Daniel Rojas Arboleda
Colaborador
Luego de quince años dedicados a la ciencia y al desarrollo de avances tecnológicos, el Metro de Medellín y EAFIT, a través del Grupo Estudios de Mantenimiento Industrial (Gemi), recogen en la actualidad la cosecha de un largo proceso de colaboración, cuyos beneficiarios directos han sido los usuarios del sistema metro y, por extensión, los cerca de 4,3 millones de personas que habitan el área metropolitana del Valle de Aburrá.
La relación de construcción de confianza entre ambas entidades surgió en 2003, luego de que el trabajo en temas de mantenimiento industrial adelantado desde Gemi, colectivo de investigación adscrito a la Escuela de Ingeniería de la Universidad, llamara la atención del Área de Ingeniería de la Gerencia de Operación de la empresa estatal.
“Surgieron conversaciones sobre posibles proyectos, de acuerdo con los problemas del sistema de transporte, y los posibles enfoques y estrategias para abordarlos desde el grupo de investigación de la Institución. Empezaron a analizar inconvenientes alrededor de la interfaz rueda-vehículo, y desarrollaron el Sistema Portátil de Diagnóstico (SPD), para los vehículos de pasajeros, un método portátil para monitorear la interfaz y detectar anticipadamente posibles fallas”, recuerda Félix Londoño González, asesor de Investigación de EAFIT.
Dicha iniciativa, cuyo proceso de investigación y desarrollo tomó 22 meses, y fue financiada por el Metro de Medellín Ltda. y el Departamento Administrativo de Ciencia, Tecnología e Innovación (Colciencias), surgió de la necesidad del sistema de implementar la norma internacional UIC 518, de la Unión Internacional de Ferrocarriles, que establece los estándares de prueba y aprobación de vehículos para vías férreas, y contempla aspectos de seguridad y comportamiento dinámico de los mismos, así como del desgaste de las vías y la calidad del viaje.
La investigación sobre la severidad de las vibraciones mecánicas, en condiciones reales de operación, fue el punto de partida de un intercambio de conocimientos y experiencias con el Metro de Medellín que ya cuenta en su haber con 18 proyectos y siete patentes. Cinco de estas son nacionales, otorgadas por la Superintendencia de Industria y Comercio de Colombia; dos son internacionales, concedidas por la Oficina de Patentes y Marcas de los Estados Unidos (Uspto, por sus siglas en inglés), y una ganó el Premio Investigación de mayor impacto 2013-2014 de Medellín.
“En el ecosistema de aprendizaje de los proyectos entre investigación, desarrollo e innovación (I+D+i), en el Metro de Medellín, y EAFIT, se iniciaron procedimientos para configurar espacios y sincronizar tiempos; estructurar y conectar conocimiento, mediante alianzas internacionales; crear sistemas técnicos, desde la concepción hasta la operación, y adelantar procesos de formación técnica, tecnológica, profesional y especializada”, resalta Leonel Castañeda Heredia, coordinador del Gemi.
Leonel, quien es docente en la Escuela de Ingeniería de EAFIT, resalta las dinámicas de transferencia tecnológica y generación de nuevo conocimiento, nacidas al calor de la interacción entre las entidades. Destaca también los procesos para fortalecer el saber de los funcionarios de ambas organizaciones, y los esfuerzos para llevarlo a artículos, información tecnológica y desarrollos patentados.
Todo esto en una continua estimulación de procesos capaces de transformar las realidades de las personas que operan y mantienen la columna vertebral del sistema de transporte del Valle de Aburrá.
Un sentimiento compartido por Adriana García Grasso, directora de Innovación EAFIT, quien valora positivamente los cambios culturales y organizacionales obtenidos por medio de laboratorios y talleres, en temas como liderazgo y cultura Metro, adelantados con personal de la compañía.
“Es decir, esta relación trasciende la parte técnica, y se ha dado también en otras áreas del conocimiento. De hecho, los procesos de formación han abarcado aspectos tan diversos como sistemas de mantenimiento, capacidades en cables y educación continua. Eso sin contar que los avances tecnológicos patentados se estén aplicando actualmente en el sistema”, explica Adriana.
Mutuo beneficio
Mauricio Soto Garcés, jefe de I+D+i en el Metro de Medellín, refiere que cuando la empresa buscaba soluciones a la medición de vibraciones en sus vehículos encontró un grupo dedicado a estos temas en EAFIT, y dio inicio a una relación cuyos frutos han permitido a la compañía producir conocimiento, generar nuevos protocolos para el mantenimiento de los sistemas y crear componentes para repotenciar los trenes.
