Viajar a China para hacer negocios, ¡lo que debes saber antes de aterrizar!
China no es solo un mercado, es un universo con sus propias reglas, ritmos y códigos culturales. Esta lista reúne consejos esenciales para personas que viajan por primera vez al país asiático, con énfasis en el contexto digital, los valores culturales en los negocios y las claves para construir una relación comercial sólida y duradera.

1. Descarga las aplicaciones que necesitas antes de viajar
En China no puedes descargar aplicaciones móviles como Google, WhatsApp o Instagram. En su lugar puedes usar WeChat, Alipay, la versión china de Didi, y aplicaciones de mapas y de los sistemas de transporte público de la ciudad que visites. También es importante una buena VPN –red privada virtual–, como Astrill, ExpressVPN o NordVPN. Una vez en China no tendrás acceso a las tiendas de aplicaciones.
2. Datos en móviles China
Si tienes una tarjeta SIM internacional, verifica con tu operador si esta funciona en China de manera que puedas acceder a tus datos móviles sin preocuparte por las restricciones locales. Así podrías usar Google, WhatsApp o Instagram sin necesidad de una VPN, ya que estarás conectado a redes internacionales desde tu SIM. También puedes instalar una eSIM internacional que incluya datos para China. De todas formas, siempre es recomendable tener instalada y activada una buena aplicación VPN.
3. WeChat es tu tarjeta de presentación
En China todo se negocia, se puede pagar y se coordina por WeChat. No tener esta aplicación equivale a no existir en el mundo profesional chino. Úsala para guardar de manera consciente y organizada cada contacto. Registra la ciudad donde está ubicado tu contacto, su oficina o fábrica; su nombre occidental –muchos chinos utilizan un seudónimo o nombre en inglés–; y su apellido en chino –pregunta cómo se escribe su apellido en el alfabeto latino o pinyin–. Por ejemplo “Shanghai David Zhang” o “Yiwu Daniel Liu”. ¡Luego lo agradecerás!
4. Pago digital en China
El dinero en efectivo casi ha desaparecido en China. El 90% de los pagos diarios, desde una botella de agua hasta una cena, se realizan a través de aplicaciones móviles como Alipay (支付宝) o WeChat Pay (微信支付). En muchas tiendas, taxis o restaurantes no se aceptan tarjetas internacionales, así que configurar tu método de pago digital antes de viajar es clave para moverte con tranquilidad y evitar situaciones incómodas.
Una opción muy práctica para pagar en China es usar Alipay. Incluso si eres extranjero, puedes vincular tu tarjeta de crédito internacional –Visa o Mastercard– directamente desde esta aplicación. Aquí te dejo un paso a paso para configurar Alipay antes de viajar:
- Descarga Alipay desde App Store o Google Play.
- Abre la aplicación y selecciona “Sign up” para registrarte.
- Regístrate con tu número de celular, no necesitas uno chino.
- En el menú principal, entra a “Me” > “Bank Cards” > “Add Card”.
- Ingresa los datos de tu tarjeta de crédito y tu pasaporte.
- Verifica tu identidad y establece una contraseña de 6 dígitos.
- ¡Listo! Ya puedes pagar escaneando códigos QR en comercios, taxis y restaurantes.
Dato extra: dentro de Alipay también puedes acceder directamente a Didi, la aplicación de transporte más usada en China. Es importante aclarar que el Didi que se usa en China no es el mismo que encontramos en Colombia. Por eso, usar Didi directamente desde Alipay es una excelente opción: puedes pedir taxis o autos privados y pagar en una sola aplicación, sin necesidad de instalar la versión china de Didi por separado.
5. Usa mapas y direcciones con caracteres chinos
Google Maps no funciona en China, por lo que es necesario usar aplicaciones locales como Baidu Maps (百度地图) o Gaode (Amap). Además, es fundamental que las direcciones que necesites estén escritas en caracteres chinos –chino mandarín–, ya que la mayoría de los taxistas o transeúntes no entienden ni leen direcciones en pinyin o inglés. Guarda en tu teléfono capturas de pantalla o notas con las direcciones importantes en chino: el hotel, lugares de reuniones, estaciones clave del metro, etc. Esto te evitará que te pierdas y facilitará tu movilidad en cualquier ciudad del país.
