Santiago Higuita Posada
Colaborador
Mateo Pimienta Sánchez, a sus 22 años, es un cantante de rap de la Comuna 13 que sueña con crear un programa inspirado en la música, una alternativa cultural para los jóvenes de los barrios periféricos de Medellín que, además del desarrollo artístico, se convierta en un instrumento para la formación social y la política. Al igual que él, Elizabeth Valencia Foronda, de 20 años, quien pronto será artista plástica de la Universidad Nacional, mediante el proyecto Surcos expone obras sobre el desarraigo humano, en cocreación con víctimas del desplazamiento forzado en Colombia.
También se encuentra Esteban Jaramillo Ruiz, de 23 años, un novel abogado de la Universidad de Medellín que se cultiva en el camino de la política inspirado por figuras del nuevo liberalismo, participante de movimientos ciudadanos en los que dice están las ideas que transformarán el país. Y está también Surany Gómez Mesa, de 21 años, estudiante de Trabajo Social en la Universidad de Antioquia, quien desde niña se unió a las juventudes salesianas y hoy inspira a sus similares con Reto 9, un programa de formación ciudadana y apropiación de territorios en Medellín.
Los cuatro son líderes juveniles en lo público —algo que filósofos como Jürgen Habermas definirían en el contexto de los espacios de participación ciudadana que se dan por fuera de las instituciones formales, o como diría Hannah Arendt, la esfera donde se organiza la vida en común a través de la acción y el discurso— que hicieron parte de la plataforma de liderazgo Jóvenes 20/20, programa que convocó a 40 líderes de barrios y corregimientos de Medellín. Esta fue una alianza público-privada de EAFIT, la Alcaldía de Medellín, la caja de compensación familiar Comfama y Proantioquia, sin duda las organizaciones que jalonaron el surgimiento de esta nueva generación de liderazgo.
"Entendemos que la formación de líderes no es un trabajo solamente de las instituciones educativas, sino que es parte del desarrollo del concepto de la ciudad educadora", Juan Luis Mejía, rector de EAFIT.
Todos se encuentran reunidos en uno de los auditorios de EAFIT escuchando al rector Juan Luis Mejía Arango, uno de los mentores del diplomado de liderazgo público, conocedor del desarrollo social y empresarial de Antioquia. En la charla que sirvió de bienvenida les habló sobre historia y la importancia de la formación intelectual de las nuevas generaciones de líderes del país.
“Entendemos que la formación de líderes no es un trabajo solamente de las instituciones educativas, sino que es parte del desarrollo del concepto de la ciudad educadora. Como dice William Ospina, hoy en la educación participamos muchos actores de la ciudad como los medios de comunicación y las instituciones educativas, y esta es una forma de hacer práctica esa idea de ciudad educadora. Y también porque para una ciudad no hay tarea más primordial que formar a los líderes del futuro”, expresó el Rector.
Se inspiran agentes de cambio
“Lo mejor fue conocer la Escuela de Verano, ahí fue donde nos integramos, hablamos y nos conocimos los Jóvenes 20/20. Salí lleno de ideas y conocimiento”, dijo Mateo Pimienta, sorprendido ante la diversidad de miradas y proyectos de liderazgo que encontró. “Hemos aprendido sobre formulación de proyectos y cómo hacerlos posible. Para mí una de las mejores clases fue sobre la historia de la ciudad, donde el Rector habló de una manera tal que se le notaba la profunda pasión por la academia. Eso me inspiró demasiado”, complementó el artista y líder cultural.
La escuela de hip hop que una vez imaginó, originalmente junto a su grupo de amigos raperos, lleva como referente el nombre de su hermano Marcelo Pimienta MC Chelo, un reconocido artista que fue víctima de la violencia el 5 de agosto del año 2010 en la Comuna 13 de Medellín. Justo cuatro días antes del cumpleaños catorce de quien ahora continúa su legado como actor público y agente de cambio.
“Esto que tengo ahora, la música, me ayudó mucho cuando lo perdí a él. En los barrios donde se viven las fronteras invisibles los pelados, muchas veces, no tienen acceso a las escuelas por estar en lugares alejados. Mi intención es que con la cultura y la música es posible evitar el reclutamiento de jóvenes, basado en enseñarles sobre la vida, el arte y los derechos humanos. Para eso son los espacios de participación juvenil”, manifestó Mateo.
