​Palabras contadas

DIRECCIÓN DE DESARROLLO HUMANO-BIENESTAR UNIVERSITARIO 

No habríamos tenido un mejor momento para pensar en el poder de la palabra, que esta época de aislamiento obligado, de silencio, lecturas, soledad e introspección, material clave para la escritura y la creación literaria, para la invención de mundos fantásticos y posibles, para la rememoración y la nostalgia. Así entonces, la Dirección de Desarrollo Humano-Bienestar Universitario de la Universidad EAFIT convoca a estudiantes de pre y posgrado, egresados de pre y posgrado, profesores y empleados de las distintas IES de Colombia a participar en el V Concurso Nacional Universitario de Microrrelato, Palabras Contadas. 

Bases del Concurso:

1 - Pueden participar todos los estudiantes o egresados de pre y posgrado, docentes y empleados de las Instituciones de Educación Superior de Colombia, debidamente identificados como pertenecientes a su Institución.

2 – El tema de los microrrelatos es libre y deberán estar escritos en español. Sólo podrá enviarse un microrrelato por participante.

3-. Los microrrelatos deberán ser inéditos, con una extensión máxima de 200 palabras, sin incluir el título.

4-. Las microrrelatos participantes no pueden haber obtenido premios en ningún otro concurso ni tener sus derechos de autor comprometidos con terceros.

5-. El microrrelato debe enviarse en el formato que se encuentra al final de las bases de este Concurso, por correo electrónico a dllo.artistico@eafit.edu.co

6-. En el mismo correo electrónico debe anexarse: Documento que acredite al concursante como perteneciente a su IES, en calidad de estudiante o egresado de pre o posgrado, profesor o empleado (Los organizadores se reservan el derecho de verificar la veracidad de esta documentación).

Premios:

• Primer Lugar: Colección Jorge Luis Borges (8 tomos), Ed. Debolsillo + Díptico de Tomás González ("La luz difícil" y "Temporal"), Ed. Alfaguara.
• Segundo Lugar: "Trilogía de Trajano" de Santiago Posteguillo, Ed. Planeta + "Lenguas de fuego" de Ana María Cadavid + "El hermafrodita dormido" de Fernando González, Ed. EAFIT.

Jurado: 

El jurado estará conformado por tres reconocidos maestros en literatura. Ellos son:​​

​Alba Clemencia Ardila ​	Doctora en Literatura y Magíster en Literatura Colombiana de la Universidad de Antioquia, Especialista en Literatura Latinoamericana de la Universidad de Medellín. Profesora de Escrituras creativas, Hermenéutica literaria y Literatura contemporánea de la Universidad EAFIT. Sus áreas de interés en el campo de la literatura incluyen la teoría y la crítica literaria centradas en el estudio de la literatura colombiana y latinoamericana contemporáneas. Es autora de los libros El segundo grado de la ficción (2014), Casas de Ficción (2000), Las mudanzas de la Identidad (2006). Editora académica de Estéticas de autenticidad. Literatura, arte, cine y creación intermedial en Hispanoamérica (2017) y Narrativas en vilo (2016).
Daniel Bravo Andrade	Escritor y profesor. Tiene un Máster en Creación literaria de la Universitat Pompeu Fabra (Barcelona). Textos suyos han sido publicados en la revista literaria Granta, en el periódico Universo Centro y en Generación, de El Colombiano. Ha dado conferencias y talleres en espacios como La Pascasia y Otraparte. Dirige el Grupo literario Letras de la Universidad EAFIT. Su primera novela se encuentra en proceso de publicación.
​  Jorge Iván Agudelo	Historiador de la Universidad Nacional de Colombia, sede Medellín. Magíster en Hermenéutica Literaria y candidato a doctor en Humanidades de la Universidad EAFIT. Profesor de cátedra en las maestrías de Escrituras Creativas y de Hermenéutica Literaria de la Universidad EAFIT. Ha publicado con la editorial de la Universidad de Antioquia los libros de poesía La calle por cárcel (2010) y Ni el abrazo ni el refugio (2016).​

Ganadores y menciones especiales 

​Primer lugar:

Título: “Wilber”. 