6. Trip.com para organizar tus trayectos internos
Trip.com –antes llamada CTrip– es la aplicación más completa para organizar viajes dentro de China. Desde Trip.com puedes reservar hoteles, vuelos nacionales, trenes de alta velocidad, buses, traslados y actividades turísticas sin necesidad de entender chino mandarín. Esta aplicación está disponible en inglés y permite pagar con tarjetas internacionales. Es especialmente útil si vas a moverte entre ciudades o necesitas un lugar confiable para gestionar cambios o cancelaciones.
7. Más allá de la primera impresión
Antes de siquiera pensar en cerrar un trato, es vital comprender las dinámicas culturales, los códigos sociales y las formas de autoridad en China. Esto no solo facilita el respeto mutuo, sino que permite interpretar adecuadamente los gestos, las conversaciones y los tiempos de respuesta. Sin esta lectura cultural profunda, cualquier estrategia corre el riesgo de fracasar, por brillante que parezca sobre el papel.
8. Guanxi (关系): tu activo más valioso en China
Las relaciones personales o “guanxi”, son la columna vertebral de cualquier iniciativa exitosa en China. No se trata solo de conocer personas, sino de construir confianza a largo plazo, con reciprocidad, lealtad y respeto. Sin guanxi, la entrada al mercado será más lenta, más costosa y, en muchos casos, inviable.
9. Mianzi (面子): el arte invisible de negociar
El concepto de “mianzi” –la “cara” o reputación–, influye en todas las interacciones. Herir el orgullo de un socio, incluso de forma involuntaria, puede cerrar puertas para siempre. Negociar en China exige tacto, indirectas bien empleadas y un manejo cuidadoso de las jerarquías, donde el respeto vale tanto como el contenido del acuerdo. No subestimes los gestos formales: entregar la tarjeta con ambas manos, hacer una ligera reverencia, y mantener un tono respetuoso, son pequeños gestos que generan gran impacto. Tampoco se acostumbra dar besos o abrazos cuando te presentan a alguien.
10. No todo es lo que parece
Muchas empresas chinas operan con capas de poder no evidentes a primera vista. La figura que parece tener autoridad puede no ser quien toma las decisiones. Mapear correctamente los niveles de influencia y entender los flujos de aprobación internos permite evitar errores críticos y ahorrar tiempo valioso.
11. Aliados estratégicos
Seleccionar socios y proveedores en China no es una tarea menor. Es un proceso que debe considerar experiencia, reputación local, capacidad de respuesta y, sobre todo, alineación cultural. Visitas presenciales, auditorías previas y un seguimiento riguroso son esenciales para construir relaciones duraderas y proteger tu inversión.
12. Detrás del silencio: leer las variables ocultas de la negociación
Negociar en China requiere paciencia, lectura entre líneas y capacidad para entender lo que no se dice. Las decisiones rara vez son inmediatas. El silencio no significa rechazo, sino reflexión, análisis o consulta interna. Quien presiona demasiado pierde poder. Quien sabe esperar y observa con atención, suele salir ganando. Por otro lado, es muy importante tener tacto con algunos temas sensibles en el plano cultural y político: evita expresar juicios personales sobre Xinjiang, Taiwán, o el Tíbet. Incluso una broma puede cerrarte una puerta.
13. Blindar lo intangible
La innovación no es suficiente si no está protegida. Registrar marcas, patentes y diseños en China, de forma local y temprana, debe ser parte del plan inicial, no una reacción tardía. Acompañar ese blindaje con cláusulas contractuales claras refuerza la seriedad de la relación y evita costosos litigios a futuro.
Autores
Sebastián Giraldo Duque 鲁天
Empresario y consultor sobre negocios en China
Juliana Correa-Jaramillo
Profesora de la Escuela de Administración EAFIT
Laura Echavarría Peláez
Ilustradora