Con los conocimientos adquiridos en Jóvenes 20/20 esta idea busca ahora convertirla en un proyecto de ciudad, que reúna otras experiencias relacionadas con la cultura y la memoria histórica como vehículo de transformación de los contextos urbanos, sensibilizando a comunidades y jóvenes vulnerables al conflicto armado.
En este propósito lo acompañaron otros líderes juveniles como la gestora cultural y maestra de danza Sara Ardila, de 26 años; María Camila Arango Echavarría, de 22 años; y la promotora de laboratorios de memoria histórica, Sofía Jaramillo Valencia, de 17 años, con quienes se encontró en Jóvenes 20/20 para gestar este proyecto de liderazgo público, al igual que otros grupos participantes, quienes promovieron sus propias iniciativas.
Liderazgo con sensibilidad social
En la torre 49 de Villas de Santa Fe, un complejo de viviendas de interés social entregado por el Gobierno Nacional a desplazados del conflicto armado en Colombia, ubicado en la Comuna 7 de Medellín, la joven artista visual Elizabeth Valencia encontró una oportunidad de vincular su práctica artística con el liderazgo público.
Con la capacitación de una nueva generación de líderes juveniles —entre los 16 y 26 años— estos protagonistas de la transformación social pueden proyectar su experiencia acumulada en las iniciativas de liderazgo público.
A partir del testimonio de quien llamó doña María —varias veces desplazada del campo— creó el proyecto Surcos, que nació de observar su huerta urbana y la resistencia que emerge de este sencillo acto, en medio de la urbanización citadina que amenaza con desaparecer su ancestral lazo con la tierra.
Huertas de Resistencia tituló a su obra de performance y escultura, apoyada por el Ministerio de Cultura y el Programa Nacional de Concertación Cultural, una cocreación realizada con víctimas del desplazamiento forzado que logró exhibir en la exposición Tejiendo Conciencia, de la Alianza Francesa de Manizales, en el año 2018.
“Me apasiona el papel del arte como puente para permitir la construcción colectiva y la visualización de algunas formas de vida, que la violencia ha tratado de ocultar de la narrativa social. A través de la práctica artística he vinculado el trabajo en comunidad con mi proceso creativo, busco hacer visible el conocimiento de las personas que han sido víctimas de desplazamiento forzado”, describió la estudiante de artes, quien en su performance invitó a doña María a sembrar plantas medicinales de sábila y romero en maletas desgastadas de cuero, como representación del desarraigo con la tierra.
“Mi trabajo es de investigación-creación. Las propuestas que he presentado están enmarcadas dentro de lo que se llama ‘prácticas artísticas contemporáneas’, que son las prácticas sociales y culturales. Prácticas culturales porque permiten entender las dinámicas cotidianas de una comunidad. Y sociales porque está relacionado a la cocreación, a la reparación simbólica; es cómo puedo crear con otras personas propuestas artísticas, donde el artista sea un mediador que puede hacer ciertas lecturas y generar otras narrativas”, indicó la líder juvenil.
Plataforma de participación juvenil
“El programa surgió como respuesta a un vacío que dejó el Consejo Municipal de Juventud, que fue un espacio de participación muy importante para las juventudes y desde donde salieron personas que hoy participan de lo público. Fue un espacio muy interesante, pero el último que sesionó fue en el período 2010-2013 porque entró en un período de reglamentación nacional”, especificó Isabel Barreneche Giraldo, politóloga y socióloga, coordinadora de Jóvenes 20/20 en EAFIT.
Para esta plataforma de liderazgo público, que se desarrolló durante tres meses, los jóvenes recibieron el acompañamiento de mentores y líderes regionales del sector empresarial y académico. De la mano de arquitectos, por ejemplo, recorrieron las calles del centro histórico de Medellín, visitaron el Museo Casa de la Memoria y aprendieron sobre la transformación urbana de la ciudad; con docentes universitarios realizaron ejercicios para expresar las emociones del cuerpo y reconocerse entre sí como agentes de cambio; con historiadores y politólogos profundizaron desde su experiencia particular en conceptos como ciudadanía y las instituciones para fortalecer sus proyectos de liderazgo público.
