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René Restrepo Gómez

Los investigadores te cuentan

​René Restrepo Gómez

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Desde niño, René Restrepo se interesó en construir modelos a escala de carros o turbinas con latas de cerveza, hacer diseños con piezas de lego y pasar tiempo en la pequeña empresa de su padre, junto a las grandes máquinas circulares para cortar tela que tanto le llamaban la atención. Esa curiosidad por hacer y conocer diferentes temas lo llevó a encontrar en la investigación un camino diferente dentro de la ingeniería, lleno de ideas y cosas nuevas por descubrir.
 
Actualmente, es profesor del departamento de Ciencias Físicas de la Universidad EAFIT.
Ingeniero mecánico con estudios en física, René ha investigado sobre óptica en proyectos como la construcción de un satélite que orbitará el Sol​ y del telescopio más grande del mundo, junto con grandes centros de ciencia e ingeniería como el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial de España.
 
En este momento, René investiga una propiedad de la luz llamada fase, para lograr ver imágenes más nítidas y fieles a la real, a través de sistemas ópticos como el microscopio, el telescopio o la cámara fotográfica.
 

Recordando días del pasado

¿Había un juego en particular que le gustara cuando era un niño? ¿Por qué?
Me gustaba mucho jugar con lego (piezas de plástico interconectables), porque me permitía armar diferentes cosas, lo que fomentaba mi creatividad.
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También tenía otro pasatiempo con mi hermano mayor: recoger latas de cerveza, recortarlas y usar el aluminio para hacer a escala, camiones, turbinas o hasta el DeLorean, carro insignia de Volver al futuro, una película muy famosa de 1985.
 
¿Con quién compartía y pasaba la mayor parte del tiempo cuando era niño? ¿Por qué?
Con mi hermano mayor y con mis amigos del barrio y del colegio. Con ellos solía hacer muchas actividades al aire libre como jugar fútbol, acampar e ir a conciertos.
 
¿Hubo algún profesor que lo marcó significativamente? ¿Por qué?
Durante el pregrado me marcó mucho el profesor Daniel Velásquez, quien me guió y adentró en el tema de la investigación. A su vez, el profesor Tomás Belenguer, director de mi tesis de doctorado, también me aportó gran cantidad de conocimientos, tanto técnicos como éticos.
 
Si en sus manos estuviera proponer un modelo educativo para las nuevas generaciones, ¿en qué consistiría?
Creo que un buen modelo debe promover el acceso y la importancia de la educación. Ahora es muy estratificada y no da las mismas oportunidades en cuanto a calidad entre entidades públicas y privadas. Es por esto que esta debe ser inclusiva, equitativa y para todos, en especial para los niños y adolescentes.
 
Así mismo, pienso que el modelo educativo debe ser más enfocado en enseñar, tomando en cuenta las diferentes habilidades que cada uno posee, para así potencializarlas, en lugar de equipararlas unas con otras.
 

Viviendo el aquí y el ahora

¿Hay algo que lo obsesiona?
Muchas cosas, pero en especial temas como la antropología cultural, interés que descubrí hace poco, y la astronomía, sobre todo en el área de divulgación. Me gustaría llegar a ser un buen comunicador de la ciencia, como lo hacen los astrónomos y astrofísicos, quienes tienen gran capacidad de dar a conocer sus investigaciones y hacer que las personas les atraiga este mundo que puede llegar hacer tan complejo.
 
¿En qué cree?
En la ciencia, creo que tiene grandes virtudes. Una de ellas, por ejemplo, es que las personas, una vez se apasionan por ella, se vuelven más curiosas y sedientas de conocimiento, lo cual genera ideas que se convierten en una invitación para movernos y  descubrir nuevas formas de pensamiento.
 
¿Hubo algún acontecimiento determinante que lo llevará a descubrir su vocación profesional?
Fue un proceso evolutivo y personal. Siempre me he cuestionado muchas cosas y a partir de estas dudas y preguntas hechas a mí mismo y a mis padres fui formando el camino que me llevó a lo que hago hoy en día.
 
Además, en todo este aprendizaje me he visto marcado por diferentes referentes a nivel mundial, a los cuales miro no para competir, sino para fijarme retos y superarme y a si alcanzar lo que me propongo.
 
 
¿Cómo le explicaría a los ciudadanos la importancia y necesidad de realizar investigaciones en el área de la óptica?
Una buena forma de mostrarle a la ciudadanía la importancia de investigar,  es a través de jornadas abiertas, como las que realiza la NASA, donde las personas pueden ver las investigaciones que se llevan a cabo y cómo funcionan; además de la posibilidad de mirar cómo trabajan los científicos en sus proyectos. Son espacios que le muestran a la comunidad que la ciencia es importante y accesible para todos.
 
Junto a estos eventos, considero que también se necesitan personas, sobre todo comunicadores, que aprendan sobre divulgación científica, para que así esta no sea unilateral, sino pensada por un grupo especializado y comunicada por otro que sepa cómo llega a públicos no especializados.
 
Si usted tuviera que personificar el objeto de su investigación, ¿Cómo describiría su personalidad?
La luz es algo que no ves, pero que siempre te toca y está presente. Es un gran espectro del cual percibimos muy poco por la vista, pero que en sí es un universo muy grande por descubrir,  y es vital para la vida.