El concierto habitual de temporada para celebrar el quincuagésimo aniversario de EAFIT será un estreno mundial. La cita será mañana miércoles 5 de mayo en el Teatro Metropolitano de Medellín a las 8:00 p.m. y para ingresar se requiere de invitación.

El evento artístico servirá para conmemorar el medio siglo de fundación de la Universidad. En su concepción tuvo que ver Juan Luis Mejía Arango, rector de EAFIT, quien le comisionó al profesor Andrés Posada Saldarriaga, jefe del Departamento de Música de la Institución, la creación de una misa, la misma que será un estreno.

“En completa soledad y en contacto con la naturaleza”. De esta forma fue concebida y escrita la Misa de Los Cantares, nombre que le dio el maestro Posada a la composición.

La misa es una forma musical sacra, según explica Cecilia Espinosa Arango, directora de la Orquesta Sinfónica EAFIT, quien cuenta que la obra de Posada contiene nueve pasajes: Spiritus Domini Replevit Orbem Terrarum; Kyrie; Levántate del lecho, amiga mía; Gloria; Credo; Bésame con su boca a mi el mi amado; Sanctus; El corazón; Esposa, me has robado y Agnus Dei.

Antes de la triple súplica del Kyrie Eleison, con que acostumbran a comenzar las misas, el maestro Andrés Posada puso a manera de epígrafe musical, una cita parcial del texto del Introito de la Misa de Pentecostés. Música exultante, pletórica de entusiasmo, pero sencilla al mismo tiempo que evoca, por su transparencia, la simplicidad del organum primitivo medieval.

Mario Gómez-Vignes, docente y compositor colombo-chileno, describe la obra y cuenta que durante más de cuarenta minutos, la música se va expresando y desplegando en múltiples combinaciones de colores y timbres, apelando a la pureza de las voces infantiles que se escuchan en el Gloria, Credo, Sanctus y Agnus Dei, y a la potente y expresiva presencia del coro mixto y al apoyo necesario de la orquesta sinfónica.

A manera de claros en el bosque, el compositor incluyó en determinados momentos voces solistas de soprano y tenor y las intervenciones de un violín y un corno solistas.

“La obra está estructurada como una especie de missa tropo, es decir, con el agregado de textos ajenos al ordinario de la misa, insertos aquí y allá, comentando, ilustrando, engalanando y embelleciendo las palabras usuales de la liturgia eucarística”, dice Andrés Posada.

También cuenta el compositor que la inspiración y el lirismo están extraídos de tres poemas del pasaje del Canticum Canticorum, de una traducción al castellano realizada por Fray Luis de León, quien por este trabajo, realizado sin licencia según la Inquisición, fue condenado a prisión durante dos años y nueve meses.

De estos tres poemas, Andrés Posada saca toda la poética. “Un verdadero logro de sentida efusión, sobre todo en el trozo que se inicia con las palabras Béseme con su boca a mí el mi amado. El resultado musical de esta sección solo bastaría para calificar a Posada como uno de los más destacados líricos colombianos”, dice Gómez-Vignes.

Más de 100 músicos en escena
Con la dirección musical de la maestra Cecilia Espinosa Arango estarán en escena más de 100 músicos, entre los que se destaca la soprano María Alejandra Velásquez; Juan José Lopera, tenor colombiano radicado en España; el coro de niños del Colegio Alemán dirigido por Darling Fernández; los Coros Arcadia y Tonos Humanos, los miembros del Coro del Departamento de Música y, por supuesto, la Orquesta Sinfónica.

Hilda María Olaya, directora ejecutiva de la Orquesta, comenta que el programa que inicia a las 8:00 de la noche en el Teatro Metropolitano empezará con Danzas Sinfónicas de West side Stotry de Leonard Bernstein y en esta obra participará la Orquesta de Estudiantes del Departamento de Música de la Universidad. Luego se dará paso a la Misa de Los Cantares, con la que Andrés Posada le hace un regalo a la Universidad en su aniversario, pero también escribe una página sobresaliente para la posteridad y la historia de la música clásica colombiana.