La plataforma de intercambio, además, fue la oportunidad de visitar territorios y conversar con emprendedores como el gestor cultural Jeihhco, de Casa Kolacho, y Laura Duque, directora de la corporación Teatro Musical. En la Escuela de Verano y el Centro de Análisis Político de EAFIT recibieron visitas de innovadoras como Claudia Restrepo, gestora de La Network y responsable de Capacidades de Comfama, quien compartió su experiencia sobre transformación de ciudades latinoamericanas por medio de comunidades colaborativas y digitales.
“Siempre he estado vinculado a los temas sociales, pues me atrae mucho lo público. Y esa curiosidad hace más de tres años me ha llevado a conectar con movimientos políticos que trabajan por la ciudad. Entendí que para hacer una transformación de verdad hay que sentir en la piel los territorios, conocer su historia y sus actores. Esto me llevó a la política: entendí que es la herramienta que uno tiene para transformar”, aseveró Esteban Jaramillo, participante en Jóvenes 20/20 y líder de Ser Medellín, una iniciativa ciudadana que busca recorrer los distintos territorios y romper las barreras sociales que existen entre las comunidades.
“Este proceso ha sido enriquecedor porque hemos ampliado la mirada respecto a lo que hacemos los jóvenes en Medellín. Muchas veces nos quedamos en nuestros procesos locales y no conocemos lo que hacen en otras comunas. Es una oportunidad para que los jóvenes creemos redes y conozcamos lo que se hace en términos de participación juvenil, para que realmente nos apropiemos de nuestros territorios y promovamos un cambio, reconociendo que somos el presente y no el futuro de la sociedad”, consideró la joven salesiana Surany Gómez, coordinadora del laboratorio social Reto 9.
Con visión de futuro
Las charlas ofrecidas por líderes regionales de la empresa, del desarrollo social, de la academia, líderes comunitarios y representantes de lo público a los Jóvenes 20/20 hicieron parte de la plataforma de liderazgo público promovida por la Secretaría de Juventud de Medellín, el Centro de Análisis Político y la Escuela de Verano de EAFIT, Comfama y Proantioquia para fortalecer las iniciativas en lo público de los distintos territorios de la ciudad.
Con la capacitación de una nueva generación de líderes juveniles —entre los 16 y 26 años— estos protagonistas de la transformación social pueden proyectar su experiencia acumulada en las iniciativas de liderazgo público y aportar con sus miradas particulares a la renovación de las instituciones sociales.
“Son personas que ya ejercen un liderazgo y los potenciamos con la plataforma de Jóvenes 20/20. Fue un espacio de encuentro, de interlocución, de conexión con otros jóvenes de la ciudad y con actores públicos, privados, sociales y de la academia para ayudarlos a perfilar mejor su proceso, a encontrar oportunidades para llevar el liderazgo y encausarlo en proyectos específicos que puedan proponerle a la ciudad”, señaló Laura Gallego Moscoso, jefa del Centro de Análisis Político de EAFIT.
Proyectos relacionados a la democracia y la participación ciudadana, la ecología y la sostenibilidad, la educación y la memoria histórica, el trabajo y el emprendimiento, el arte y la cultura, la convivencia y los derechos humanos fueron postulados por los 40 estudiantes del diplomado, quienes reunieron sus experiencias como líderes en lo público para gestar propuestas de ciudad durante el programa. El hecho es que los participantes comenzaron con una iniciativa propia, pero en el transcurrir del proceso formativo se unieron en grupos de cuatro personas con las que diseñaron proyectos en conjunto que pudieran ser similares o iguales a los iniciales o totalmente nuevos.
Respaldo institucional
“Les entregamos unas gafas que representan la visión 2020 para que enfrenten los retos que tiene Medellín, para que inspiren y movilicen no solo sus aspiraciones personales, sino las de una sociedad que espera que sus nuevos liderazgos oxigenen con ideas y propuestas el desarrollo de la región”. Federico Gutiérrez, alcalde de Medellín.
“Jóvenes 20/20 es sumar capacidades, esfuerzos y acciones concretas por el desarrollo sostenible. Es una de nuestras grandes insistencias juntar los jóvenes para que se reconozcan como parte activa de su barrio y ciudad. Que actúen como colectivo con derechos y deberes es la mejor ruta contra los riesgos al que, lamentablemente, los expone el crimen organizado”. Rafael Aubad López, presidente de Proantioquia.
“Creemos en la fuerza creadora y el coraje de la juventud. Por esto le damos valor a este programa, en el que los jóvenes encuentren la inspiración para proponer soluciones y transformar el mundo”. David Escobar Arango, director de Comfama.