Las iniciativas surgen de las diferentes áreas del conocimiento y de todas las dependencias de la Universidad, que se fortalece en la unión, en la solidaridad, en el saber. Y, aunque las circunstancias son nuevas para todos y complejas, la creatividad y la proactividad han surgido para tratar de frenar los efectos del covid-19. Una demostración de que, en las complejidades del mundo, forjar humanidad y sociedad cobra una importancia máxima.
Un total de 650 videolaringoscopios que permiten intubar a un paciente con mayor seguridad, creados por la alianza Simdesign, conformada por el Hospital Pablo Tobón Uribe, y las universidades EAFIT y CES; con el apoyo de las compañías Leonisa y Dynacad, y de Postobón y Ruta N a través de la iniciativa InnspiraMED, se están distribuyendo de forma gratuita para atender pacientes contagiados con covid-19 en Colombia.
Trabajar en equipo desde las diversas instituciones del Estado, la academia y el sector privado ha permitido generar soluciones rápidas que pueden salvar vidas. Los videolaringoscopios son un esfuerzo en ese sentido y gracias a su tecnología es posible visualizar en tiempo real la vía aérea por medio de una cámara conectada a un computador, tablet o dispositivo móvil. Esto protege, además, la salud del personal que está en primera línea, pues el nuevo coronavirus hace más necesario que quien realiza el procedimiento de intubación esté lo más lejos posible del paciente. En mantener esa distancia ayudan el diseño, las cámaras, el software y los manuales de uso que se entregan con cada videolaringoscopio.
Este tipo de aparatos en el mercado internacional se venden a un alto costo y, actualmente, a causa de la pandemia, están agotados.