Laura Jaramillo Arango
Estudiante del pregrado en Comunicación Social
La Plaza Mayorista es un mercado de frutas, granos y verduras -ubicado en el sur del Valle de Aburrá (municipio de Itagüí)- en el que el color verde de los alimentos que allí se comercializan, y que muestran la gran biodiversidad de esta región de Colombia, hace juego con las montañas antioqueñas, donde cultivan estos productos.
Este lugar recibe dos veces por semana, a las 6:30 a.m., a Desarae Mae Diedrich y a Marissa Nicole Berns, dos estudiantes estadounidenses que arribaron con otros ocho norteamericanos a realizar un intercambio académico en EAFIT.
Para las dos jóvenes no hay nada más fascinante que poder comprar su comida, en una plaza de mercado, en donde las frutas están recién recogidas y el aroma puro de los vegetales les recuerda lo que es estar viviendo en el trópico.
'Pues bien, estas alumnas estudian, durante el primer semestre de 2015, becadas por EAFIT, en desarrollo de la iniciativa La Fuerza de 100.000 en las Américas, proyecto que tiene como objetivo incrementar la movilidad estudiantil con, aproximadamente, 40.000 estadounidenses que cursan parte de sus carreras en América Latina y el Caribe, y 60.000 de América Latina y el Caribe que arribarán, cada año, a los Estados Unidos, hasta 2020.
El proyecto fue creado por el presidente Barack Obama (Estados Unidos) y apoyado por el Departamento de Estado Americano, la Asociación de Educadores Internacionales (Nafsa) y Partners of America, una agencia de carácter voluntario que promueve el desarrollo social y económico de América Latina, el Caribe y los Estados Unidos.
En la apertura oficial de este proyecto, el 17 de enero de 2014, John Kerry, secretario de Estado, afirmó que la Fuerza 100.000 en las Américas promoverá, expandirá y dará soporte a los programas de intercambio educativo dentro del Hemisferio Occidental, a través de convocatorias que ayudarán a subsidiar el fortalecimiento de instituciones de educación superior, en su capacidad para enviar y recibir estudiantes extranjeros.
Para Marissa fue una alegría darse cuenta de que EAFIT había sido una de las 10 universidades latinoamericanas ganadoras de la primera convocatoria de la iniciativa, pues uno de sus sueños, a corto plazo, era conocer a Medellín.
La norteamericana llevaba algún tiempo leyendo e investigando sobre Medellín. “El premio que obtuvo por su desarrollo innovador, en 2013, aumentó mis deseos de conocer la ciudad. Además, el famoso clima de la región y su extraordinario transporte público hacía que esta ciudad fuera mi primera opción al venir a Suramérica. Tengo que confesar que me emocioné demasiado cuando supe que EAFIT hacia parte de La Fuerza 100K”.
Todo un continente
Capacity- Building Program to Reach 100k Strong fue la primera convocatoria que lanzó la iniciativa del presidente Obama, y en la que la propuesta de la Universidad alcanzó su cupo en el programa con una propuesta en alianza con la Universidad de Purdue. Esta se encontraba dirigida a instituciones de educación superior de Brasil, Colombia, Ecuador, México, Panamá y Perú.
Para obtener un cupo en la competencia, los diferentes participantes debían demostrar el compromiso y la innovación para crear cambios concretos que ampliaran el acceso de estudiantes extranjeros en las Américas.
Según Marcela Wolff López, jefa de la Oficina de Relaciones Internaciones (ORI) de EAFIT, lo que la Universidad hizo fue una detallada lectura de la convocatoria. “Partimos de la innovación y de la diversidad para hacer una propuesta que planteaba contactar a 150 universidades de los Estados Unidos, teniendo como meta incrementar el número de convenios que se tienen al utilizar la estrategia de ofrecer becas de exención de matrículas para estudiantes de este país”.
Desarae, al igual que su compañera Marissa, expresó que antes de venir, estaba llena de prejuicios y estereotipos que, por lo general, los estadounidenses tienen sobre los latinoa- Los alumnos estadounidenses viven a Medellín y a Colombia de una manera que incluye lo académico y lo cultural. Muchos hasta usan atuendos deportivos de equipos de fútbol de la región. Foto: Róbinson Henao UNIVERSIDAD EAFIT 131 Institucional mericanos. Pero no alcanzó a imaginarse que “la ciudad fuera tan moderna”, pues pensaba que vendría a un pueblo pequeño en vía de desarrollo. “Fue un poco difícil convencerlos de que todo estaría bien y ahora que les cuento lo asombrosa que es mi experiencia, viviendo acá, ellos no lo pueden creer”, añade Desarae.
