-reporteros. La emisora Acústica, que realizó durante el día una amplía producción de entrevistas, fue el lugar en el que algunos estudiantes se refugiaron del bullicio que se vivía en los otros salones para terminar, en calma, sus trabajos periodísticos. Lo mismo sucedió con el Medialab, que alojó a una gran cantidad de personas. Por todos lados se veían grupos reunidos para revisar un trabajo, profesores contagiados del trajín recorriendo con agilidad los puestos de los estudiantes y aconsejándolos en sus escritos. Lo mismo con los estudiantes de últimos semestres, que se hicieron visibles colaborándoles a los de semestres más bajos con sus trabajos.
La camaradería predominó en el ambiente, y eso es, según el docente Juan Gonzalo Betancur, lo más significativo del evento: "Es de los pocos momentos en los que todos estamos juntos y por muchas horas podemos conversar de algo distinto a lo académico. Yo resaltaría el valor pedagógico de la jornada. Implica el compañerismo, el trabajo en equipo, la horizontalidad entre profesores y estudiantes como cuando estamos todos juntos tratando de solucionar un problema que es, por ejemplo, cómo organizar un buen título".
Noticas animales, el tema de esta edición
Ana Cristina Restrepo, docente del pregrado, es una de las que llega más temprano en cada jornada de Periodistas en la Carrera. En esta edición hizo su saludo de bienvenida en con una consigna bien particular: "Si llevamos uno, o dos, o tres semestres hablando de humanizar la noticia, hoy vamos a hablar de animalizar la noticia".
Y es que la jornada de Periodistas en la Carrera tiene cada año un tema particular con el que los estudiantes realizan sus trabajos. En este 2015 el turno fue para el mundo animal. Así, fue corriente encontrar en los apuntes de los cuadernos que colmaban los escritorios datos sobre el número de aves decomisadas por la policía en el último semestre, o la cantidad de perreras autorizadas en la ciudad, o los precios por los que se consiguen, en el mercado negro, muchas especies vulnerables de la región.
Con el tema de este año, muchos estudiantes conocieron un mundo en el que habitan un sinfín de relatos, pero que muchas veces no sobresalen en los medios tradicionales, como, por ejemplo, el mundo del maltrato animal, de las peleas de perros o de los animales no domésticos que habitan en el Valle de Aburrá.
"Creemos
que los temas, y el de esta edición en particular -las historias y noticias animales- involucran a la sociedad todo el tiempo", explica Carlos Mario Correa. "Para empezar, el área metropolitana tiene un censo que dice que hay un millón de mascotas, entre perros y gatos, en Medellín y el área metropolitana. Eso muestra un afecto por los animales. Pero igualmente, está la parte contraria: el maltrato, el abandono, el sufrimiento de esos seres que para algunos son odiados, despreciados. Con el tema de los animales se puede ver todo lo que es el ser humano en su relación con otros seres. Aquí queremos mostrar eso".
Se estima que para este año se presentaron entre 140 a 150 trabajos periodísticos en distintos géneros y formatos. Pasadas las 10 de la noche, todavía se podía encontrar en las salas de redacción a algunos estudiantes-reporteros que, con la ayuda de los profesores-editores daban los últimos toques a sus productos que participarán en la premiación que en el 2016 se realizará durante los Días de la Comunicación.