Juan Luis Mejía Arango
Rector Universidad EAFIT
EAFIT se comenzó a escribir hace casi seis décadas con la intención de construir una nueva ‘narración’ de país, una donde la ciencia le aportara soluciones al sector productivo
en una nación que experimentaba grandes transformaciones sociales, cambios que incluían pasar de lo rural a lo urbano; la generación y la consolidación de grandes compañías en un ambiente convulsionado por cuenta de los movimientos políticos que se experimentaban en toda América; y la formación profesional de un grupo de administradores que, a partir de ese momento, asumirían el liderazgo de sus empresas en una época en la que Medellín y Antioquia confirmaban su vocación industrial y, por ende, un lugar de privilegio en la toma de decisiones de alcance regional y nacional.
Ese ‘relato’ alcanzó en 1997 una nueva dimensión con la apertura de la Institución a las humanidades, decisión que permitió, por ejemplo, la creación del Departamento de Música, el nacimiento de la Orquesta Sinfónica y la génesis de diferentes carreras que empezarían a otorgarle a EAFIT una universalidad más amplia en su formación, cambio que también repercutió en su entorno y que hizo que la ciudadanía comenzara a asociar la Universidad a otras disciplinas y a otras dinámicas sociales, mejor aún, culturales. De esa transición a las humanidades nació el entonces Fondo Editorial, hoy Editorial EAFIT, unidad que tras 20 años de labores les ha dado voz a decenas de autores y de académicos que encontraron en sus páginas la manera de plasmar una idea, un pensamiento o un principio científico. Luego de dos décadas, lapso en el que han dejado su huella connotados jefes —hombres y mujeres de reconocida trayectoria—, la de hoy es una editorial madura, en la que sus 33 colecciones, cerca de 400 autores y unos 580 títulos hablan de un valioso aporte al acervo intelectual no solo del país sino del mundo.
El ‘relato’ continúa y el acervo se enriquece con la apertura, hace ya varios años, de programas académicos como la especialización y la maestría en Hermenéutica Literaria; la reciente incorporación a la oferta de la Escuela de Humanidades de la maestría en Escrituras Creativas; y la entrega, desde mediados de esta década, de los premios Biblioteca de Narrativa Colombiana y León de Greiff al mérito literario, alcances que confirman esa narración de Universidad a la que se incorporará a partir de 2018 un nuevo capítulo con la puesta en marcha del pregrado en Literatura, el número 22 de EAFIT. Esta apuesta institucional trae varias novedades, entre estas saber que existen, de la mano de las TIC,
nuevas posibilidades de contar historias gracias a los formatos digitales y a las narrativas transmedia, escenarios en los que tienen cabida áreas como la música o la industria del entretenimiento. Además, los futuros profesionales del programa podrán explorar diferentes formas de ejercer su disciplina, ya sea en la gestión cultural o en la edición, líneas en los que se moverá, entre otras, la naciente carrera.
Tanto la Editorial EAFIT como el nuevo pregrado en Literatura son razones para convencerse aún más de por qué en esta Universidad se forma una élite académica que genera conocimiento y enriquece el cúmulo de saberes que fortalecerá el repositorio científico y cultural de esta región. Por eso, uno de los retos es que este ‘relato’, que se inició hace ya 20 años con el arribo de las humanidades a estos claustros, mantenga en el camino de la excelencia a esta EAFIT que ya pronto será sexagenaria y que asumió como un compromiso con su entorno trabajar en red con otras instituciones que, como en el caso de la Editorial, le ha permitido lograr alianzas cuyo fruto puede leerse en trabajos como la Colección Bicentenario, una serie de obras que, en sinergia con otras universidades de Antioquia, sirvió para celebrar los 200 años del departamento.
Puede que las que se escriban en este campus sean varias ‘narraciones’, historias que unidas conformen un gran contenido de ciencia y de transformación que la comunidad científica y la sociedad asuman como propias, pues ese gran ‘texto’ que es EAFIT—y desde que se planteó ser una institución de tercera generación— impera siempre el compromiso por aportarle soluciones a una Colombia que necesita, en esta nueva etapa histórica que comenzó, de otros relatos, unos donde los protagonistas centrales sean aquellos que conforman la sociedad del conocimiento.