Ante esto, según Federico Mejía Posada, asistente del proyecto en EAFIT de la Fuerza 100k de las Américas, anota que a veces es difícil crear vínculos internacionales, entre otros asuntos, por el Travel Warning, un documento oficial emitido por el Departamento de Estado de los Estados Unidos, en el que le informa a sus ciudadanos sobre la situación de seguridad en Colombia. Lo segundo es la poca oferta de cursos en inglés y, por ende, la dificultad de validar estos en las universidades de origen de los estudiantes.
No obstante, Marcela considera que la Universidad quiere traer estudiantes que evidencien que sí hay un interés en venir a Colombia, y que es posible tener una experiencia académica exitosa y segura que rompa el ciclo vicioso del Travel Warning.
Destino, Medellín
Rebekah Jo Miller, Paul Michael Krogmeier, Mark Nathan Adams, Marissa Nicole Berns y Desarae Mae Diedrich son los estudiantes que arribaron de la Universidad de Purdue, una institución de educación superior que se ubica en West Lafayette (Indiana, Estados Unidos). Los universitarios están realizando diferentes cursos en EAFIT, en los pregrados en Ingeniería Civil, Ingeniería de Sistemas, Ingeniería de Producción e Ingeniería Mecánica.
Rebekah considera que «es una grandísima experiencia vivir en Colombia y poder ver el proceso de un país que está en desarrollo», mientras que Mark Nathan piensa que «aunque el mundo esté dirigiéndose a la globalización en la economía, especialmente en la ingeniería, es importante tener una conexión con otras personas, pues hace más productivo el ambiente de trabajo». Y es que, precisamente, relacionarse con otras culturas fue lo que lo motivo a salir de su país.
Purdue es reconocida en el mundo por ser líder en investigación y, desde hace algunos años, tiene una relación muy estrecha con EAFIT. El acercamiento de ambas instituciones apoya una serie de iniciativas en tecnologías de la información y la comunicación, y en mecánica computacional, además, cada semestre, un profesor eafitense viaja allí a realizar una pasantía investigativa. Kirt James Tidwell y Stephanie Maria Acosta vienen de Eastern Michigan University, ubicada en Ypsilanti (Michigan, Estados Unidos). Los programas que cursan en Medellín son Geología y Administración de Negocios, respectivamente.
Michael Austin Leonard, de Western Washington University; y Maria Yiling Cammarato, de Florida Atlantic University, viajaron desde Washington y Florida para realizar, también, su intercambio en Administración de Negocios, mientras que Andrés Machado Ruiz, de Saint Mary’s College, dejó por un semestre su universidad en California para estudiar Negocios Internacionales en la capital antioqueña. Para ninguno de los 10 becados fue un requisito dominar el idioma español con el fin poder realizar su intercambio, con lo que se rompió así el segundo gran obstáculo que presentan los extranjeros para venir a estudiar a Colombia.
Para la Jefa de la Oficina de Relaciones Internacionales, la Universidad está sobrepasando la oferta de materias que, actualmente, brinda en inglés. Para el semestre 2015-1 hay 13 nuevos cursos en este idioma, nueve de estos son de Ingeniería debido a la gran demanda que tuvieron. “Necesitamos motivar a los estudiantes de EAFIT para aumentarles las posibilidades académicas a los extranjeros. Entre más materias en inglés tengamos en diferentes áreas, más estudiantes internacionales atraeremos”.
Y es que, sin duda, el fortalecimiento que la Universidad tiene con los cursos en inglés, facilita la estadía de los 10 becados.
Una buena experiencia
Desarae asegura que no solo las montañas la tienen enamorada de Medellín. “EAFIT, en general, ha hecho que esta experiencia sea grandiosa e inigualable”. Aunque ella todavía no domina el español, eso no ha sido un problema para adaptarse a la Universidad. “Todas mis clases son en inglés y es muy chévere ver cómo los profesores, realmente, se están esforzando para que todos entiendan y estemos en la misma página, todos mis compañeros y yo destacamos ese esfuerzo tan grande”.
