Noticias Octubre
8 de octubre de 2010
El transporte necesita un “Impulzzo”
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En los talleres de la Universidad EAFIT se experimenta con este tipo de tecnologías. La imagen corresponde al carro eléctrico. |
• Ensamblar un vehículo eléctrico autosuficiente y de alto rendimiento podrá ser viable gracias al proyecto que tres eafitenses han denominado como Impulzzo.
• Se espera contribuir a la solución eficiente de problemas como movilidad, emisión de gases, chatarrización y energía para el transporte público del país.
A las tomas de corriente eléctrica en el hogar ya no solo se podrán conectar electrodomésticos, computadores o sistemas de iluminación. También, al lado del celular, en algún momento, se podrá enchufar el automóvil familiar, algo en lo que andan empeñados tres estudiantes de EAFIT quienes, con la colaboración de otros cuatro voluntarios, le han dado vida a una iniciativa denominada Impulzzo.
Este proyecto tiene como objeto, desde la academia, mostrar que el ensamble de un vehículo eléctrico en Colombia es viable y factible mediante el uso de materiales de la industria nacional, como las baterías, y la importación de dispositivos, como el motor y el controlador (software) que deben llevar este tipo de vehículos.
Por otra parte, como actividad productiva y proyecto de empresarismo, Impulzzo trae una buena solución a las problemáticas que el gremio del transporte público en el país debe enfrentar en temas como la chatarrización y emisión de gases, además de lidiar con la histórica dependencia de los precios del petróleo y de la gasolina.
“Este tipo de vehículos, en cuanto a mantenimiento, son un 30 por ciento más económicos, ya que no llevan aceite para refrigeración, no tienen radiador, y no necesitan componentes como filtros de aire y gasolina”, explica Juan Fernando Laverde, administrador de negocios de EAFIT y quien lidera el proyecto.
A esta gama de ventajas, según Juan Fernando, se suman los índices de rendimiento, que en un transporte como este generan hasta 80 kilómetros por recarga, aunque dependiendo de la tecnología de las baterías, como las de litio que son mucho más avanzadas, pueden generar hasta 300 kilómetros de rendimiento.
“Una persona se moviliza en promedio al día, de 50 a 55 kilómetros, por lo que aún con baterías de plomo, un vehículo fabricado con estas características satisfaría las necesidades de movilidad en la ciudad”, comenta.
El funcionamiento
Los emprendedores de Impulzzo han fabricado y ensamblado en los talleres de EAFIT un campero Mitsubishi que estaba en condiciones de chatarrización, que restauraron y convirtieron en un vehículo eléctrico que estará afrontando su primer test de rendimiento y comportamiento en unos días.
La parte de ensamble del sistema eléctrico fue dirigido por Jorge Barrera Velásquez, ingeniero del Instituto Tecnológico de Massachusetts, quien ha trabajado por más 15 años en esta materia.
Entre otras especificaciones, el carro cuenta con un software controlador que administra el paso de la energía de las baterías al motor, que es del tamaño de un motor de licuadora. Si se programa el software para velocidad, el vehículo puede desempeñar hasta 120 kilómetros por hora, según describe Enrique Llano, mecánico del equipo.
Para conducir este vehículo no se requiere mayor capacitación, pues sin el embrague, la conducción se limita tan solo a la marcha hacia delante y la reversa, además de un freno que regenera, a la par que se activa, la carga del vehículo, lo que vuelve aún mucho más eficiente el gasto de energía en el recorrido.
Otra de sus características es que para recargarlo se usa un cable que se conecta por seis horas desde un enchufe ubicado en el antiguo sistema de gasolina a un toma de 110 voltios, que son las más comunes en las residencias.
“La gente piensa que este tipo de vehículos son como un carrito de golf, desforzados, que no generan confianza, pero el torque (fuerza a bajas revoluciones) de un motor eléctrico va de cero a su punto máximo en menor tiempo que el de gasolina, por lo que puede desempeñar mucha más fuerza, ya que el de gasolina debe alcanzar bastantes revoluciones para generar más fuerza”, agrega Laverde.
Este mecanismo de transmisión eléctrica se puede implementar en camiones, buses, pick ups y cualquier tipo de vehículo en general, aunque la idea de Impulzzo es incursionar en los automotores del transporte público, nicho que más emisiones de gas genera en el país.
Por esto aspiran a desarrollar, en unos meses, cuatro buses prototipo, que esperan poner en funcionamiento junto a un bus de transporte regular para demostrar la diferencia en costos, eficiencia y rendimiento de este tipo de vehículos, con las mismas condiciones, que según Laverde, nada más en el costo por kilómetro son muchísimo más baratos los eléctricos.
El contexto
Muchos gobiernos internacionales ven en los vehículos eléctricos la primera alternativa de emancipación del petróleo como fuente de energía y principal déficit económico de los países no productores.
Ciudades como Shanghái (China) y Londres (Inglaterra), que tiene actualmente en funcionamiento una flota de 90 buses de transporte público, están a la vanguardia en el tema de fuentes de energía eléctrica.
Recargar un auto eléctrico puede costar alrededor de 1500 pesos. En el país empresas como Empresas Públicas de Medellín están interesadas en apoyar y desarrollar este proyecto. La producción en serie de vehículos eléctricos significaría, por primera vez en la historia, una movilidad sin impacto ambiental, renovable, económica, además de una solución que supera en rendimiento a los antiguos sistemas de combustión.
Un batería de litio tiene una vida útil de ocho años trabajando tiempo completo. Las reservas de litio en el mundo pueden soportar el doble de los automotores actualmente existentes.
Mayores informes
Juan Fernando Laverde
Administrador del proyecto Impulzzo
Teléfono: (57) (4) 317 22 84 - 3137166741
e-mail: jlaverdz@eafit.edu.co