A Natalia y a Ismaria las conecta la historia

La propuesta era sencilla. En un mapa interactivo la persona pincharía un país e, inmediatamente, recibiría información sobre los juegos tradicionales de esa región, su historia y si habría relación con los que se practican en Colombia.

Pero, ¿y eso para qué? Pues porque desde hacía algunos meses, Metroparques estaba interesado en ampliar sus líneas de negocio en el campo de la recreación, y por ese motivo buscó al grupo de investigación en Sociedades, Políticas e Historias Conectadas de la Universidad para que los acompañara durante este proceso.

La idea que le presentaron a esta entidad gubernamental proponía una fusión de herramientas tecnológicas con el componente histórico de la academia, lo que se tradujo en la iniciativa que mezcla por uno lado datos y por otro lúdica.

Este, por ejemplo, es tan solo un ejemplo de la labor de asesoría y consultoría que presta este grupo a empresas públicas y privadas de la ciudad sobre temas sociales e históricos, y en el que confluye el trabajo de profesionales de diferentes campos como la sociología, la filosofía, la literatura, las artes o el derecho.

Una de ellas es Natalia Londoño Restrepo, quien desde hace un años se encuentra vinculada como auxiliar de investigación.

“Ellos sacaron una convocatoria e inmediatamente me presenté porque tengo un gusto muy grande por la historia y lo que significa para la humanidad”, afirma la estudiante de sexto semestre de Comunicación Social.

Ahora Natalia combina sus deberes universitarios con su participación en el semillero del grupo como investigadora, las representaciones regionales y nacionales, y ocasionalmente su intervención en la consultoría con empresas.

“Estoy trabajando en un proyecto que se llama Travesías de los saberes entre Europa, África y América entre los siglos XVIII y XIX. Allí he podido aprender cómo han circulado desde hace tanto tiempo los conocimientos y prácticas entre estos continentes y las influencias que se mantienen hoy en día”, manifiesta.

Sin embargo, ¿qué le puede aportar un grupo de investigación especializado en asuntos históricos a una empresa? Adolfo León Maya Salazar, docente del Departamento de Humanidades y codirector de este colectivo, afirma que la relación va mucho más allá de lo aparente. “Una empresa tiene que conocer su pasado para saber hacia dónde se dirige”, explica.

Según el académico e investigador, cada vez son más las empresas que demandan una compañía en el manejo de sus patrimonios, de su información y de sus archivos, y que reconocen la necesidad no solo de conservar su memoria, sino de tener un soporte técnico a la hora de elaborar proyectos de cualquier índole.

Así como Metroparques, otras empresas como la Fábrica de Licores de Antioquia o la Central Mayorista de Antioquia también han buscado los servicios de consultoría del grupo, que en la actualidad cuenta con cerca de 12 integrantes y la participación constante de alumnos de los diferentes programas de pregrado de la Universidad, así como los de posgrado.

La consultoría con empresas es parte de su portafolio de servicios y así lo demostraron en las dos ediciones pasadas de Tecnnova, donde tuvieron la oportunidad de participar. Allí también estuvo Ismaria Zapata Hoyos, una estudiante de la maestría en Estudios Humanísticos que se desempeña como asistente de investigación.

“Lo que nosotros les planteamos a las empresas es una reconstrucción de sus historias, recopilamos su patrimonio material e inmaterial y los ayudamos a conocer su evolución a través del tiempo”, explica la estudiante.

De esta manera se pueden realizar cartografías de sus empleados, historiografías de sus procedimientos o recuperación de archivos perdidos, guardados o desorganizados.

Además de esta tarea, Ismaria tiene a su cargo otras responsabilidades como coordinar el semillero de investigación, los proyectos de los estudiantes inscritos en este, las participaciones en los encuentros de la Red de Semilleros, la logística de eventos y la investigación.

Como estudiante de maestría, su proyecto de grado debe estar inscrito en un grupo de investigación y la eafitense aprovechó su participación en el grupo para desarrollar su tema Saberes, prácticas y pedagogías de las escuelas de artes y oficios de Colombia, en la segunda mitad del siglo XIX. Un caso de historias conectadas.

“La investigación nunca para en este grupo, por eso decidí conectar mi trabajo con el proyecto que tengo a mi cargo (las travesías de los saberes entre Europa, África y América), mostrar cómo se relacionan y permitir que se retroalimenten”, cuenta Ismaria.

El grupo de investigación se fundó en 2000 y, durante sus más de 10 años de historia, cuenta con un semillero, una clasificación en la categoría A de Colciencias, y un amplio repertorio de libros y capítulos de textos, ponencias, artículos de prensa, exposiciones y eventos, entre otras producciones que avalan su recorrido.

Uno de sus integrantes más antiguos y activos es Juan Luis Mejía Arango, rector de la Universidad, pero también se encuentran vinculados profesores de EAFIT y de otras instituciones nacionales e internacionales.

Historia, política y sociedad; Historia cultura y sociedad; e Historia, arte y sociedad son sus tres líneas de investigación y desde estos frentes se adelantan diversos proyectos que se apoyan en fuentes primarias, archivos históricos, colecciones, alianzas de cooperación internacional y, por supuesto, en la Sala de Patrimonio Documental.​​