Vehículos eléctricos, computadores portátiles, teléfonos celulares, reproductores MP3, baterías y otra serie de dispositivos de uso cotidiano basan gran parte de su funcionamiento en el litio. Se trata de una industria en constante expansión y crecimiento, y que, según algunos científicos, podría traer múltiples beneficios al planeta.
Por ese motivo, cuatro holandeses y un colombiano viajaron hasta Bolivia, país con una de las mayores reservas de este mineral, para estudiarlo a fondo y conocer sus posibilidades de explotación e industrialización.
Esteban García Tamayo, ingeniero físico de EAFIT, integró esta misión académica que tuvo, como principal propósito, diseñar un plan de producción para las baterías de ion-litio.
El contacto fue establecido entre la Gerencia Nacional de Recursos Evaporíticos de la Corporación Minera de Bolivia, y el Gobierno de los Países Bajos, quienes unieron esfuerzos para aprovechar la existencia de este elemento y empezar la fabricación, investigación y posterior comercialización del producto.
Como estudiante de doctorado en la Universidad Técnica de Delft (TUDelft), el trabajo del egresado eafitense consistió en asesorar académicamente este proyecto.
"Las implicaciones de esta iniciativa son enormes, pues existe la posibilidad de bajar los costos de los insumos para la producción y el aumento de la rentabilidad de la industria boliviana", explica el ingeniero.
Inicialmente, el eafitense tuvo la responsabilidad de establecer intercambios entre universidades bolivianas y TUDelf en el tema de materiales para la producción, con la intención de formar 40 investigadores, dos doctores y varios técnicos especializados en el manejo de instrumentos necesarios para este campo.
E, igualmente, se encargó de recopilar información para la implementación de un laboratorio de investigación, desarrollo e innovación (I+D+i) de alta calidad, con equipos de alta tecnología para la investigación, control de calidad de las baterías y transferencia de tecnología, y que contaría con una planta en la ciudad de Potosí (Bolivia).
De esta manera, se convirtió en un punto de encuentro entre expertos del país suramericano, con científicos del
DaVinci Laboratory Solutions y
Battery Technology International, compañías holandesas expertas en manufactura y aplicación.
Esteban también aplaude la participación y apoyo de Holanda, país en el que se encuentra radicado desde 2009, pues asegura que se trata de uno de los más adelantados en la investigación y manufactura del litio.
La curiosidad comenzó en EAFIT
Desde que se encontraba cursando su pregrado en Ingeniería Física, en EAFIT, Esteban García Tamayo ya se sentía apasionado por el estudio de este mineral.
Justamente su tesis de grado consistió en el desarrollo y análisis de nuevos materiales para ánodos en baterías de ion-litio e, incluso, estuvo vinculado al Grupo de Investigación en Electromagnetismo Aplicado, de la Escuela de Ciencias y Humanidades, un espacio donde pudo profundizar en este asunto académico.
"La Universidad me formó con un amplio bagaje de conocimientos en ciencias básicas, herramientas ingenieriles y, también, habilidades sociales que me permiten enfrentar diversas situaciones en la vida profesional", comenta el estudiante de doctorado de TUDelft.
Esteban también menciona que llegó a esta institución holandesa gracias a la beca-crédito-convenio de intercambio que pudo obtener a través de EAFIT.
En la actualidad, este egresado se encuentra en la etapa final de su doctorado. Una vez lo culmine, espera regresar al país para vincularse en alguno de los proyectos en temas de nanotecnología y ciencia que actualmente se están adelantando.