Texto
  
Cartas1
0
carta1.jpg

SEÑORES ​​​

UNIVERSIDAD EAFIT


De acuerdo con el comunicado enviado por ustedes el día 7 de noviembre de 2013, me permito informar que he cometido un error al presentar una documentación ilegítima del examen TOEIC presentado a la Universidad y que hoy deseo resarcirlo, lo cual entiendo y asumo como una falta disciplinaria delicada contemplada en el reglamento de nuestra Universidad. Hoy no me invade otro sentimiento más que una gran tristeza y decepción conmigo mismo por tratar de buscar una salida fácil como tanto lo hace el “avispado”, a diferencia del gran aprendizaje que he obtenido con tan vergonzosa experiencia, porque puedo asegurar que en la vida estamos en un constante proceso de aprendizaje en el cual necesitamos tropezar y vivir situaciones intensas que nos lleven a reflexionar sobre el papel que estamos cumpliendo en sociedad, para así cuestionarnos y actuar correctamente.


Sé que fui en contra de los estatutos de esta Universidad y estoy dispuesto a asumir las consecuencias de mis actos y tratar de resarcir mis errores como muestra de mi sincero arrepentimiento, por lo tanto me gustaría ayudar y apoyar a la campaña sobre valores que viene liderando la universidad “Atreverse a Pensar”, porque lastimosamente hasta que no lo vivamos en carne propia no comprendemos que tan importante es poner en juego nuestro futuro en una decisión apresurada, sin fundamento y  qué tan diferente hubiera sido si me hubiera atrevido a pensar. Pienso que la experiencia y los casos reales serían de gran ayuda para dar fe de esta campaña y sensibilizar a los estudiantes sobre la importancia de actuar siempre bajo el buen obrar. En mi caso me dejé llevar por el afán de recibir un cartón para lograr avanzar laboralmente y para darle una alegría a mis padres quienes esperaban con ansias dicha fecha.


Como ser humano acepto que me equivoqué y espero me den una nueva oportunidad de reivindicarme, de mostrarles la calidad de profesional que han formado.

De nuevo pido mil disculpas por el error y la falta cometida.


*Hemos omitido el nombre de quien escribe esta carta.​



  
Cartas2
1
carta2.jpg

Toda la semana santa he pensado bastante y he reflexionado sobre los actos no solo el que por desgracia realice el jueves pasado en tu clase sino en todas aquellas acciones que día a día viven en mi presente y están ahí esperándome para cuando yo me caiga o de un mal paso. Esto no solo me pasa a mí sino a todos en común, tenemos diferentes situaciones que siempre nos acompañan y que está en nosotros decidir si tomarlas o dejarlos. Uno de ellos fue el pasado jueves, cuando decidí optar por la manera más fácil pero a la vez más difícil de acabar con mi nota del parcial. Créeme que más que un 0, es un vacío grande que siento porque jamás me había sentido como pasó dicho día. 


Mis lágrimas no fueron falsas, mis palabras no fueron falsas, todo me salió de mi corazón y fue ahí donde me di cuenta que el error que había cometido no era una simple pasteliada, sino un desequilibrio tanto para la profesora como para los compañeros, y más importante todavía el intentar involucrar a una persona tan especial como lo es mi compañera de clase. Esto fue lo más duro porque sin pensarlo en su momento y solo por sacar un beneficio para mí, terminé involucrando a muchas personas y creándoles desconfianza en mí.


He pensado bastante todos los días y definitivamente me siento mal con la profesora, no por ser mi profesor sino por el ser humano que es ella; una persona que es recta, con un nivel de excelencia increíble que nos ha dado todas las herramientas para luchar por las coas que queremos pero de la mejor manera, sin pasar por encima de nadie y sin realizar actos como el que realicé.


Hoy quiero disculparme contigo. No busco una nota, no busco mi conveniencia; busco un perdón por parte de mi compañera y por parte de la profesora, quienes han depositado en mí toda la confianza posible y tristemente no les cumplí; pero no más arrepentimientos, pienso también que es momento de seguir y de no bajar la mirada y de luchar por este sueño que llevo muy dentro de mí que es crecer como persona y salir adelante en mis estudios. Quiero así mismo luchar el doble por esta materia, que con la ayuda de mis compañeros y confiando en mis capacidades sé que voy a dar lo mejor de mí.


Gracias por permitirme estas palabras, de verdad que nunca había escrito un error en el cual me haya afectado tanto, y lo más importante es que pude sacar esas palabras que tenía dentro y tranquilizar mi cuerpo y mi mente.


Un saludo muy formal y de nuevo mil gracias profesora.​


  
Cartas3
2
carta2.jpg

​Escribir una anécdota de fraude no es lo más cómodo, sobre todo cuando el de del fraude es uno. Yo lo hice varias veces, más de las que los profesores se dieron cuenta pero menos que algunos de mis compañeros y amigos.


Si me preguntan cuáles, pues digo que varios: ´pasteliar´ en un examen, escribir cosas en la calculadora, y mandar a hacer trabajos para algunas materias. Me acuerdo mucho de un ensayo de 10 páginas que había que hacer para un final. Mi tema era el liberalismo económico y yo nunca fui muy bueno en economía, tampoco tenía el método de estudio más eficiente, y al final cuando no tenía más tiempo me contaron de alguien que hacía trabajos. Lo mandé a hacer, lo entregué y como fue tan buena nota (4.8 creo) no tuve que hacer sustentación.


Hoy después de que ya pasaron esas clases y las notas no me importan, porque ya las tengo, sé que no me las merezco. Sé que perdí oportunidades de aprender temas específicos (como el liberalismo económico) pero sobretodo perdí oportunidades de demostrarme que soy capaz de hacer cosas por mí mismo.


Hoy entiendo esto, pero hace un tiempo no lo veía así, además cuando todos lo hacen uno se acostumbra a verlo como algo tan normal. La pereza que da hacer trabajos se alimenta del hecho de que sea normal mandarlos a hacer. Entonces uno se siente tranquilo (no en paz con uno, pero si tranquilo) porque no es el único que lo hace y porque los profesores no lo ´pillan´ o no lo quieren ´pillar´.


Yo pues no soy nadie para decirle a los otros estudiantes que no hagan las cosas que yo (y varios) hemos hecho. Pero sí puedo decirles por experiencia que ser mediocre que se vuelve un hábito y uno se acostumbra a dar menos de lo que puede, a conformarse con pasar raspado y que 3 es bien, lo demás es lujo.​