Juan Camilo Montoya E.
Colaborador
Según expertos en movilidad sostenible y urbanismo, se trata de una de las mejores ciclorrutas de la ciudad por su infraestructura, arborización e independencia con las vías vehiculares.
Moverse en bici es salud, es conectarse con la ciudad, es sentir el viento y llegar más feliz al destino. Subirse a una bicicleta es contribuir con la movilidad de la ciudad y con el medio ambiente, o como dijo Humberto Iglesias Gómez, secretario de Movilidad de Medellín, “los que montan en bicicleta son los héroes de la movilidad”
Desde hace varias semanas los estudiantes, empleados y demás visitantes de EAFIT pueden disfrutar de la ciclorruta de la avenida Las Vegas (sur de Medellín), con una longitud de 2.2 kilómetros entre la calle 17 y calle 7 sur, justo en el ingreso peatonal al campus sobre Las Vegas (carrera 48).
Según expertos en movilidad sostenible EAFIT le dio la bienvenida, el miércoles 5 de septiembre, a la ciclorruta que hace posible la movilidad sostenible cerca de su campus. Según expertos en movilidad sostenible y urbanismo, se trata de una de las mejores ciclorrutas de la ciudad por su infraestructura, arborización e independencia con las vías vehiculares. “Es la ciclorruta más bella de la ciudad. Cuando uno la transita como ciclista se siente seguro, alegre bajo la sombra de los árboles y ahí es importante destacar que este es un proyecto que no escatimó esfuerzos para mantener la vegetación y proteger las raíces de los árboles. Es un corredor verde con infraestructura para el peatón y para el ciclista”, destacó Daniel Carvalho Mejía, concejal de Medellín, luego de recorrerla.
Según un informe del Área Metropolitana del Valle de Aburrá de 2016, el incremento total del parque automotor entre 2005 y 2015 fue del 182 por ciento. Mientras en 2005 el Área Metropolitana tenía el registro de 478.000 vehículos, en 2015 pasaron a ser 1.347.736.
Nicolás López es estudiante del pregrado en Comunicación Social de EAFIT y es frecuente usuario de la ciclorruta. “Estoy muy contento porque definitivamente es mejor llegar en bicicleta que en carro. Yo uso mi bici para venir a estudiar, para visitar a mi abuela o cuando voy a jugar fútbol. Muy bueno que haya llegado la ciclorruta hasta aquí porque uno siempre las encuentra en otras zonas de la ciudad como Laureles, Estadio y Conquistadores. Importante que se sigan construyendo y que llenemos la ciudad de estos espacios de norte a sur y de oriente a occidente”, indicó.
No es moda, es conciencia ambiental
El calentamiento global, el crecimiento del parque automotor, la contaminación, las enfermedades respiratorias, las crisis ambientales y los tiempos de viaje en los vehículos en las ciudades son preocupaciones vigentes de las grandes urbes hoy en el mundo.
El alto tráfico en las vías y las medidas para solucionarlo, como la construcción de más ciclorrutas y más garantías para los ciclistas, son promesas que hace cualquier candidato que aspire a gobernar una metrópoli importante.
Esta ciclorruta, que tuvo una inversión superior a los 3 mil 300 millones de pesos, representa el conector con el sur de la ciudad, con una infraestructura segregada y segura para los ciclistas que esperan poderse movilizar en un futuro por ciclorrutas desde Sabaneta hasta Moravia.
Según un informe del Área Metropolitana del Valle de Aburrá de 2016, el incremento total del parque automotor entre 2005 y 2015 fue del 182 por ciento. Mientras en 2005 el Área Metropolitana tenía el registro de 478.000 vehículos, en 2015 pasaron a ser 1.347.736. Los automóviles se duplicaron en 10 años y las motos crecieron en más del 400 por ciento, de 139.000 en 2005 se pasó a 828.629 registradas en el Valle de Aburrá hoy, según el Registro Único Nacional de Tránsito (RUNT).
