Llegó al cargo por votación en las elecciones que se hicieron el 14 de febrero en Nom Pen (Camboya). Ana María, de nacionalidad colombiana y eafitense indiscutible, es la primera mujer de América Latina que llega a la presidencia global de la Asociación Internacional de Estudiantes de Ciencias Económicas y Comerciales (Aiesec).
Esta ingeniera de diseño de producto ahora se prepara para afrontar una nueva responsabilidad como el de ser la primera colombiana en ser presidente de Aiesec Internacional, una de las organizaciones estudiantiles más grandes del mundo que hoy reúne a cerca de 100.000 universitarios.
“Antes de llegar a mi actual puesto, en junio de 2014, me nombraron la primera vicepresidenta latina responsable por las operaciones en Europa Occidental y Norteamérica”, comenta Ana María, quien se encuentra en estos momentos en Róterdam (Holanda).
El camino de esta ingeniera para llegar a liderar la nueva visión de Aiesec en el mundo comenzó en 2009, cuando se vinculó a la oficina local de la organización en EAFIT donde fue integrante voluntaria, vicepresidenta local de intercambios entrantes y presidenta local. Luego se vinculó al equipo administrativo de la oficina nacional de Aiesec Colombia, en Bogotá, donde ocupó la presidencia.
Entre los objetivos que tiene planteados destaca el de crear la visión para 2020, porque cada lustro la organización define su estrategia a mediano plazo y este año termina un plan de gestión y comienza uno nuevo. El otro reto para Ana María es afianzar las alianzas estratégicas.
“Tenemos aliados en el nivel global a empresas como PwC, DHL, Microsoft, Unilever, pero este período vamos a poner un especial enfoque en el sector público e intergubernamental como la ONU”, dice.
Por sus cargos en la Asociación, la líder viaja por diversos países trabajando con personas de diferentes culturas, lo que le ha permitido superar sus debilidades y afianzar sus fortalezas. También, gracias a eso, puede reconocer cómo las enseñanzas universitarias le han aportado a su vida.
Aiesec
El organismo tiene como misión promover la paz y el desarrollo del talento humano, objetivo que busca, en parte, con los cerca de 30.000 intercambios estudiantiles internacionales que facilita cada año. Tiene integrantes en 124 países y territorios, y worldblu.com la ha calificado, ocho años consecutivos, como una de las organizaciones más democráticas para trabajar en el ámbito mundial.
La de Colombia -en EAFIT- fue la primera oficina de Aiesec que se abrió en Latinoamérica, en 1962. Hoy, el país es el cuarto con mayor número de intercambios al año (3.000), superado por las sedes de India, China y Brasil.
“Esto significa una gran responsabilidad para Aiesec en Colombia porque tiene el reto de romper el paradigma de la imagen que se tiene de nuestro país en el exterior”, asegura Ana María.
De hecho, uno de sus deseos es que la historia de Aiesec EAFIT se repita en toda las oficinas en el ámbito global. “La de la Universidad pasó de ser una oficina local que, en menos de cuatro años, logró pasar de ocho intercambios por año a más de 400, porque en promedio cada oficina en el mundo hace 27 intercambios anuales y nuestro impacto debe llegar a más personas”, puntualiza.