¡Ay Dios mío que yo aparezca! No supo en qué momento se soltó de la mamá… ¡Ay Dios mío que yo aparezca! Pero de tantas manos que lo tomaban, no encontraba la de ella... ¡Ay Dios mío que yo aparezca! Lo sobrecogía la idea de lo angustiados que debían estar al saberlo perdido en el centro de la ciudad… ¡Ay Dios mío que yo aparezca! La mamá, la abuela, la gallina que le regalaron las tías… ¡Ay Dios mío que yo aparezca! ¡Ay Dios mío que yo aparezca! ¡Ay Dios mío​

Autor: Juan Gabriel Torres, egresado de Artes Plásticas de la Universidad Nacional, sede Medellín

Segundo lugar: 

Título: "La nostalgia de un cuervo"

El cuerpo se fue de la mano del rio y no volvió jamás a su primer destino, su carne rosadita se perdió en la coloración pálida de las aguas turbulentas, su rostro lentamente dejó de sonreír y cerró los ojos. Después de unos días de zozobra se puede ver la luz de la noche revelando la superficie de su piel inseminada por pequeñas manchas azules y moradas. Quien iba a creer que su lugar sería tan solitario, y que su cuerpo flotaría en la desolación de un naufragio después del paso de una tormenta. 

Los hombres alados la observaron desde las alturas, envueltos en una aura de curiosidad y espanto, y más allá de los pájaros apareció una luna voyerista iluminando la repentina muerte de Margarita.

Los recuerdos de su infancia hicieron aguas pa’ fuera. Los pulmones se llenaron, se llenaron, se llenaron, y se reventaron como globos. Su cerebro se había congelado y con él, todo su alrededor. Los animales de las orillas se asomaban para ver cruzar la forma de la tristeza.

Le quedará a su espíritu la necesidad de aprender a nadar, a la espera de las flores y las ausencias de quienes navegan el rio.

Autor: ​Santiago Vanegas Quiñones, egresado de Trabajo Social de la Universidad de Antioquia 