Este panorama ha llevado a los gobiernos a pensar en soluciones alternativas y amigables con el medio ambiente como el uso de las bicicletas.
Según el último estudio de Origen y Destino, en Medellín, en 2012, el 0.7 por ciento de los viajes se hacían en bicicletas. Hoy la ciudad se encuentra en uno por ciento con unos 70.000 viajes por día y la meta a 2030 contemplada en el Plan Maestro Metropolitano de la Bicicleta en el Valle de Aburrá es llegar al dos por ciento en los viajes.
Respetar las señales de tránsito y los semáforos, no hacer zigzag ni pegarse de otros vehículos, evitar distraerse con el celular o escuchar música con audífonos, no subirse a los andenes y recordar que la prioridad en la vía la tienen los peatones son algunos de los puntos que sobresalen en el decálogo del buen ciclista.
En Colombia el referente es Bogotá con un nueve por ciento de viajes diarios en bicicleta, y en el mundo Ámsterdam, París, Copenhague, Barcelona y varias ciudades de Corea del Sur y China son catalogadas como las más amigables con las bicicletas por cultura, seguridad, sistemas públicos de arrendamiento, urbanismo y tráfico calmado entre otros factores.
Una ciclorruta bella, eficiente y segura
Los tres tramos que adelantó la Empresa de Desarrollo Urbano (EDU), desde Ciudad del Río hasta EAFIT, cumplen con los mejores estándares en urbanismo y seguridad para ciclistas y peatones.
La construcción de la ciclorruta incluyó la siembra de 43 nuevas especies forestales. En su mayoría, de 3.5 metros y 5 metros para que los árboles protegieran del sol a los usuarios y proporcionaran una sensación más fresca para los que la recorren. Entre las especies sembradas se destacan taútano, bálsamo, samán, ébano y guayacán rosado, entre otros.
“Nos enorgullece que una obra pública sea de la calidad y la estética con que quedó esta ciclorruta. La comunidad universitaria está muy contenta, la bicicleta no solo es un medio amigable con el medio ambiente, sino que es, ante todo, salud. Nosotros como Universidad generamos espacios seguros para que las personas cada vez hagan más uso de este modo de transporte”, aseguró Juan Luis Mejía Arango, rector EAFIT.
Esta ciclorruta, que tuvo una inversión superior a los 3 mil 300 millones de pesos, representa el conector con el sur de la ciudad, con una infraestructura segregada y segura para los ciclistas que esperan poderse movilizar en un futuro por ciclorrutas desde Sabaneta hasta Moravia.
La continuidad de la ciclorruta desde la entrada de EAFIT, en la calle 7 sur, hasta la frontera con Envigado, en la calle 21 sur, se encuentra en diseños y aprobación por parte de la EDU. Igualmente, el municipio de Envigado tiene proyectada la construcción de una por toda la avenida Las Vegas hasta Sabaneta, donde ya existe ciclorruta. Esto conectaría a Sabaneta con el centro de Medellín, hasta la zona de Carabobo Norte y Moravia.
Según Humberto Iglesias se tiene un reto grande: construir 80 kilómetros nuevos de ciclorruta en esta Administración. “Nuestra idea es terminar 2018 con 50 nuevos kilómetros construidos. Hemos avanzado en movilidad sostenible, pero lo más importante es tener la infraestructura para que los ciclistas se muevan de manera ágil y segura”. También enfatizó en que cada vez el peatón debe tener más derechos en las vías y felicitó a la Universidad por estar a disposición y sumarse a las iniciativas sostenibles de la ciudad.
En este tramo que llega a EAFIT es posible ver a comerciantes y residentes. Sin embargo, la comunidad estudiantil del Politécnico Colombiano Jaime Isaza Cadavid con 14.751 estudiantes, El Inem José Félix de Restrepo con 7.100 y EAFIT con unos 12.000 representa la población más beneficiada. La meta total del Área Metropolitana es que en diciembre de 2019 el Valle de Aburrá tenga 160 kilómetros más de ciclorrutas en todos los municipios.
