René Uribe Ferrer fue Maestro de Maestros. Dotado de una inteligencia asombrosa y culta, a la que supo darle el refinamiento que solo logran los pocos hombres que hacen de su vida una búsqueda sin límites en procura de la perfección, hizo de su sabiduría, de su conocimiento y de su experiencia vital una cátedra universitaria abierta a las preguntas y a la reflexión, que a manera de un manantial siempre diáfano y fresco sirvió para que en ella abrevara y calmara su sed la juventud que ávida de sentido y trascendencia quería comprender la vida, el mundo, la historia de las ideas y la sociedad.
¿Desea adquirir este libro? Comuníquese con nosotros