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30 de agosto de 2012

La Fundación Crecer quiere revolucionar la educación 

Este estudiante de Ingeniería de Sistemas expuso los avances de la Fundación Crecer en la séptima muestra Emprender.

• El estudiante Sergio Monsalve Castañeda es el líder de la Fundación Crecer, una propuesta que comenzó como una iniciativa de empresarismo y que hoy es un proyecto social.

• La Fundación trabaja por una transformación en la educación tradicional, por medio de herramientas como el coaching, la programación neurolingüística y la educación experiencial.

Con herramientas como coaching, programación neurolingüística y educación experiencial, entre otras, un estudiante eafitense se ha trazado como objetivo plantear una revolución en la educación tradicional.

Se trata de Sergio Monsalve Castañeda un futuro ingeniero de sistemas que se ha apasionado, no solo por la solución de los problemas matemáticos propios de su carrera, sino también por los asuntos sociales en los que pueda aplicar sus conocimientos.

Es, por eso, que se dio a la tarea de darle vida a la Fundación Crecer, con la experiencia recogida en su desempeño como vicepresidente de Desarrollo Integral en la Organización Estudiantil y representante estudiantil ante el comité de su carrera y el Consejo Directivo.

“Hace dos años empecé a buscar en dónde quería hacer mi práctica profesional y me di cuenta de que había una opción en empresarismo. Me llamó la atención, tomé la materia y comencé a darle forma a esta idea, en la que venía trabajando desde hace mucho tiempo”, recuerda el estudiante de último semestre.

La propuesta de Sergio, la misma que presentó el pasado 24 de julio en la séptima edición de la Muestra Emprender, es un modelo de negocio que busca potenciar las competencias de estudiantes de los últimos años de bachillerato mediante tres servicios específicos.

 “Uno de estos es un inventario sobre las competencias de un grupo determinado, a través de talleres presenciales de 8 a 16 horas de duración y en los que se puedan potenciar diferentes habilidades con la ayuda del coaching, la programación neurolingüística y la educación experiencial”, explica el líder de la propuesta.

Otro de los servicios es realizar talleres sobre competencias específicas y, finalmente, la Fundación le apuntará a actividades de estimulación académica, a partir de la lúdica, motivando la curiosidad y el aprendizaje.

El estudiante comenta que realizarán las actividades tanto con las personas que estén interesadas en la propuesta, como con aquellos que los escuchen en planteles educativos.

“Nos orientamos a un nicho que está desatendido y, sobre todo, a una edad en la que existen muchas preguntas sobre la vida y en la que se necesita adquirir habilidades técnicas, comunicativas, de liderazgo, de trabajo en equipo y de resolución de conflictos”, dice

Profesionales de diferentes áreas

Según Sergio Monsalve, el apoyo de posibles inversionistas, como otras instituciones afines y ONG, sería clave para el desarrollo del proyecto. Sin embargo, la Fundación está preparada para comenzar a operar con sus propios recursos.

“La meta es poder formalizar esta fundación el próximo año y, para esto, cuento con el apoyo y la colaboración de diferentes personas en campos como la administración de negocios, el diseño gráfico, la psicología, la docencia, la filosofía y la pedagogía”, expresa.

Entre ellos está David Vélez Cuervo, de octavo semestre de Administración de Negocios. En un principio, el estudiante se vinculó con el aporte de ideas y el desarrollo del proyecto. Sin embargo, una vez se encuentre más consolidado, espera desempeñarse como director de proyectos de la Fundación.

Es decir, sería el encargado de las estrategias de la compañía desde su planificación hasta su ejecución, y definir qué se va a realizar, cuándo, cómo y con qué recursos.

“Esto es algo que realmente me reta profesionalmente y que requiere de todo mi empeño y motivación, pero también es una excelente forma de contribuir a un cambio en la situación actual de la ciudad y del país, y esta Institución va a ser fundamental en la medida en que logre aportar a la educación de las personas”, comenta David.

En total son 10 personas involucradas en esta iniciativa y cerca de 50 interesados en tomar parte- “Este es un proyecto que quiere impactar tanto en las personas que puedan pagar como en las que no, por eso es tan importante contar con este pie de fuerza inicial”, recalca el emprendedor.

Sergio Monsalve y su equipo también están acompañados por el Centro para la Innovación, Consultoría y Empresarismo (Cice), en todo lo que tiene que ver con el esquema financiero de la propuesta, los estudios de mercado, la labor de divulgación y a establecer contactos con los posibles inversionistas.

“En los colegios se trabaja con base en las necesidades de las personas y nuestra intención es llegar a cada uno, saber qué le interesa, qué quiere aprender o qué le gusta. Con estos servicios podremos lograr eso”, reafirma Sergio.​