Después de la creación de la Escuela de Ingenierías en 1979, la Escuela de Ciencias y Humanidades representó una de las transformaciones más importante de la estructura académica que ha vivido la Universidad en su historia. Con esta, la Universidad dio un salto definitivo que la llevó a una comprensión de la amplitud de saberes y, especialmente, una base filosófica y científica representada en los dos departamentos con los que se creó: Humanidades y Ciencias Básicas.
Esta iniciativa, tomada después de una profunda reflexión, permitió una comprensión más amplia del conocimiento, fundamentada en una base filosófica y científica.
La creación de esta nueva escuela, con los departamentos de Humanidades y Ciencias Básicas, consolidó un enfoque multidisciplinario que anteriormente estaba disperso. Aunque los departamentos ya existían desde los inicios de la Universidad, estaban integrados a otras escuelas, siendo considerados como departamentos de servicios, sin la capacidad de incidir plenamente en la formación académica.
Con el tiempo, la Escuela de Ciencias y Humanidades se consolidó como un centro de pensamiento humanista. Además de los departamentos de Humanidades y Ciencias Básicas, se sumaron otros proyectos como la carrera de Música y la Orquesta Sinfónica EAFIT en el año 2000, reflejando así un compromiso con la expresión cultural y las artes.
En el 2014, tras una revisión exhaustiva de los procesos internos, se tomó la decisión de separar el Departamento de Ciencias Básicas para crear la Escuela de Ciencias, mientras que la Escuela de Humanidades enfocaría sus esfuerzos en el ámbito humanista. Este cambio de enfoque y estructura permitió una mayor especialización y profundización en cada área.
En el 2022, la Escuela de Humanidades pasó a llamarse Escuela de Artes y Humanidades, reflejando su compromiso con la promoción y desarrollo de las artes y las humanidades. Además, se crearon tres áreas de conocimiento:
- Cultura: esta área se dedica a interpretar y cuestionar sistemas de pensamiento, relaciones de poder, formas de conocimiento, tradiciones y prácticas históricamente situadas que influyen en los modos de vida de las comunidades. Utiliza una diversidad metodológica para proponer diagnósticos, mediaciones e intervenciones que aborden las demandas actuales y promuevan el cambio cultural.
- Lenguaje: estudia textos, discursos y prácticas en diversos contextos sociales, políticos, estéticos y científicos. Emplea métodos y perspectivas como la gramática, el análisis del discurso, la teoría de la argumentación y la hermenéutica para comprender y analizar la comunicación humana en sus diversas manifestaciones.
- Creación: se ocupa de comprender, experimentar, comunicar y transformar saberes, prácticas y conocimientos en los ámbitos de la obra-proyecto, la curaduría-intermediación y la circulación-apropiación de procesos y productos creativos y culturales. Promueve la innovación y la expresión artística en diversas áreas como las artes, la música y la literatura, así como en los ecosistemas de las industrias creativas y la cultura digital.
Actualmente, la Escuela de Artes y Humanidades ofrece
cinco programas de pregrado,
nueve programas de posgrado, incluyendo ocho maestrías y un doctorado, y una gran oferta de
educación continua para todos los públicos. Es la encargada de dirigir uno de los centros de incidencia de la Universidad, el
Centro Humanista, una instancia de saber aplicado que conversa con la realidad, la comprende e incide en su transformación mediante investigaciones aplicadas y consultorías en temas como la confianza, la integridad, la deliberación, los entornos digitales, la innovación educativa, la cultura y el comportamiento. Además, cuenta con un ecosistema de laboratorios de investigación y creación, con el que se busca impulsar la interdisciplinariedad de las áreas, potenciar habilidades de estudiantes y docentes, y aprovechar la experiencia en procesos de lectura y escritura, apropiación creativa de las TIC, aprendizaje transmedia, creación de mundos virtuales, apropiación y expansión cultural, y producción y posproducción sonora.
A través de estas áreas de conocimiento, desde la Escuela de Artes y Humanidades nos comprometemos a ofrecer una educación de calidad, realizar investigación relevante y contribuir activamente al desarrollo social y cultural, tanto dentro como fuera de la Universidad.