La biodiversidad ofrece unos servicios ecosistémicos que van desde las demandas nutricionales hasta el soporte y regulación del medio ambiente. El río Amazonas cerca de Manaos, Brasil.
Foto: Neil Palmer (CIAT)
• Este miércoles 5 de junio se celebrará el Día Internacional del Medio Ambiente, evento que estableció la Asamblea General de la ONU desde diciembre de 1972.
• Con motivo de la fecha, Diego Villanueva y Javier Correa, docentes del pregrado en Biología de EAFIT, analizan algunas amenazas para la biodiversidad en el mundo.
La actual relación que tiene el hombre con el medio ambiente, y el uso indiscriminado que hace de los recursos naturales, parece dar a entender, en voz de los expertos, que dichos recursos no tienen ningún valor para una buena parte de la humanidad, aunque sin estos no sería posible la vida en el planeta.
Por eso, Diego Villanueva Mejía y Javier Correa Álvarez, docentes del pregrado en Biología de EAFIT, analizan algunas de las principales amenazas a la biodiversidad, tema que toma importancia en la antesala de la celebración del Día Internacional del Medio Ambiente, que se desarrollará este miércoles 5 de junio.
De acuerdo con los profesores, son cinco los peligros que en la actualidad ponen en riesgo la biodiversidad: destrucción de los hábitats, sobreexplotación de recursos, especies invasoras, contaminación y calentamiento global.
La destrucción de los hábitats es, por ejemplo, una de las principales amenazas para la fauna y la flora del planeta, y aunque sus causas son múltiples, las malas prácticas de la agricultura son uno de los detonantes.
“Desde que el hombre comenzó a trabajar la tierra se estima que el planeta ha perdido más de la mitad de los bosques”, dice Diego Villanueva, jefe del pregrado, quien además agrega que otro riesgo al que se llega es a la pérdida de la variabilidad genética, en este caso, los cambios que afectan a las especies.
Y agrega que todas las especies que habitan un sitio particular, desde lo micro a lo macro, dependen de una conexión. “Entonces, cuando se destruye un hábitat, se evita que dos poblaciones se conecten y esto afecta la reproducción, el flujo de genes, y cada vez más se pierde la variabilidad que puede llevar a la extinción de especies”.
Otros riesgos
También amenaza la biodiversidad la sobreexplotación de recursos, pues a pesar de que como especie el ser humano necesita de los recursos naturales básicos, no toma los correctivos necesarios para menguar el daño que genera.
“Sobreexplotación de recursos es lo que el hombre extrae de manera irracional e intensiva de lo natural y silvestre. No hablamos de agricultura intensiva, más bien de caza, pesca y tala para madera, actividades que acaban con la biodiversidad. La minería puede aplicar en esta categoría, pero depende de cómo se practique”, apunta el profesor Correa.
El tercer riesgo son las especies invasoras, que son aquellas, animales o vegetales, que llegan a un área en particular en la que no habitan naturalmente. No importa si el hombre las introduce de manera intencional o accidental, pues las consecuencias son igual de dañinas.
Un ejemplo de esto es la siembra de pinos en climas tropicales, pues estos pertenecen a lugares con estaciones y, al llegar a áreas más cálidas, necesitan consumir más agua y nutrientes para poderse adaptar, pero de esta manera generan desequilibrio del ecosistema al que llegan.
Además, cuando una especie se introduce en un lugar que no le es natural, se multiplica de una manera que no es controlable, pues en este espacio no tiene a su depredador natural.
La contaminación es otro de los peligros y se genera principalmente por la falta de conciencia del hombre a la hora de deshacerse de los productos que ya no necesita.
Aunque los procesos de destrucción de basuras y materiales obsoletos son bastante costosos para el sistema productivo, lo son más los daños a la salud que se generan luego de que estos residuos vuelven a entrar en contacto con el hombre, bien sea en forma de alimentos o a través del aire polucionado.
Finalmente, está la amenaza del calentamiento global, que a su vez es el resultado de las cuatro anteriores, más la quema de combustibles fósiles que hace que se incremente la acumulación de CO2.
“El planeta ha tenido varias fluctuaciones climáticas como las eras del hielo y luego períodos muy calientes. Eso es normal, pero el hombre está acelerando esto de manera excesiva, lo que genera un cambio radical que hace que cada vez sea más fuerte el calor”, explica Diego Villanueva.
Las consecuencias del calentamiento global van desde la migración de especies hasta los desastres naturales como inundaciones, tormentas, huracanes y momentos de sequía que se dan por los cambios extremos del tiempo.
Pero si bien el daño que se le ha hecho a la tierra no es reversible, todos los correctivos y acciones que se hagan en pro de su conservación serán determinantes. La Alcaldía de Medellín, por ejemplo, impulsa la iniciativa Propuesta de Gestión Integral de Biodiversidad y Servicios Ecosistémicos.
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Diego Villanueva Mejía
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