Es una especie nativa de Colombia, Venezuela y las Guyanas. Se encuentra entre los 0 y 1000 msnm en colinas, llanuras y cuencas de los ríos.
Su principal beneficio es la fruta que produce, el mamoncillo, que tiene un sabor agridulce, que se cosecha y vende por racimos. Se usa también para la preparación de jugos, bebidas alcohólicas y jaleas, y es de particular importancia para los indígenas de la región del Orinoco, que lo consumen cuando hay escasez de cazabe. Su madera es usada para carbón y leña.