Investigadores eafitenses estudian los efectos de las CSA, modelo que une a familias agricultoras con consumidores urbanos

EAFIT, en el marco del programa Orquídeas, de Minciencias, lidera una investigación sobre la factibilidad y los efectos de Comunidades que Sustentan la Agricultura (CSA), que conectan a campesinos con consumidores urbanos, creando una red solidaria que garantiza ingresos justos y prácticas sostenibles.

La investigación se realiza a partir de cuatro estudios de caso y busca generar evidencia para impulsar políticas públicas que promuevan modelos de economía solidaria. La Universidad, además, alberga la CSA Camino a la Montaña, en la que participa una familia de agricultores de San Antonio de Prado (Medellín).

  • Inicio
  • Investigadores Eafitenses Estudian Los Efectos de Las CSA, Modelo Que Une A Familias Agricultoras Con Consumidores Urbanos
Imagen Investigadores eafitenses estudian los efectos de las CSA, modelo que une a familias agricultoras con consumidores urbanos
En los últimos 4 años EAFIT ha gestionado proyectos que impactan 32 departamentos de Colombia, en más de 300 municipios rurales y urbanos del país. En la imagen, una de las visitas de la investigadora en la CSA El Maná.

De acuerdo con el Informe de la Misión para la Transformación del Campo, elaborado por el Departamento Nacional de Planeación, el 69 % de la población que habita en zonas rurales en Colombia vive en situación de pobreza. Además, una familia campesina gana, en promedio, solo un tercio de lo que gana una familia urbana. Ante esta realidad, las Comunidades que Sustentan la Agricultura (CSA) surgen como una alternativa solidaria que une directamente a familias campesinas con consumidores urbanos (llamados coagricultores en esta iniciativa), promoviendo ingresos justos, alimentos limpios y prácticas sostenibles.

Además de ser parte activa de esta experiencia, Carolina Alzate Gouzy, posdoctoranda en EAFIT con el programa Orquídeas del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación y cofundadora de la Red CSA Colombia, lidera una investigación que estudia la factibilidad y los efectos de este modelo de economía solidaria a partir de cuatro estudios de caso: dos en el Valle del Cauca y dos en Támesis, Antioquia.

El objetivo de la investigación —en la que Carolina cuenta con el apoyo de Manuela Guevara, joven investigadora, y la tutoría del profesor Juan Carlos Muñoz, de la Escuela de Finanzas Economía y Gobierno de EAFIT— es generar conocimiento científico que contribuya a la formulación de políticas públicas que integren el campo y la ciudad desde una perspectiva agroecológica.

Los primeros hallazgos de la investigación muestran que las CSA ofrecen alimentos que no se encuentran en los mercados convencionales de Tuluá y Medellín, y que los valores en esos sitios superan el 10 % comparado con el valor de la suscripción a la iniciativa. Quienes participan activamente en los espacios de intercambio y encuentro de las CSA desarrollan un fuerte sentido de pertenencia y conciencia, lo que influye en su permanencia en la comunidad.

La diversificación de cultivos en las fincas, además, ha generado beneficios inmediatos tanto en la alimentación de las familias urbanas como en la de las propias agricultoras, transformando positivamente sus dinámicas de producción.

El impacto de las CSA va más allá de los alimentos. Estas comunidades regeneran el tejido social, promueven hábitos alimentarios más saludables y enfrentan con resiliencia los retos del cambio climático. Sin embargo, los desafíos son numerosos. Según Carolina Alzate, uno de los principales es de carácter cultural: “Prevalece la comida rápida, el consumismo que genera la idea que podemos consumir lo que queramos cuando queramos sin tener en cuenta el costo ambiental y social que está por detrás”.

Otro hito clave en ese proyecto ha sido demostrar que “cuando las mujeres rurales lideran procesos de cambio desde sus propias familias y territorios, se generan soluciones sólidas y sostenibles. A partir de experiencias concretas, se han fortalecido prácticas que impulsan la soberanía alimentaria, promueven el uso responsable de los recursos naturales y abren nuevas posibilidades para el desarrollo económico local”, reflexiona Juliana Ortíz Marín, jefa de la Unidad de proyectos en CTeI de EAFIT.

Una red que une el campo y la ciudad

Este modelo, nacido en Japón en los años 70 bajo el nombre Teikei, propone una alianza directa entre agricultores y consumidores para compartir alimentos frescos, agroecológicos y cultivados sin intermediarios. En Colombia, las CSA comenzaron a florecer en 2020 y hoy conforman una red creciente de colaboración, conciencia ambiental y economía solidaria.

Actualmente, existen 18 CSA activas en el país, que benefician a 45 familias agricultoras y más de 350 familias urbanas. Estas alianzas permiten cultivar una diversidad de más de 150 especies alimenticias y promueven la conservación de la biodiversidad. En departamentos como Antioquia, Valle del Cauca, Risaralda y Cundinamarca, las CSA ya no solo se entienden como una práctica de consumo, sino como una acción política y ética que construye comunidad.

“En este caso en particular, además de Antioquia tuvimos la oportunidad de trabajar con el departamento del Valle de Cauca, permitiéndole a los investigadores conocer y dinamizar las realidades de este territorio. Cada investigador o investigadora que viaja a un nuevo territorio por fuera de Antioquia representa el conocimiento, la capacidad técnica y el compromiso de EAFIT con el desarrollo regional y nacional”, explica Juliana, quien agrega que los proyectos de CTeI con alcance regional, nacional e internacional son una de las manifestaciones de la decisión de EAFIT de expandir sus capacidades y conocimiento a nuevos territorios y comunidades.