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Menciones especiales

¿Debajo de tu cama? Escucho crujir sobre mi cama a los maderos ya comidos por el tiempo. No es el largo crepitar de la madera vieja intentando tomar aliento, no. Es un ligado de sonidos chirriantes. Mi yo crepuscular no puede evitar pensar en la criatura, esa que llega a pinchar las nubes de mis sueños. ¡Y el terror no para! No para hasta la madrugada, siendo ella la criatura, supersticiosa teme. Por eso es entre tres y cuatro cuando me levanto. Desde la penumbra alzo mi mano, tanteando la deslizo sobre esa superficie suave donde dormita, porque solo tirando de sus pies, a veces de su camisa, se hace el silencio y descanso en paz. "Con cariño para el poeta Alejandro Astorquiza."​ Daniela Fernanda López Astorquiza.  Estudiante de Ingeniería Física de la Universidad EAFIT, Medellín.	Lo que pasó  ​ Desde que pasó lo que pasó, vivir se ha vuelto un lío: ahora después de un martes, por ejemplo, ya no sigue el miércoles; puede llegar un sábado o repetirse el lunes. Todo depende de unas complejas variables que determinan lo más conveniente. Así –después de que pasó lo que pasó– nos tenemos que levantar a averiguar qué día es: lo escucho en la radio o lo consulto por Internet. A veces solo llamo al portero del edificio. Eso sí, siempre en piyama y sin bañarme, qué tal que sea domingo y no haya que ir a trabajar. José Joaquín Duque Egresado de Gerencia de Sistemas de la Universidad Pontificia Bolivariana, Medellín.
La desp​edida  ​ El enamorado despertó y encontró a su lado una nota de escritura delicada que decía: Me regreso con mi m​arido.  Tu Isabel. Jesús Manuel Paternina Durán.  Estudiante de Literatura de la Universidad Autónoma de Bucaramanga.	Amplitud distorsionada  ​ Fue absolutamente repentina, un miércoles de febrero. Mi Batavus fue hallada en una hondonada cuando pasaron las lluvias, junto con una cajetilla de Fortuna. Los amigos se fueron enterando paulatinamente, la mayoría el viernes en la noche por la crónica vespertina de El Heraldo cuyo locutor tenía un vozarrón gravísimo. Mi madre enloqueció y la internaron en el sanatorio San Juan de Dios.  Venía de casa de Laura María –en el barrio Riofrío- amargo como siempre por despedirme sin que le importara. El estruendo sonó cuando terminaba el noticiero de las 8:00p.m. en la 990 kHz: habían hablado de otro crimen con tinte político y de un reciente descubrimiento o invento significativo para la ciencia. La tienda de la esquina cerró su puerta y se apagaron las luces.  Alertado por el ruido alguien fotografió desde una ventana -con una Kodak 35RF- un Renault 4CV color tabaco. La víspera había soñado con un caballo de vapor desbocado que se disolvía en cansancio, cayendo de una yegua de crines crespas, recibiendo una coz en la sien, y había despertado radiante –los charcos (enmarcados en el barro) reflejaban las nubes grises- por mi cita romántica de la tarde.​ Diego Fernando Chiari Ramos.  Egresado de Filología e idiomas: francés, de la Universidad Nacional de Colombia, Bogotá.
​ Inocencia ​ Recuerdo que me prometió que un día estiraría las manos y llegarían más alto que los rascacielos. Me dijo que a sus brazos les crecerían palomares porque me gustaban las palomas; y yo podría trepar, cuando quisiera, para ver sus nidos. Sus manos no pararían de subir, irían tan arriba que las puntas de sus dedos se congelarían y nevaría cuando decidiera moverlos. Yo no volvería a quejarme de calor, y podría hacer muñecos de nieve y vestir abrigos. Dijo también que atraparía las estrellas y me escribiría con ellas mensajes en el cielo, que iría por esos cometas que pasan cada mil años y los traería frente a la tierra para confundir a los astrónomos. Yo sonreía, imaginaba esas hazañas y sonreía; pero no sabía que para llegar tan alto tendrían que sembrarla como a los árboles. Juan Sebastián Álvarez Ríos Estudiante de Derecho de la Universidad EAFIT, Medellín.	Mégas Aléxandros  ​ Un anciano me refirió la historia (tal vez apócrifa) de un Macedonio: no murió en la ciudad de los seléucidas; marchando al Indostán, el Himalaya lo despojó de su fama y su ejército, arrojándolo a ese otro mundo de Oriente como un simple soldado al servicio de algún rey de la China. Pudo reconocer en las monedas de su salario marcial la cara grabada de su otra vida.  Juan Camilo Pareja Corcho Egresado de Ingeniería Mecánica de la Universidad EAFIT, Medellín.​ ​
​​ Preferencia  ​ —Este es más bello— dijo él. —Y tiene más talento— dijo ella. —Entonces está decidido. Vámonos hijo, y despídete de tu hermano.   Pablo Andrés Patiño Osorio.  Estudiante de Ciencias Políticas de Universidad EAFIT, Medellín.	Escarabajos azules  ​ La enfermedad de las manos laceradas se había extendido en gran parte de los campesinos del pueblo. Todos los días llegaban pacientes al consultorio del Dr. Betancur con dolorosas ampollas que les impedían trabajar en los grandes cultivos. El respetado doctor aseguró que era una enfermedad inusual cuyo único remedio era moler escarabajos azules de Egipto y aplicar el engrudo sobre las lesiones. La insólita cura parecía más una recomendación de un curandero que de un médico. Ante las presiones de los lugareños, el doctor se ofreció generosamente para conseguir el peculiar ingrediente. Viajó a Egipto y después de dos semanas regresó con varias cajas que contenían miles de escarabajos milagrosos. Los tratamientos comenzaron de inmediato y mientras el Dr. Betancur sacaba algunos insectos de las cajas, muchos de ellos lograron escapar por la ventana del consultorio. Los escarabajos fugitivos pronto se multiplicaron sin control y se propagaron por el pueblo. Encontraron especial predilección por revestir de azul metálico los grandes latifundios donde trabajaban los campesinos. Cuando la plaga devoró las inmensas plantaciones de coca los agricultores por fin sanaron sus heridas pues ya no tenían que cosecharlas.  Miguel Ángel Correa Saldarriaga.  Egresado de Comunicación Social de la Universidad EAFIT, Medellín. ​

Obras no seleccionadas: Los microrrelatos no seleccionados serán destruidos en su totalidad. 

La participación en el Concurso Palabras Contadas implica la aceptación de todas las condiciones y requisitos del mismo, así como el permiso para publicación de los microrrelatos en los medios que la Universidad EAFIT estime pertinentes.

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Mayores informes:
Elsa Efigenia Vásquez Rodríguez

Departamento de Desarrollo Artístico
Universidad EAFIT
Teléfono: (4) 2619500 ext. 9606
Correo: dllo.artistico@eafit.edu.co