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18 de julio de 2012

‘Kiwi’ con sabor a innovación

‘Kiwi’ en el discurso que pronunció tras ganar el premio como Innovadora Solidaria del Año.

• A Lina Marcela Cataño, a quien en la U. conocen más como Kiwi, le llegó otra distinción: Innovadora Solidaria del año en los Premios TR35 Colombia.

• El premio lo entregó la revista Technology Review, del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT). ¿Su mérito? La participación en la creación de la spin off Utópica EAFIT.

Un tiro muy común en ‘Kiwi’ es, por ejemplo, “ese señor es más buena gente que Pacheco”. Y así, por donde camina, ella deja caer chanzas, frases que la convierten en todo un personaje entre quienes la conocen y, además, la reconocen.

A su familia, por ejemplo, no le parece algo extraño o raro que Lina Marcela, que es en realidad su nombre, camine siempre en contravía, es decir, diferente al común de la gente.

“Pero es una contravía sana”, responde Lina cuando se le pregunta por la forma como asume los retos personales y profesionales, los que le permitieron ser parte de la lista de ganadores de los Premios TR35 Colombia, que resalta a los 10 jóvenes innovadores, menores de 35 años, más destacados del país.

Es más, entre estos, Lina Marcela obtuvo la distinción como Innovadora Solidaria del Año, galardón que recibió, el jueves 12 de julio en Plaza Mayor Medellín, por parte de la revista Technology Review, del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), la que organiza estos premios desde hace más de una década.

¿Y que si son importantes? Bueno, solo debe decirse que personajes de la talla de Mark Zuckerberg, fundador de Facebook; o Sergey Brin, uno de los creadores de Google, lo recibieron en algún momento de sus vidas. Como quien dice, ¡sí son muy importantes!

Y es que como aparece registrado en el sitio web de EmTech Colombia -evento sobre tecnologías emergentes que se efectuó el 11 y 12 de julio en Medellín-, el objetivo de los premios que recibió ‘Kiwi’ es encontrar trabajos fascinantes, inspiradores y nuevos, capaces de revolucionar el mundo de la tecnología y los negocios en un futuro próximo.

“Se lo dedico a Andrés Walker”

Lina Marcela Cataño Bedoya tiene 26 años y cursa los últimos semestres del pregrado en Ingeniería de Diseño de Producto. Junto a su compañero Andrés Walker creó lo que se conoce como la spin off Utópica EAFIT, que construye prototipos de plataformas flotantes para zonas de inundaciones.

La propuesta hizo parte del trabajo de grado de Andrés y Sergio Molina que, con el tiempo, se convirtió en esta iniciativa que cuenta con un alto impacto social para comunidades vulnerables.

Y si se unió a esta iniciativa es porque a ‘Kiwi’ la caracteriza una cualidad: pensar en acciones y en proyectos que mejoren la calidad de vida de las personas.

“Me honra mucho recibir el premio”, expresó Lina Marcela una vez tuvo en sus manos el galardón como Innovadora Solidaria del Año, acto durante el que afirmó que es muy importante para su grupo saber que están haciendo las cosas de forma correcta. “Nos sabemos muy afortunados, y lo digo porque este premio también pertenece a Andrés Walker Uribe, mi socio; y a la Universidad EAFIT, que se la jugó siempre por nosotros”.

Pero, ¿cómo resultó Lina en este proyecto? Es sencillo: la eafitense relata que cuando sus dos compañeros de carrera comenzaron el proyecto y lo presentaron ella trabajaba en otra spin off, en Tezio-EAFIT. “Yo conocí a Andrés, mi actual socio, en una clase, y él me decía que era muy bueno lo que yo hacía. No obstante, quería dedicarme a crear objetos que mejoraran las vidas de las demás personas”, cuenta.

Al principio del proyecto, Lina reconoce que había incredulidad, sin embargo, animó a Andrés y a Sergio para que siguieran adelante. Así, en un comienzo, anota, no iba a entrar al grupo, pero en el Centro para la Innovación, Consultoría y Empresarismo (Cice) de EAFIT le solicitaron que se incluyera para mirar la pertinencia de esta propuesta.

“Siento una alegría muy grande al recibir este premio porque conozco lo que le he dado al proyecto, pero también sé que he estado muy bien acompañada. Esto tiene un impacto social muy fuerte. Somos jóvenes, pero estamos dando la talla”.

A Lina Marcela la enorgullece, de igual manera, un detalle: “Lo que me parece más increíble es que entre las 10 personas que nos ganamos el premio soy la única mujer. También sé que el MIT es una de las mejores universidades de los Estados Unidos. Es que, la verdad, creo que todavía no alcanzo a dimensionar lo que logré”.

‘Kiwi’ es, por sus características, una eterna innovadora. Años atrás había ganado, junto a otros compañeros, un premio de la Alcaldía de Medellín -gracias a una convocatoria del Centro de Ciencia y Tecnología de Antioquia- con una grúa para movilización de pacientes. “A mí me gusta servirle a las personas y saber qué les sucede”, detalla la estudiante, quien está convencida de que esa responsabilidad se debe a los valores que le inculcaron sus padres y a que se ha acercado, en diferentes etapas de la vida, a la literatura.

“Soy una afortunada, pero nada de esto es gratis. Eso sí, a diferencia de muchas personas, no solo me quiero ganar la lotería, sino que quiero trabajar y sacrificarme al máximo”.

Para estos reconocimientos, la Universidad postuló a varios emprendedores menores de 35 años. Luego de un proceso, el MIT decidió premiar a Lina Marcela.

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