“Todos los proyectos realizados con la Universidad se encaminan a mejorar las prestaciones y el desarrollo de nuevos elementos funcionales del sistema. Cada uno de estos ha permitido mantener los estándares de mantenimiento y, con esto, la disponibilidad del sistema. Esto redunda en el aumento de la calidad de vida de nuestros usuarios”, asegura Mauricio.
Y es que los avances científicos, logrados de manera conjunta en estos quince años, permitieron al sistema mejorar su eficiencia y ahorrar importantes recursos económicos. Dichos triunfos tienen que ver con procedimientos diseñados a partir de necesidades y experiencias locales. Además, están fundamentados en capacidades académicas y conocimientos, cuya aplicación evitó tener que recurrir a expertos internacionales y tecnologías extranjeras.
Para Adriana García no es lo mismo traer las tecnologías desde afuera para adaptarlas al contexto local que desarrollarlas según los requerimientos, las necesidades y la cultura de la ciudad.
Algunos de los proyectos en los que el Metro de Medellín y Gemi han invertido esfuerzos y conocimientos son: Modelamiento dinámico y geométrico de la interfase víavehículo; Sistema experimental de medición de cargas verticales de trenes; Actualización del software del SPD; Automatización de la evaluación técnica de ruedas ferroviarias; Evaluación de esfuerzos en la viga principal que conecta el conjunto de las ruedas con el compartimento de pasajeros, y Estudio para la definición de parámetros y metodología para la recepción de software operativos.
“Pero más allá de los avances y beneficios que esta relación ha traído al sistema, la Universidad ha aprendido mucho. Ha desarrollado un montón de capacidades y formado estudiantes y docentes alrededor del tema. Estos procesos tuvieron, además, un efecto demostrativo muy interesante, pues han sido casos exitosos de la relación universidadempresa-Estado, que dinamizan el sistema de innovación e investigación de Medellín”, manifiesta la directora de Innovación EAFIT.
Félix Londoño coincide con este planteamiento al subrayar la vinculación de los procesos de investigación y desarrollo mencionados con la formación en programas de EAFIT como el pregrado en Ingeniería Mecánica, la especialización en Mantenimiento Industrial y la línea de mantenimiento en maestría y doctorado.
En palabras del directivo, así se dio la formación en posgrado de varios funcionarios del Metro de Medellín, lo que facilitó a la empresa tener personal pendiente de trabajar en problemas propios mientras adquiría formación superior. La Universidad, por su parte, ha podido experimentar la parte técnica del desarrollo de un sistema masivo de transporte, así como dotar laboratorios Los vagones del tren y su desempeño en los rieles, así como varios aspectos de resistencia del sistema metrocable, son algunos de los frentes en los que el grupo de investigaciones de la Universidad ha colaborado. Foto: Róbinson Henao 98 y otros espacios para la experimentación en avances de utilidad dentro del sistema masivo de transporte.
Calidad de vida
Y claro, el sistema moviliza cerca de 227 millones de pasajeros anualmente, es decir, hay una relación directa con la calidad de vida de los habitantes del Valle. “Todo esto se hace tangible cuando se ofrece un servicio de transporte que cumple con estándares internacionales de seguridad, disponibilidad, confiabilidad y mantenibilidad, que hace parte del compromiso concreto de las dos entidades tras decidir desarrollar proyectos de investigación de I+D+i. Las relaciones de confianza en este frente son siempre exitosas, pues se construyen sobre la base de los intereses y la razón de ser de cada entidad, sin perder independencia”, afirma Leonel Castañeda.
El docente agrega que los resultados obtenidos en estos quince años han contribuido a mantener los estándares de seguridad y la disponibilidad de los sistemas de transporte, y a generar apropiación de conocimiento especializado en la ciudad, en el funcionamiento, la operación, el mantenimiento y la modernización de sistemas ferroviarios, tranviarios y de cables aéreos.
Este proceso de evolución llevó a que el Gemi fuera ubicado en el primer puesto en el ranquin de Mejores Grupos ASC 2018 en circulación de conocimiento especializado, elaborado por la firma Sapiens Research Group.
En el ámbito personal, todos estos años le dejaron claro a Leonel que investigar es pararse desde la solución y no desde el problema, y le permitieron ubicar la esencia del ser humano en la exploración y el descubrimiento, más allá de vivir constantemente en el pasado, para asumir retos y mejorar la calidad de vida de toda la población.
