Ni Apple, ni Amazon, ni Walmart, ni Volkswagen, ni ninguna de las otras seis empresas del top 10 de la lista
Fortune Global 500 del año 2022 sacan 5 sobre 5 si se evalúan sus compromisos relacionados con la naturaleza. Ninguna de las 500 tiene establecidos objetivos que aborden, en conjunto, compromisos relacionados con cambio climático, consumo de agua potable; contaminación por químicos y plástico; pérdida de bosques y lecho marino; pérdida de biodiversidad; y contaminación por nutrientes al suelo.
La mayoría de esas organizaciones se centran en el cambio climático, pero, probablemente por desconocimiento, no tienen en cuentan las otras dimensiones que fueron establecidas por la firma McKinsey Sustainability para un estudio, publicado el pasado 13 de septiembre de 2002, que determinó que “si bien las empresas
Global 500 reconocen cada vez más la importancia de la naturaleza, pocas han establecido compromisos relacionados con ella fuera de lo que tiene que ver con el carbono”.
El estudio responde a una realidad: los ciudadanos, los gobiernos y las empresas nos enfrentamos a dilemas cada más complejos en cuento al cuidado del medioambiente. Es un tema de supervivencia. No solo porque según cálculos de McKinsey Sustainability la mitad de toda actividad económica depende del capital natural, también por todos los dilemas relacionados con la protección del medioambiente que hoy mueven a EAFIT a transformarse con la intención de contribuir con el diseño de soluciones ante los principales retos que afrontamos como humanidad.
A la meta de cero emisiones para al año 2030, con la que la Convención del Clima de la ONU quiere comprometer a los gobiernos a ser positivos para la naturaleza, se suma el reto de que para 2050 la naturaleza se recupere.
Dilemas en números:
- Una de cada tres personas vive sin agua potable en el mundo, según datos del Banco Mundial.
- El 12 % de los hogares en Colombia no tiene acceso a agua potable, según el Departamento Nacional de Planeación.
- Ninguna de las 14 comunas de Medellín cumple con los indicadores de Espacio Público, según datos de Medellín Cómo Vamos.
- El 8 % de la población de Medellín vive en áreas de riesgo por deslizamiento, datos de Urbam EAFIT.
“La Universidad viene pensando cuál es el rol y la responsabilidad que asume frente a la conservación del medioambiente y ser positivos para la naturaleza, trascender los asuntos meramente de conservación. No basta con ser, por ejemplo, carbono cero, es, además, cómo regeneramos, cómo dejamos un planeta mucho mejor de lo que lo encontramos. Eso para nosotros significa ser positivos para el medioambiente”, explica Isabel Gutiérrez Ramírez, directora de Estrategia de EAFIT.
Isabel se refiere, así, a uno de los cinco retos globales en los que ahora se centra la U: Desarrollo sostenible, con foco en lo ambiental; Sociedad, humanismo y cultura; Cuidado y bienestar; Ciencia, tecnología e innovación; e Innovación educativa y miradas del futuro. Estos dilemas motivan la transformación de la Institución que, a su vez, está sustentada en cuatro pilares: Educación flexible y relevante; Diseño y construcción de soluciones; Conexiones; y Transformación cultural.
“Este enfoque de ser positivos para la naturaleza ayuda a que el impacto que generan los graduados en la sociedad sea consciente, que tomen decisiones para la sostenibilidad financiera, ambiental y social con un pensamiento que sea incluyente. Así vamos a tener organizaciones con un enfoque mucho más transversal e integral”, opina Isabel Gómez Yepes, directora de la Dirección de Desarrollo Institucional y Vínculos.
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