Reside en medio de la campiña francesa. La ciudad en la que habita se llama Évreux y aunque su tez es blanca, el nombre termina por delatarla: Juliana Jaramillo Fernández. Pero esta joven de voz delicada no vive de manera común.
Con un título de maestría a los 22 años, tiene la oportunidad de investigar para la compañía líder en el mundo en la fabricación de conectores eléctricos…
Aunque no son simples conectores eléctricos. Son conectores herméticos, diseñados para resistir condiciones extremas, como bajas y altas presiones, y bajas y altas temperaturas.
Sin embargo, una de sus partes es muy sensible a las fallas y las causas no tenían explicación. Hasta que esta investigadora, que espera graduarse como ingeniera física de la Universidad EAFIT en diciembre próximo, entró como practicante a Deutsch Company a comienzos de 2011.
Y como parte de un equipo de 60 personas logró determinar lo que para esta empresa había sido esquivo y aleatorio: cinco parámetros por los que las perlas de vidrio, al interior de los conectores, se fisuraban.
Puede parecer complejo, pero estos conectores son utilizados por la industria aeroespacial, petrolera y hasta de autos de carreras, lo que supone una optimización y un mejor funcionamiento para los productos de estos sectores. Una pieza que podría mantener en vuelo a un avión o en funcionamiento a un monoplaza a alta velocidad.
“Encontramos que las perlas se fisuraban por factores como la geometría del diseño de la pieza, la posición de otros componentes dentro del conector o la temperatura con que fue fundido el vidrio. La compañía pensaba que las fisuras eran aleatorias, pero nosotros pudimos explicar el fenómeno. Eso fue muy satisfactorio”, recuerda.
Por su desempeño, esta magíster en materiales cerámicos avanzados de la Universidad de Limoges (Francia) logró obtener un contrato como empleada en la compañía, que disfrutará hasta el próximo 25 de noviembre con posibilidad de prórroga. Por eso, ahora se dedica a predecir comportamientos futuros.
El porvenir en manos matemáticas
Juliana dice que recibió una formación versátil de EAFIT, lo que le ha permitido desempeñarse en diversas áreas en Francia. Cuando entró como practicante de Limoges a Deutsch Company trabajó bajo la dirección de dos doctores en experimentos y cálculos.
Ahora, como empleada, solo calcula, pero no de cualquier cosa. Juliana calcula sobre el futuro de su actual empresa.
“En este momento realizo modelos matemáticos para prever lo que pasaría con una determinada producción de la empresa. Así, me ha tocado establecer relaciones con ingenieros, técnicos y administradores, lo que he hecho bien ya que en EAFIT tenemos la oportunidad en Ingeniería Física de tener contacto con muchas ciencias”, asegura.
Pero Juliana no llegó a Francia por el azar. Desde sus primeros semestres en EAFIT, la estudiante demostró responsabilidad y buen nivel, lo que le ayudaría en su último año a ser beneficiaria de un convenio de doble titulación entre Limoges y la Universidad.
Por eso, desde el segundo semestre de 2010, viajó a Francia para estudiar la maestría, en la que al igual que en el pregrado, obtuvo muy buenos resultados y una buena práctica.
“Es juiciosa, entusiasta y responsable. Cuando estaba en la carrera me ayudó a desarrollar un sistema de extracción de iones para un reactor de plasma con excelentes resultados, tanto que ahora podemos hacer en EAFIT recubrimientos por plasma gracias a ella”, explica Mauricio Arroyave Franco, jefe del pregrado en Ingeniería Física de la Universidad.
Además, según Juliana, lo que más le ha ayudado a enfrentar las barreras culturales y académicas que encontró en el país galo fue el valor que le infundieron sus profesores colombianos, impulsándola a resolver problemas científicos con alta dificultad.
“Ha sido una intención del programa darles a los estudiantes herramientas muy sólidas que les permitan solucionar una variedad de problemas. De esta forma, se les proporciona un panorama amplio tanto en ciencias como en ingeniería. Es la formación y la seguridad lo que les permite a ellos afrontar problemas como el de Deutsch Company”, complementa el docente.
E igualmente está el permanente acompañamiento. Así lo resalta Azucena Fernández Betancur, madre de la investigadora eafitense. “Al principio estábamos muy asustados con el viaje, ya que Juliana es hija única. Pero, para el agrado de nosotros, siguió mostrando su responsabilidad. Su padre y yo nos sentimos muy orgullosos”.
Por el momento, la futura ingeniera física terminará su trabajo para la compañía y espera regresar a Colombia para sus grados en EAFIT. Aunque su formación no terminará allí: ya está aplicando a seis universidades europeas (cuatro de estas entre las 20 mejores del mundo), para realizar su doctorado en materiales aplicados a la microelectrónica.
Mayores informes
Mauricio Arroyave Franco
Jefe del pregrado en Ingeniería Física
Teléfono: (57) (4) 261 95 00 Ext. 9835
Correo electrónico: marroya5@eafit.edu.co