Rebekah considera que «es una grandísima experiencia vivir en Colombia y poder ver el proceso de un país que está en desarrollo».
Los becados coinciden en que el clima de la ciudad hace de esta un buen lugar para vivir. Así mismo, opinan que Medellín tiene una interesante combinación: una ciudad grande y moderna, pero rodeada de árboles y naturaleza, la misma descripción que utiliza Marissa para describir el campus de EAFIT. “Todas las aulas están equipadas con la mejor tecnología, la infraestructura es hermosa, además que es muy agradable poder salir del salón y sentarte por ahí relajada a realizar tus trabajos”.
Otro de los aspectos que los estudiantes destacan y disfrutan es la metodología de enseñanza que se utiliza en Colombia. Ellos no estaban acostumbrados a levantar la mano e interrumpir el discurso de su profesor si tenían alguna duda o algo no había quedado claro. Tampoco era normal que una clase pudiera durar tres horas, que en ocasiones no hubiera tareas o que la relación de los profesores y los alumnos fuera cercana e informal.
“Fue muy extraño cuando el primer día de clase los profesores preguntaron nuestros nombres, qué hacíamos y qué nos gustaba. Yo no entendía por qué era yo la que estaba hablando, ahora entiendo que las clases acá son mucho más interactivas, el profesor no es el único que habla y, en realidad, eso me encanta”, cuenta Desarae.
Primer lugar
Fortalecimiento de los servicios y oportunidades para el incremento de la movilidad internacional entrante en EAFIT fue el proyecto con el que la Universidad obtuvo su cupo para recibir a los extranjeros con la iniciativa la Fuerza 100.000 en las Américas.
El proyecto pretende fortalecer los servicios y las oportunidades ofrecidas por EAFIT a estudiantes norteamericanos e incrementar los acuerdos bilaterales con universidades en los Estados Unidos.
Para lograr este objetivo, la Oficina de Relaciones Internacionales diseñó e implementó un plan de marketing que se enfocaba en las necesidades de los estudiantes de esta nación, incluyendo en estas el programa de becas.
Marcela anota que para la Oficina este proyecto representa una oportunidad de apalancar las metas y los sueños que se tienen para crecer, fortalecerse y acercarse a los Estados Unidos. “No solo queremos que la movilidad crezca en números, sino también en calidad”, y añadió que hacer parte de esta iniciativa le brinda a EAFIT un aval y una legitimidad, desde el Gobierno norteamericano, de que este acercamiento sí es posible.
Otro de los aspectos que los estudiantes destacan y disfrutan es la metodología de enseñanza que se utiliza en Colombia. Ellos no estaban acostumbrados a levantar la mano e interrumpir el discurso de su profesor si tenían alguna duda o algo no había quedado claro.
El programa de becas que la Universidad ofreció en este proyecto está divido en tres modalidades:
Study Aboard Scholarship, Intership y
Summer School.
La primera es realizar un semestre de intercambio académico en EAFIT. En esta modalidad a los estudiantes se les homologan las materias que realicen en Medellín en su universidad de origen. Los extranjeros son estudiantes activos de la Universidad, gozan de los beneficios de esta y pueden escoger cualquier pregrado que ofrece. Con estas becas cuentan los 10 estudiantes, que ya hacen parte de la Institución, cuya experiencia termina en junio.
La segunda modalidad es para que los estudiantes realicen sus prácticas en el área de comunicaciones, diseño y ciencias de la computación, proyectos de educación liderados por Proyecto 50 de EAFIT.
La tercera es la Escuela de Verano, en donde los extranjeros pueden realizar programas de corta duración en las áreas de administración, ingeniería, ciencias, humanidades, derecho, economía y finanzas. Los estudiantes hacen este intercambio durante sus vacaciones de verano en junio.
Y cuando se les pregunta a Marissa y Desarae cómo se sienten viviendo en Medellín, ambas respondieron que les encanta ir a miradores y divisar las montañas, ir a pueblos cercanos como Rionegro, Santa Fe de Antioquia y El Peñol. Las dos estadounidenses coinciden en decir que lo mejor que tiene Medellín es su gente. “Lo más valioso que yo estoy aprendiendo de todos los paisas es que tienen una relación muy estrecha, de cuidado y amorosa entre ellos. En Norteamérica las personas somos muy indiferentes”, expresa Desarae.
