El Libro Blanco busca construir referentes comunes para ordenar las funciones que cada actor desarrolle en la materia dentro de sus respectivos ámbitos de competencia e injerencia, con el fin de obtener resultados previamente definidos y acordados en términos de enfrentar, contener y reducir fenómenos cambiantes de violencia, delincuencia, incivilidad e inseguridad. (Sánchez, 2011)