Cada pregunta tiene un sentido, cada reto responde a una razón y, en el caso de EAFIT, insta a las actuales y a las nuevas generaciones a tomar las decisiones que determinarán el futuro de un planeta que requiere de ciencia, esperanza y creatividad, pero, sobre todo, de humanidad, para superar inequidades y ampliar oportunidades.
Precisamente, al hacer clic en el Centro Humanista se quiere “aportar experiencias y estudios para enriquecer una conversación colectiva que, justamente, permita nutrir el debate público, pero también la vida de las organizaciones, y las conversaciones y las discusiones alrededor de la convivencia en nuestros barrios y ciudades", dice Adolfo Eslava Gómez, decano de la Escuela de Artes y Humanidades.
Una iniciativa de este tipo le transmite un mensaje a la ciudad y al país de que las personas están en el centro de los problemas y demandas sociales y humanas más apremiantes de la actualidad. “Es la posibilidad de construir un 'nosotros'", en voz del Decano. Y claro, humanismo e integridad se encuentran y se irradian al entorno desde este campus, en el que se cultiva el respeto por la diferencia y la diversidad, valor que se promueve en la comunidad eafitense. Sí, la tradición humanista no solo se mantiene, sino que se consolida y se renueva.
Por esto, se desarrolló la
Declaración por la Diversidad, la Inclusión y el Pluralismo, en la que en palabras de la rectora Claudia Restrepo, esta es una Institución que abre la puerta y las oportunidades a la diferencia. “Todos somos diferentes, no solo por género, elecciones sexuales o etnias… Cada uno de nosotros es único y tenemos una visión diferente, por eso la Universidad tiene que ser un lugar, no solamente seguro, sino abierto a las conversaciones difíciles que se puedan tener en contextos más diversos e incluyentes".
Un proyecto científico en conexión con el saber aplicado
¿Y qué decir de la ciencia y su papel transformador? La Universidad es generadora de nuevo conocimiento, especialmente a través de la investigación. Así, entonces, esa conversación con el futuro no solo es posible, sino que es una búsqueda permanente como analiza María Paola Podestá Correa, vicerrectora de Aprendizaje.
A su vez, Antonio Copete Villa, vicerrector de Ciencia, Tecnología e Innovación, señala que si algo ha caracterizado a la Institución es su carácter práctico en cuanto a la forma en que produce, gestiona y aplica el conocimiento. “Me atrajo la manera en que la Universidad siempre busca tener un impacto en su entorno. Parte de eso lo mostró en la coyuntura de la pandemia. Ahí se vio esa orientación de investigadores y grupos de investigación".
Se trata, entonces, de una universidad que dialoga con múltiples sectores y que también se conecta con una ciencia que tiene repercusión en la vida de las personas. En un mapa de Colombia, por ejemplo, son diversas las zonas en que la Universidad se ha hecho presente con una investigación dispuesta a buscar soluciones. En el Huila, Bajo Cauca, Urabá, el Eje Cafetero y el Valle de Aburrá (Antioquia) está la huella eafitense, que se despliega en proyectos que conversan con las vocaciones productivas de cada región. “En general, hemos visto cómo evoluciona la ciencia en la Universidad, la que ha ido en una renovación constante. Pasamos de ser una universidad de docencia a incorporar la investigación en nuestras mediciones", subraya el Vicerrector de Ciencia, Tecnología e Innovación.