Las cajas de compensación serán fundamentales en el posconflicto y su participación será decisiva, por ejemplo, para el desarrollo de la ruralidad y la disminución de la desigualdad social. Eso es uno de los temas claves que tiene presente David Escobar Arango, el nuevo director administrativo de Comfama.
Este ingeniero de producción eafitense menciona que, frente a una eventual transición al escenario de la paz, será importante defender los temas de compensación y subsidio familiar. “Es algo muy propio de nosotros, muy colombiano y nos hace especiales en el mundo. Además, de ser una vía decisiva para generar equidad en el país”.
Y es que el verdadero anhelo del egresado era dedicarse al servicio de las comunidades, por lo que afirma que este cargo es coherente con su decisión de vida e implica, al mismo tiempo, la responsabilidad de seguir trabajando desde las entidades de impacto social.
“Estoy contento de llegar a esta institución, gracias a una carrera que me ha llevado por los sectores público y privado”, comenta el directivo, quien se posicionó oficialmente el pasado 15 de febrero.
Otro de los motivos de orgullo del eafitense es poder liderar la primera caja de compensación del país, y la más antigua de Antioquia, que cuenta en la actualidad con operaciones en las áreas de recreación, salud y vivienda, entre otras.
“Esa antigüedad y permanencia también nos reta a ser más eficientes y mejorar nuestros servicios para todos los trabajadores afiliados”, agrega.
David asume esta responsabilidad con la experiencia académica adquirida en EAFIT y en su maestría en Administración Pública de la Universidad Harvard, además de un amplio recorrido laboral en la Alcaldía de Medellín y la Gobernación de Antioquia durante las administraciones de Sergio Fajardo, y como director de Interactuar, cargo que tenía desde 2014.
El eafitense espera seguir compaginando esta nueva función con sus participaciones en las juntas directivas de diferentes entidades sin ánimo de lucro.
El humor es una herramienta pedagógica
EAFIT no solo era una Institución afín a la vocación de David Escobar Arango, sino también a su familia. Sus padres, Juan Gabriel y Beatriz, también habían egresado de la Institución en los años 70, y eso también contribuyó con su decisión de formarse en la Universidad.
El gusto por las matemáticas y la ingeniería lo llevó a elegir Ingeniería de Producción. Pero su curiosidad constante por la vida universitaria y otras actividades lo motivaron a unirse a la Organización Estudiantil.
“Tengo muy gratos recuerdos de esa época y, especialmente, del rector de ese momento, Juan Felipe Gaviria, quien me enseñó la importancia de enfrentar las discusiones con argumentos, y de usar el humor como herramienta pedagógica”.
Aunque terminó sus estudios en 1999, David nunca se fue de la Universidad y, en la actualidad, permanece como uno de sus egresados más activos y, especialmente, cercano a la Institución a través de su participación en el Consejo Superior.
Por eso no es raro verlo con frecuencia en el campus eafitense, ya sea para asistir a una de las sesiones de los directivos, o cuando se dirige a dictar una conferencia o un curso de la Escuela de Verano.