Movilidad con Ciencia
Así llama EAFIT al componente comunicacional del proyecto de movilidad sostenible, con la que se desarrollan actividades para Los eafitenses ahora tienen un espacio de ciudad para darle a la bicicleta la importancia que este medio de transporte se merece. Foto: Róbinson Henao 86 fomentar el uso adecuado de la bicicleta, caminar y usar el transporte público. Respetar las señales de tránsito y los semáforos, no hacer zigzag ni pegarse de otros vehículos, evitar distraerse con el celular o escuchar música con audífonos, no subirse a los andenes y recordar que la prioridad en la vía la tienen los peatones son algunos de los puntos que sobresalen en el decálogo del buen ciclista.
Para Juan Luis Mejía la Institución pone a disposición la infraestructura adecuada para que cada vez haya más lugares para el estacionamiento adecuado y seguro de bicicletas. “También vamos a generar lugares donde se puedan reparar las bicis. Incluso, próximamente vamos a tener un parqueadero para las patinetas”. Y agregó que EAFIT hace parte del ecosistema de movilidad sostenible de la ciudad, que educa y fomenta la cultura de la bici dentro del campus y trabaja con la Alcaldía de Medellín para mantener la buena calidad de la ciclorruta, que espera que pronto conecte la Universidad con Sabaneta.
Para fomentar el uso de la bicicleta y demás prácticas a favor del medio ambiente y de la movilidad en la ciudad, EAFIT creó y ejecuta el Plan Institucional de Movilidad Sostenible. La iniciativa reúne estrategias y medidas para respirar un aire más limpio, mejorar la salud y la calidad de vida de sus estudiantes y empleados, así como aportar en la disminución de las emisiones de CO2 y material particulado en el aire de la ciudad.
Lina Marcela Rozo León, del Departamento de Planta Física de EAFIT, explicó que desde su área lideran el cumplimiento del Plan Institucional de Movilidad Sostenible que, a su vez, se entrelaza con el Plan de Movilidad Empresarial Sostenible del Área Metropolitana, dirigido a las organizaciones con más de 200 empleados.
“Optimizamos los recursos para cuidar el medio ambiente. Queremos abrir las estrategias con las que estamos comprometidos, no solo con nuestra comunidad sino con la ciudad, porque somos parte del problema y queremos ser parte de la solución”, afirmó Lina.
Este plan de EAFIT contempla estrategias para que su público en el campus universitario haga cambios en sus hábitos de movilidad, entender que Medellín tiene un tráfico difícil y unas condiciones topográficas particulares que llevan a que la contaminación se quede dentro del valle.
Recientemente, la Universidad entregó más de 200 nuevos puntos de parqueaderos para bicicletas (distribuidos en todo el campus), además que continúa con actividades culturales para fomentar el uso de este modo de transporte, plantea procesos de reflexión para ver la ciudad desde otra perspectiva más humana, más colectiva y consolida políticas de horarios flexibles y casos de teletrabajo en cargos que lo permitan.
Según Lina, la llegada de la ciclorruta de Las Vegas a la Universidad es apenas una de las acciones que EAFIT comenzará a impulsar para aportar a la movilidad sostenible. Por ejemplo, ya se puede cargar la Tarjeta Cívica dentro del campus y hay en marcha iniciativas de “carpooling” (carro compartido).
“Cada uno tiene que hacer un esfuerzo y un compromiso por las generaciones que vienen. Inauguramos esta ciclorruta, vamos a promover el carro compartido, las caminatas, vamos a gestionar modificaciones de infraestructura para que la gente acceda mejor al Metro y vamos a mostrar en la Universidad las opciones de rutas de buses para llegar. Todos tenemos que sumar, hay que cambiar la mentalidad”, dijo la coordinadora.