“Investigar es asumir retos todos los días para crear cambios en la sociedad. Las corrientes del conocimiento fluyen y se adaptan a las formas de aprendizaje que surgen en el proceso de investigación. La cuestión es sencilla: investiga y transformarás las realidades de la sociedad a la que perteneces”, sostiene el director del Gemi.
A la pasión de Leonel se suma, de acuerdo con Félix Londoño, una nutrida red internacional construida por el investigador a través de los años, por medio del contacto con docentes y colegas en Polonia, Suiza y los Estados Unidos. La cofinanciación de varias iniciativas conjuntas con recursos de Colciencias fue también un logro del docente de EAFIT.
“Esto fue muy atractivo para la empresa, pues dinamizó la gestión de recursos de investigación al evitarle asumir el 100 por ciento de los costos”, dice el jefe de Investigación de la Institución.
Y es que, según Mauricio Soto Garcés, jefe de I+D+i en el Metro de Medellín, la unión de la universidad y la empresa estatal, como fuente de conocimiento, es y será siempre un componente importantísimo en el desarrollo de las sociedades. En esa línea, Juan Luis Mejía Arango, rector de EAFIT, pondera también la buena relación del Metro, no solo con la Institución, sino con otras universidades de la ciudad. “El Metro de esta ciudad es la empresa pública que más confianza tiene en las universidades locales, lo que también nos implica una gran responsabilidad”.
“EAFIT y el Metro de Medellín formaron una alianza que, además de generar conocimiento, se ha industrializado. Con la materialización de nuevos componentes, equipos y elementos fundamentales en las estructuras del tren, unido a las buenas prácticas de mantenimiento y a un excelente uso por parte de nuestros usuarios, se posibilitó la extensión de la flota de trenes en 20 años, con un ahorro muy importante para la región”, indica Mauricio.
Consultoría de calidad
La naturaleza de servicio público del Metro, y la función social inherente a la Universidad, permite adivinar que el vínculo de colaboración entre estas entidades trasciende el aspecto meramente económico.
Por esto, a las estrategias que hoy se articulan desde Innovación de EAFIT para comercializar los avances patentados y, de esta manera, llevarlas a otras instancias de la sociedad, se suma la creación de una plataforma de consultoría que vaya más allá de la faceta de proveedores de servicios y desarrollo de investigaciones conjuntas.
“Nos estamos juntando para presentar propuestas a otras ciudades. Estamos en conversaciones, para hacer estudios de metros, desarrollo de sistemas de movilidad, entre otras iniciativas. Nos han llamado para desarrollar sistemas de transporte como el de Medellín, y asesorar sistemas de cables, y nos hemos presentado a varias convocatorias en América Latina para prestar servicios de diseño de sistemas de transporte”, anunció Adriana García Grasso, directora de Innovación EAFIT.
Congresos internacionales en cables aéreos; diplomados en diseño, operación y mantenimiento de cables, ofrecidos a empresas como Transmilenio; estudios de sanidad estructural de cables de aceros, con entidades como la Asociación de Cables Aéreos de Manizales y Comfama; la creación del curso para el entrenamiento de soldadores en aleación de aluminio, en la plataforma del Servicio Nacional de Aprendizaje (Sena), entre otros, son aspectos que contribuyen al fortalecimiento tecnológico de la región.
Repotenciación y cables
Con la tecnología de algunos de los avances conjuntos patentados se hará la repotenciación de los vagones del metro, luego de que el sistema se enfrentara a la disyuntiva de si era necesario cambiarlos o repotenciarlos.
“La Universidad nos acompañó en el desarrollo de la viga pivote de los trenes y en la definición de un procedimiento de reparación que garantice los 20 años de vida útil. EAFIT, en mi opinión, sería de gran ayuda en los procesos de verificación y garantía del cumplimiento de las características de estas actividades”, asegura Mauricio Soto Garcés, jefe de I+D+i en el Metro de Medellín.
De otro lado, el Metro de Medellín posee y construye actualmente diferentes sistemas de transporte por cable en zonas de alto impacto social en la ciudad. Desde 2011, EAFIT adelanta proyectos de I+D+i en cables aéreos, por lo que la compañía la invitó a crear el Laboratorio-taller para sistemas de transporte por cable aéreo, un espacio de aprendizaje, único en el mundo y que se entregó el 16 de octubre de 2018, para entrenar a su personal en el manejo de las tecnologías con las que interactúan a diario. Hasta el momento, la Universidad ha capacitado a 38 funcionarios en la operación y mantenimiento de tecnologías de cables aéreos.