Los estudiantes con los intercambios, a su vez, incrementan y fortalecen las competencias multiculturales. “Los 10 becados están realizando una inmersión cultural en un país latinoamericano, en especial Colombia que es la segunda economía que está creciendo más rápido en el continente. Ellos en EAFIT encuentran un espacio donde no solo van a ver lo académico sino que también van a tener una riqueza en la parte cultural y lúdica, un bienestar universitario que hace que se sientan bien”, indica la líder de la ORI.
Los estudiantes con los intercambios, a su vez, incrementan y fortalecen las competencias multiculturales. “Los 10 becados están realizando una inmersión cultural en un país latinoamericano, en especial Colombia que es la segunda economía que está creciendo más rápido en el continente. Ellos en EAFIT encuentran un espacio donde no solo van a ver lo académico sino que también van a tener una riqueza en la parte cultural y lúdica, un bienestar universitario que hace que se sientan bien”, indica la líder de la ORI.
Y son precisamente los beneficios de la internacionalización lo que está haciendo que este tema tenga una importancia cada vez mayor en la Universidad: la movilidad es uno de los ejes, pero también las actividades culturales, la oferta de idiomas y la política de bilingüismo ayudan a formar profesionales competentes internacionalmente.
Para Federico Mejía la Universidad quiso brindar una atención muy especializada a los estudiantes de esta iniciativa, pues no solo se quiere que haya buenos resultados sino que se sientan mucho mejor que en su casa.
Para Marcela Wolff esta iniciativa está pensando en el progreso de un continente y en comprenderlo mucho mejor, pues los estudiantes serán los próximos líderes y, si no conocen el entorno, será muy difícil trabajar para la región.
Aparte de la beca, todos recibieron, entre otros beneficios, un curso gratuito de español en el Centro de Idiomas, así como un acompañamiento “Buddy program” de la ORI, que consiste en asignarle a cada extranjero un estudiante colombiano de EAFIT para que le ayude a visitar opciones de alojamiento, le muestre la ciudad, lo acompañe al centro de inmigración a gestionar la cédula de extranjería y lo apoye en cualquier asunto durante su llegada a la ciudad.
Los becados también hacen parte de un programa de la ORI llamado Embajadores, en el que ellos, desde su experiencia, motivan a otros estudiantes internacionales a realizar un Intercambio en EAFIT y a conocer la ciudad. En este programa hay incentivos económicos que los motivan a convertirse en embajadores en sus países y que compartan cómo se han sentido en la Institución.
Atención en Latinoamérica
Según el Departamento de Estado de los Estados Unidos, la población hispana en ese país supera los 50 millones y sigue aumentando. La clase media en América Latina ha crecido en 50 millones en la última década, y este crecimiento va a continuar gracias a los vastos recursos manufactureros, agrícolas y minerales de la región.
Por esto, la Fuerza de 100.000 quiere profundizar las relaciones en todo el hemisferio, al darles la oportunidad a los jóvenes de explorar las Américas, entendiendo los valores comunes y las culturas diversas, a la vez que liderarán un proceso de mayor integración comercial y social que traerá más seguridad y prosperidad.
Para Marcela Wolff esta iniciativa está pensando en el progreso de un continente y en comprenderlo mucho mejor, pues los estudiantes serán los próximos líderes y, si no conocen el entorno, entre ellos será muy difícil trabajar para la región.
Al triunfar en la convocatoria, EAFIT no solo adquirió su cupo para hacer parte de la iniciativa del Presidente Obama. También obtuvo un subsidio de 25.000 dólares de financiación para la ejecución del proyecto. Esta meta alcanzada demuestra que la Universidad tiene los servicios y la calidad necesarios para recibir a estudiantes extranjeros, concluyó la Jefe de la ORI.
Para Marissa y Desarae siempre será una aventura venir a Medellín. El vivir esta experiencia les ha demostrado que hay otras formas interesantes de pensar y actuar, y luego de llevar casi cuatro meses en Colombia han aprendido a sentir los abrazos, a diferenciar el te quiero del te amo y a preocuparse más por el prójimo.