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Noticias / Opinión

13 de febrero de 2013

Las opiniones publicadas en esta sección son responsabilidad de cada columnista, y no representan necesariamente el pensamiento y la visión de la Universidad EAFIT.
Léalo, si no la ha visto

Por Juanita Saldarriaga Torres, estudiante de quinto semestre de Comunicación Social.

 
La promesa de un mañana mejor llega con la película Una aventura extraordinaria (originalmente, Life of Pi), en la que se viven los momentos de choque que se experimentan cuando solo se tiene a uno mismo. ¿Qué tanto te conocerás al encontrarte solo en un bote en medio del mar?

Life of Pi es una película que superó mis expectativas desde el momento en el que comenzó. La fotografía hizo una alianza con la naturaleza como invitación a recordar la belleza de la tierra y, sobre todo, su perfección.

Los colores y los animales mostraron la grandeza de Dios por medio de planos de detalle y acercamiento que dejaban al descubierto cada uno de sus más íntimos detalles.

La India, un lugar tan caótico y a la vez tan paradisíaco, fue la responsable de unir la fuerza de la religión y la naturaleza con marcos excepcionales, protagonizados en su mayoría por Piscine Patel, mejor conocido como Pi.

Guiada y concluida la historia, quisiera destacar unos detalles que me impactaron lo suficiente como para aclararlos en este artículo.

El primero es, sin duda, el contraste que tiene la realidad y la ficción en la película, pues, aunque en medio del hilo que se desarrolla parece difícil creer todas las aventuras que Pi vive mientras navega, al final, con una estocada definitiva, el autor une las vivencias del protagonista y las maquilla con un poco de esperanza.

El segundo factor que me emocionó mientras rodaba la cinta, fue la precisión de las imágenes y su adaptación. Si bien los paisajes que se mostraban no existen, se podía admirar la belleza de los colores y la realidad que transmitían.

Y el tercer aspecto que me impactó de la película fue la explicación del nombre del protagonista y su procedencia, algo que el autor desenvolvió con mucha facilidad y con un toque bastante divertido.

Sin dudarlo, Life of Pi o Una aventura extraordinaria en español, trae la moraleja de una realidad que todos deberíamos asumir: recordar las escenas vividas con un tanto de imaginación para sacar siempre lo mejor de todo.

Y con esto, hago honor al célebre Charles Chaplin quien decía: “La vida es una obra de teatro que no permite ensayos… Por eso, canta, ríe, baila, llora y vive intensamente cada momento de tu vida, antes de que el telón se baje y la obra termine sin aplausos”.