La actual proliferación en Colombia de nuevas voces en la literatura de ficción, muchas de las cuales encontraron en las editoriales universitarias un vehículo para darse a conocer, es en gran parte resultado de un trabajo cercano a los veinte años, por parte de estas últimas, para cambiar paradigmas y abrir espacio en sus anaqueles -antes repletos de libros netamente científicos y académicos- a géneros como el cuento y la novela.
Esa es la tesis percibida en las palabras de Claudia Ivonne Giraldo Gómez quien, como Coordinadora de Procesos Editoriales de EAFIT, es una de las encargadas de preparar la presencia de la Universidad en la edición número 29 de la Feria Internacional del Libro de Bogotá (Filbo): una celebración de la lectura con una duración de quince días, con inicio este martes 19 de abril, en la que el Fondo Editorial contará con un estand para presentar sus novedades y toda la producción literaria de 2015.
En opinión de Claudia Ivonne, aunque muchas editoriales de instituciones de educación superior concentran sus esfuerzos en la producción académica, algunas tienen otra mirada y propician la publicación de literatura de ficción. "En algunos géneros -explica-, las editoriales comerciales no publican gente joven o desconocida, pero son obras muy importantes de gente que está empezando, que tiene sus libros nuevos".
Tal es el caso del cuento y la poesía, géneros cuyos noveles exponentes encuentran las puertas abiertas en editoriales universitarias como la de EAFIT, en cuyo catálogo, cercano a los 450 libros, un porcentaje cercano al 16% corresponde a literatura ficcional. De hecho, Claudia Ivonne recuerda fenómenos como el del escritor Luís Miguel Rivas, quien publicó su primer libro gracias al Fondo Editorial de la Universidad, cuyo apoyo ha sido buscado por muchos autores durante el último año.
Son autores que tendrán una oportunidad de oro para que sus relatos lleguen a más personas en la Filbo, en donde EAFIT presentará dos de sus últimas novedades literarias. Una de ellas, Álvaro Mutis, memoria de Bélgica, será mostrada en la Feria el 22 de abril a las 7:30 p.m. en el Gran salón literario Ecopetrol, a través de un conversatorio entre Santiago Mutis, hijo del escritor colombiano, y Anne Marie Van Broeck, autora del libro.
La otra novedad es una reedición del libro Obra negra, en el que el escritor antioqueño Gonzalo Arango, exponente del nadaísmo, plasmó lo más representativo de su poesía y cuyas páginas se pondrán a disposición de nuevos lectores en el mismo salón, el sábado 23 de abril a las 7:30 p.m., mediante otro intercambio de pareceres, esta vez entre Juan Luis Mejía Arango, rector de EAFIT, y los escritores nadaístas Jotamario Arbeláez y Eduardo Escobar.
Dicho libro, en palabras de Carlos Mario Correa, docente del Departamento de Comunicación Social de EAFIT, es un clásico de la poesía irreverente e irónica del autor a la que la Institución le otorga en esta edición una mayor vitalidad gracias a un diseño sobrio y limpio. Para Correa, "la poesía de Gonzalo Arango, poderosa en el humor frente a asuntos serios, ha sido puesta al nivel de un culto y es muy cercana a la juventud, pues él la escribió estando muy joven y se revitaliza permanentemente cuando se acerca a nuevos lectores, lleva a la polémica, desubica y contradice".
El docente considera además que Arango revolucionó la poesía de su época al sacarla del acartonamiento clásico y hacerla más confesional, con un lenguaje que apela a emociones contradictorias, desdobla las imágenes y propone ver el mundo desde el lado opuesto, a través de poemas producidos por lo que denominó como "una lucidez con kilómetros de ventaja sobre los escritores de la época", y de un atrevimiento tal que incluyó un lenguaje popular y cercano a la calle sin quitarle el aliento lírico.
Pero en el esfuerzo por dotar de nueva energía las palabras de Gonzalo Arango, EAFIT no está sola, ya que la Universidad de Antioquia, la Universidad de Medellín y la Universidad Pontificia Bolivariana presentarán otro de sus libros: Última página, un ejemplo de la vitalidad del autor como escritor de reportajes.
Pasado y presente
El traer voces de autores de otro tiempo, en el caso del Fondo Editorial de EAFIT, no es producto del capricho pues, según explica Claudia Ivonne Giraldo, las editoriales universitarias también tienen la misión de facilitar el diálogo entre el pasado y el presente, un esfuerzo plasmado en la Colección Rescate, mediante la cual la Universidad pretende volver a exhibir obras que llevan muchos años sin imprimirse pero cuyas letras tienen la vitalidad suficiente para ser presentadas a las nuevas generaciones.
Para Carlos Mario Correa estas iniciativas son muy afortunadas, pues muchos escritores, como Gonzalo Arango, Fernando González y Alberto Aguirre, no se habían vuelto a ver y eran, en gran medida, irreconocibles para el público joven, "pero gracias a las editoriales universitarias se le ha dado salida a obras que las editoriales comerciales, interesadas por las ventas y las tendencias, no publican".
Un concepto similar expresa Juan Gonzalo Betancur Betancur, jefe del pregrado en Comunicación Social de la Universidad, quien resalta el valor diferencial de las editoriales universitarias, las cuales publican textos académicos densos y de alto nivel, pero también se arriesgan a publicar poesía, ensayo, periodismo e historia, lo que permite rescatar autores no comerciales, poco conocidos u olvidados, pero importantes para la memoria narrativa del país.
Escritores como Álvaro Mutis, quien aunque siempre ha estado vigente se empieza apenas a leer, en opinión de Claudia Ivonne, con la seriedad que se merece, y de quien se están conociendo facetas ocultas e interesantes como la presentada por Anne Marie Van Broeck en su libro. En el mismo, se habla de la infancia del escritor, cuando su padre era agregado cultural en Bélgica, en cuya memoria se esbozaban las descripciones de las ciudades europeas que rigieron los destinos de personajes tan memorables como Maqroll el Gaviero, los cuales convirtieron a Mutis -agrega- en un autor de culto que le otorgó brillo a las letras colombianas.
La Coordinadora de Procesos Editoriales de EAFIT tiene una opinión similar sobre la lectura que la juventud actual, para ella carente de paradigmas sólidos y líderes visibles, puede hacer de Gonzalo Arango y los nadaístas, representantes de una juventud más beligerante, contestataria y crítica.
Claudia Ivonne percibe allí el sentido de formar nuevos lectores y acercarlos a una postura contestataria que "tal vez no tenga sentido hoy, pues los muchachos no tienen que hacer tantos esfuerzos para ser escuchados como sí le tocó a ellos en una época en la que ser joven era visto casi como un pecado, pero tiene toda la importancia porque fue un momento de revitalización de la música, la poesía, la literatura y la pintura".
Por su parte, Eduardo Escobar, escritor nadaísta, considera que, aunque los jóvenes hoy parecen más entregados a las redes sociales y a una vida más superficial, hay muchos interesados en el pensamiento y el estudio de la sociedad. "Pareciera que la juventud está desorientada y entregada a la indiferencia, pero no creo que sea así. En las ferias del libro se ven muchachos de todas las clases buscando libros", y es ahí donde el pensador percibe que las editoriales universitarias están haciendo su labor más importante y presentando "libros muy interesantes".
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Alejandro Gómez Valencia
Periodista Área de Información y Prensa EAFIT
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