Agarrar las manijas de las puertas, pulsar los botones de cajeros electrónicos o ascensores, o sujetarse en el transporte público son actividades que, antes de la pandemia derivada por covid-19, se realizaban de manera mecánica, casi inconsciente. Sin embargo, la contingencia actual ha obligado a las personas no solo a ser más meticulosas con su higiene y el lavado de manos, sino también al momento de entrar en contacto con ciertas superficies.
Justamente pensando en esta situación, dos emprendedores eafitenses se dieron a la tarea de crear una herramienta que apoyara estas y otras actividades cotidianas. Fue así como surgió el
Notoco, uno de los nuevos desarrollos de la empresa Dynacad, creada en 2007 por el ingeniero mecánico Mario Betancur Rodríguez, y la ingeniería de procesos Luisa Fernando Hoyos Gaviria.
Este dispositivo funciona como una extensión de la mano del usuario, y le permite realizar acciones como sujetarse de las barandas, manipular objetos, recibir domicilios, apretar botones, y girar perillas y manijas, entre otros, sin tocarlos directamente. De manera reciente, además de su la donación que hicieron de estos al Área Metropolitana del Valle de Aburrá, también comenzaron a exportarlos a Ecuador y Estados Unidos.
“La herramienta viene en dos versiones: mini y ultra, y lo configuramos tras un proceso en el que trabajamos junto a investigadores y desarrolladores de Europa y Estados Unidos para todo el tema de impresiones 3D y validaciones. Después de un mes logramos materializar esta idea que ahora podemos llevar al mundo", comenta el eafitense Mario Betancur, quien además agrega que, desde que comenzó la pandemia, sintió la necesidad de aportar a la sociedad para ayudar a frenar su avance.
Y como parte de esa apuesta también se sumaron a la alianza Simdesign, integrada por las universidades EAFIT y CES, el Hospital Pablo Tobón Uribe, Postobón, Leonisa, Ruta N e InspiraMED, y con la que fue posible que la academia, los investigadores, el Gobierno, el sector salud, y empresarios y emprendedores unieran voluntades para crear 650 videolaringoscopios para la intubación de pacientes con covid-19.
“En Dynacad creemos que tenemos el conocimiento y los productos para transformar el mundo. Y para nosotros fue un motivo de orgullo poder participar en la creación de este dispositivo que ayudará a salvar vidas y que permitirá, al mismo tiempo, que pueda ser manipulado por el personal médico sin que estos tengan riesgos. Eso es justamente lo que hacemos, estudiamos la geometría y la convertimos en productos con valor agregado para diferentes sectores", explica el emprendedor.
Este emprendimiento nació como una
spin off universitaria con el apoyo de Innovación EAFIT. Hoy, más de 12 años después de su creación, operan como una empresa independiente, con 65 empleados, diversas plantas en temas de procesos de inyección de plásticos, metalmecánica y moldes, y una amplia participación en los sectores automotriz, de energía, y de aplicaciones médicas. En este último trabajado de la mano de Smartbone, otro emprendimiento eafitense.
“Ha sido un camino de satisfacción, crecimiento y evolución. Siempre nos hemos mantenido abiertos a trabajar con otras empresas y emprendedores y, al ver que estamos trabajando por la humanidad, nos damos cuenta de que todos estos años han valido la pena", puntualiza el egresado.
Mario quiere inspirar a otros a materializar sus ideas
Desde su época como estudiante de pregrado, Mario Betancur supo que en EAFIT encontraría el terreno idóneo para desarrollar su creatividad. Y no se equivocó. El eafitense destaca, de esos años, los aportes que la Universidad dejó en su vida más allá de lo académico, y que lo inspiraron y lo motivaron a ampliar su visión y la frontera del conocimiento.
“EAFIT me inspiró a ser una mejor persona y me hizo profesional, investigador y emprendedor. Por eso trato de hacer lo mismo con la gente que está a mi alrededor: inspirarlos para que conviertan en realidad sus ideas", concluye.