Asesora de los talleres ¿Cómo transformar mi ciudad?, ¿Cómo se diseña una ciudad? y ¿Por qué se ilumina una ciudad?Ximena Covaleda es una arquitecta interesada en investigar, desde una mirada multidisciplinaria, los procesos urbanos y ambientales que vive la ciudad.
Para acercarse a su “problema” investigativo, Ximena hace énfasis en que hay que mirar y vivir la ciudad para, así, comprender las diversas realidades y las relaciones que se instauran dentro de ella, como son la informalidad, la inseguridad, las ocupaciones precarias en las laderas, y el crecimiento vertiginoso y especulativo en algunos sectores de la urbe.
Para llevar a cabo su trabajo, esta investigadora viaja de lo documental a lo vivencial. Es decir, de los libros, mapas y fotografías se acerca al territorio geográfico; conoce los terrenos, las viviendas y la gente que habita allí.
Su motivación es “pensar que desde donde yo estoy se puede contribuir para el cambio”. Uno de sus anhelos es que Medellín sea “una ciudad en la que se pueda caminar, ir en bicicleta, con más parques y más segura”.
Más datos sobre Ximena
¿Qué estudia un arquitecto?La ciudad y lo que pasa en ella, no solo como una construcción física, sino también en términos de movilidad, medio ambiente, asuntos sociales, económicos e institucionales. Su buen funcionamiento depende de todos estos puntos de vista.
¿Qué te dedicas a investigar?Estoy en la sistematización del Proyecto Urbano Integral de la zona Nororiental, para la Agencia Francesa de Desarrollo, quienes están interesados en aplicar la metodología y estrategias de equidad en los países donde trabajan.
El Proyecto Urbano Integral Nororiental trabaja en las zonas de la ciudad con bajos índices de calidad de vida y desarrollo humano, a través de la intervención del espacio público, la movilidad, la vivienda, entre otros.
¿Por qué decidiste ser arquitecta?Por las clases de Historia del Arte que recibí en el colegio, pues con ellas descubrí un mundo del que no era consciente; otro factor determinante fue el diseño de una maqueta para un proyecto escolar de granja autosostenible; desde ahí pensé que la arquitectura era maravillosa y que quería estudiar eso.
¿Qué consejo le darías a un niño y joven que quiera ser arquitecto?Que mire mucho la ciudad e identifique qué le gusta y qué no, y así piense en estrategias para mejorarla. Observar, también, es un ejercicio importante para generar sensibilización.
¿En qué materias del colegio te iba mejor?En las humanísticas como Historia del Arte, Ciencias Sociales y Español.
¿En qué materias del colegio te iba peor?En Ciencias Naturales. Aunque me iba bien, no era la materia que más disfrutaba.
¿Qué es lo mejor de ser arquitecta?Disfrutar las ciudades desde un punto de vista formal o histórico; recorrerlas para conocer cómo se comporta la gente y apropia de los espacios; y pensar en estrategias para transformarla y mejorarla.
¿Qué es lo peor de ser arquitecta?Es una profesión que implica mucha dedicación y tiempo, porque la mente no descansa, siempre piensa en función de la arquitectura.
¿Qué es lo más emocionante que has encontrado, descubierto o investigado?Comprobar la conexión que tiene un barrio, como Laureles, con la teoría de La Ciudad Jardín, documentarlo, demostrarlo en una tesis y descubrir el beneficio que ha traído para Medellín.
Además es emocionante lo que pasa hoy con la arquitectura, tanto en Medellín como en el departamento: los proyectos de los parques biblioteca, los parques educativos, entre otros; me parecen muy poderosos.
¿Cuál es tu herramienta o espacio de investigación preferido?La bibliografía, la cartografía y las fotografías, herramientas que ahora puedes encontrar reunidas, también, en soportes virtuales.
¿Conoces un sitio web sobre arquitectura que pueda recomendar?Hay una página en Facebook, que se llama
Medellín, de villa a metrópoli, que muestra edificios antiguos y contemporáneos desde ámbitos como lo arquitectónico y lo urbano.
También me gusta mucho
A57, una página dedicada al encuentro, difusión y comunicación de la arquitectura y sus áreas afines en Colombia.
¿Cuál es el libro sobre arquitectura que más te gusta?“Las Ciudades Invisibles”, de Italo Calvino. Es un libro precioso para los niños, porque cuenta historias de ciudades con formas y experiencias diferentes.
¿A qué te dedicarías si no fueras arquitecta? Habría estudiado Historia del Arte, me gusta mucho.