Para Mónica Martínez Martina, docente del programa de Ingeniería Ambiental en la Universidad Central del Valle del Cauca, su experiencia como coagricultora ha sido transformadora. “Me ha permitido comprender de cerca las dinámicas del campo, las realidades de los campesinos y la importancia de establecer relaciones más justas y humanas en la cadena alimentaria”, afirma. Igualmente, resalta que las CSA son una herramienta poderosa para construir soberanía alimentaria y promover prácticas agrícolas sostenibles.

Desde otra perspectiva, Dayana Quintero Ceballos, agricultora de la CSA El Maná en el Valle del Cauca, destaca el valor de esta conexión directa. “Mi experiencia con la CSA ha sido muy bonita. Esa reconexión con las personas que se alimentan de los frutos de nuestra finca es muy especial. Ya no es solo producir en cantidad, sino crear comunidad en torno a la tierra”, cuenta.

CSA universitaria

Camino a la Montaña, una comunidad que vincula a una familia agricultora de San Antonio de Prado con miembros de la comunidad universitaria, es la CSA que alberga EAFIT. Cada jueves, don Rubén Vélez y doña Luz Dary Gómez preparan canastas agroecológicas que se entregan a los empleados de la Universidad, fortaleciendo así el vínculo entre quienes cultivan y quienes consumen.

“En la práctica, cuando te suscribes a una CSA, ofreces un aporte financiero mensual, el compromiso mínimo es de tres meses, pero la idea es que te quedes con tu familia agricultora siempre. Cada semana recibes una canasta con un promedio de 10 alimentos diferentes, frescos, agroecológicos, directo de la tierra y de las manos de tu agricultor o agricultora”, afirma la investigadora Carolina Alzate.

Dayana coincide con Carolina al decir que en “la CSA se crea una relación más cercana. Se trata de rescatar lo que se ha perdido, valorar el campo, entender que la alimentación de calidad comienza con cuidar la tierra y a quienes la trabajan. Eso, sin duda, nos favorece a todos”.

El programa Orquídeas

El programa Orquídeas del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación (MinCiencias) en Colombia es una estrategia para reducir la brecha de género en ciencia y tecnología, impulsando a doctoras jóvenes e investigadoras. Esta iniciativa otorga financiación a proyectos posdoctorales liderados por mujeres con enfoque en investigación desarrollo tecnológico e innovación.

Según Juliana Ortíz Marín, “desde el proyecto comunidades que sustentan la agricultura - CSA, además de cumplir con los lineamientos del programa, hemos dado un paso más allá al incorporar una perspectiva de género en todas las etapas de la ejecución. No solo el equipo de gestión que acompaña este proceso está conformado en su mayoría por mujeres, sino que también hemos identificado que todas las familias participantes del proyecto son lideradas por mujeres. Esto habla del empoderamiento femenino en el territorio, del rol protagónico de las mujeres en los procesos de transformación social y la gestión de proyectos de Ciencia, Tecnología e Innovación, que le apuestan al cierre de brechas de género”.

Las personas interesadas en conocer más sobre las CSA o en vincularse a alguna de las iniciativas activas pueden comunicarse a los números de WhatsApp 318 640 7962 (Valle del Cauca) o 322 710 7673 (Antioquia).
 

Historias y noticias recomendadas

Imagen El Sol tiene 4.500 millones de años, y aún no lo entendemos del todo
Tecnología e innovación
El Sol tiene 4.500 millones de años, y aún no lo entendemos del todo

Estudiar el Sol es mucho más que una curiosidad astronómica: es una necesidad para entender el presente de nuestra vida en la Tierra y prepararnos para el futuro. Este astro, del que depende el 99.9 % de la energía que alimenta el sistema solar, no solo permite que exista vida, sino que también plantea riesgos concretos para una civilización cada vez más conectada tecnológicamente. 

Leer más
July 23, 2025
Imagen Resultados de la Mesa de Empleo de Antioquia indican que la generación de empleo está en auge
Sociedad y democracia
Resultados de la Mesa de Empleo de Antioquia indican que la generación de empleo está en auge

Una sensación de optimismo deja el primer informe de la Mesa del Empleo de Antioquia, que entrega las principales tendencias del mercado laboral antioqueño en el primer trimestre de 2025.

Leer más
July 22, 2025
Imagen El Ministerio de Educación y EAFIT impulsan vocaciones científicas en más de 27.000 estudiantes
Sociedad y democracia
El Ministerio de Educación y EAFIT impulsan vocaciones científicas en más de 27.000 estudiantes

La maloca del Resguardo Quillasinga Refugio del Sol, ubicada en El Encano (Pasto, Nariño), fue el escenario donde el pasado 18 de julio se dio apertura oficial a la implementación 2025 de la estrategia Centros de Interés para la Formación Integral en Ciencia, Tecnología e Innovación (CTeI).

Leer más
July 22, 2025

Última actualización

June 20, 2025

Our campuses

 

Línea nacional: 01 8000 515 900

WhatsApp: (57) 310 899 2908

 

Carrera 49 N° 7 Sur-50

National line: 01 8000 515 900

Service line: (57) 604 2619500

 

Carrera 19 #12-70 Megacentro Pinares

Service line: (57) 606 3214115, 606 3214119

 

Carrera 15 #88-64 oficina 401

Service line: (57) 601 6114618

 

Km 3.5 vía Don Diego – Rionegro